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Jul 15, 2020, 12 tweets

#Hilo Hace 52 años tuve la fortuna de hacer historia. Con paso decidido y saludos a los cuatro puntos cardinales fui la primera mujer en encender el Fuego Olímpico en lo más alto del Estadio de Ciudad Universitaria. Esta es mi vida, la de Norma Enriqueta Basilio Sotelo. 👇

🗓️ Nací un 15 de julio de 1948, en Mexicali, Baja California. Desde muy joven vi en el atletismo una oportunidad de hacer mi vida y antes de que cumpliera 20 años fui campeona nacional de los 80 metros con vallas.

🕯️ Pero es necesario aclarar que no era la gran estrella del atletismo y no tenía mucha experiencia en competencias internacionales y por extraños designios fui la encargada de encender el pebetero de los #JuegosOlímpicos el 12 de octubre de 1968.

🏃‍♀️ En las semanas previas al inicio de los juegos, nos pudimos enterar que el Comité Organizador había decidido romper el esquema de un hombre encendiendo el pebetero y ya buscaban a una mujer pero no sabían a quién designar.

🇨🇺 Recuerdo muy bien que tuve un buen desempeño en una prueba en Cuba y alguien de los organizadores me preguntó si aceptaría prender el fuego.

📰 Y la sorpresa vino cuando un diario publicó la nota de que yo sería la portadora final y quien llevaría el fuego hasta lo más alto del estadio, era como un asunto irreal, hasta que unos días después, en una conferencia de prensa se confirmó la noticia.

🗣️ Tampoco puedo olvidar a quienes dijeron que cómo era posible que una mujer fuera el relevo final del Fuego Olímpico, de cómo era posible que una corredora que apenas tenía 20 años y que de las competencias juveniles había brincado a los Olímpicos, tuviera tal privilegio.

😆 Otra historia fue la de la ropa que portaba al momento de la ceremonia. A los organizadores simplemente se les olvido mi uniforme y yo opté por mi ropa de entrenamiento, toda blanca.

👋 Los escalones fueron hechos al tamaño de mi pie y con el espacio que se adecuaba a mi ritmo de carrera, y lo del saludo a los puntos cardinales se me ocurrió a mí, ya que nadie lo había hecho hasta el momento.

👏 Silencio total en el estadio, mi carrera pausada, los atletas invadiendo la pista y lo impensable, una mujer portando el fuego y alistándose para encender el emblemático pebetero, historia pura en unos minutos.

🙌 Aquel momento me hizo una celebridad y un emblema de la lucha de las mujeres por sus derechos, aquel momento fue un rompimiento de viejas costumbres y la reivindicación de las mujeres como factor de cambio.

👉 En 2004, en reconocimiento a la relevancia de ese 12 de octubre de 1968, en el mismo Estadio de Ciudad Universitaria tuve la oportunidad de ser uno de los relevos del Fuego Olímpico que viajaba hacia los Juegos de Atenas, sin duda, otro momento inolvidable.

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