«¿No es increíble todo lo que puede tener dentro un lápiz?»
#Quino ✍️
El brillante dibujante argentino Joaquín Salvador Lavado, murió este miércoles a sus 88 años. Fue reconocido mundialmente por ser el creador de #Mafalda, personaje inolvidable que perdurará por siempre.
Quino nació el 17 de julio de 1932 en la localidad española de Fuengirola, sus padres eran españoles que emigraron a Argentina cuando Quino tenía cuatro años de edad, huyendo con su familia de la Guerra Civil española, hicieron de la ciudad de Mendoza su hogar.
«Yo nací en España, en Fuengirola, y a los cuatro años la Guerra Civil llegó a mi casa, y mi familia la vivió como una tragedia porque la perdimos. Ya en la Argentina, a los ocho, en los noticieros de los cines veía la Segunda Guerra Mundial.»
Lo llamaron Quino desde pequeño para distinguirlo de su tío, el ilustrador Joaquín, quien fue el que despertó su vocación de dibujante a una edad muy temprana. Cuenta la historia que sus padres llamaron a su tío para que los cuide mientras ellos iban al cine y sucedió la magia:
«Mis padres llamaron a mi tío para que nos entretuviera a mis hermanos y a mí, no había televisión en esa época y esa noche el tío Joaquín, sacó lápiz y papel y se puso a dibujar y a mí se me abrió un mundo que nunca había soñado, de un lapicito sale lo que se te dé la gana».
En 1945 tras la muerte de su madre, con trece años empezó a estudiar Bellas Artes en Mendoza, el clasicismo no le convenció y se dedicó al cómic. Su padre murió poco después, cuando Quino tenía diecisiete años, abandonó la escuela, decidido a convertirse en autor de historietas.
A los 18 años se fue a vivir a Buenos Aires y en 1954, luego de varias penurias económicas logró publicar su primera tira cómica en el semanario “Esto es”. Fue el día más feliz de su vida!, recordaba. Desde ese momento publicó en muchos otros medios.
Poco después empezó a hacer dibujos publicitarios. En 1963 publicó su primer de varios libros: “Mundo Quino”. Y en ese mismo año nació su más emblemático personaje, convirtiéndose con el tiempo en uno más de los grandes mitos argentinos: #Mafalda.
Quino creó a Mafalda en 1963, cuando la agencia de publicidad porteña en la que trabajaba le encomendó una campaña publicitaria. El anuncio nunca vio la luz, y la primera historieta de Mafalda se acabaría publicando el 29 de septiembre de 1964 en el semanario ‘Primera Plana’.
Las aventuras de #Mafalda se publicaron entre 1964 y 1973, reeditándose, traduciéndose, replicándose en revistas y diarios, recorriendo el mundo y las distintas generaciones durante más de 50 años. Mafalda, y su sabiduría, un personaje vigente, queridísimo e inolvidable.
El nacimiento de Mafalda ocurrió en los convulsos y revolucionarios años sesenta de Argentina y Latinoamérica. Una niña de inocentes ideas progresistas y pacifistas que marcaron e ilustraron a una generación joven, e hicieron reflexionar a los adultos.
Tras abandonar la tira de Mafalda el 25 de junio de 1973, según él mismo por agotársele las ideas, #Quino y su esposa Alicia decidieron irse a vivir a Milán, Italia, continuó realizando páginas de humor y viajó continuamente a la Argentina.
El genio dibujante y su Mafalda recibieron múltiples homenajes y galardones por todo el mundo, en mayo de 2014 obtuvo entre imparables aplausos el 'Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades', y el mismo año el título de Caballero de la Legión de Honor de Francia.
En 2009, el “periodista que dibuja”, cómo se definió #Quino, anunció su retiro. Aseguró que aunque las historias le seguían llegando a la mente, las «limitaciones físicas», como las operaciones a las que se sometió en el ojo, no le permitían seguir con lo que más le gustaba.
«Por lo único que la edad no te resulta una porquería es porque vas entendiendo mejor la música que escuchas desde toda la vida (…) Le vas descubriendo cosas que antes no se las descubrías», dijo.
Su esposa murió hace tres años, hecho que lo sumergió en una profunda tristeza. Luego de esta pérdida se había instalado en Mendoza y falleció este 30 de septiembre, dejando en desconsuelo no solo a los argentinos sino a todos sus seguidores en el mundo.
Quino, el hombre que pensaba con la lucidez y la sabiduría de un niño, será recordado por la esplendidez de su obra. Y siempre existirá una Mafalda, en algún lindo rincón... haciéndonos pensar un poco, y recordándonos la grandeza de su creador! Ambos, ahora son inmortales.
«Yo le tengo mucho cariño a Mafalda por todo lo que me ha dado, la alegría que me ha dado, el reconocimiento de la gente, todo, pero a los demás personajes míos aunque aparecían nada más que un día, una semana nada más, les tengo el mismo cariño.»
#Quino ✍️
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