Thread by @AlekayX

MITOLOGÍA GRIEGA: LA HISTORIA DE ORIÓN
Abro hilo:⏬

La constelación de Orión es una de las más reconocidas en el mundo, con el cinturón bien marcado y su arma de cazador.
No todos conocemos la historia de Orión. Le atribuimos su muerte a un escorpión que lo acompaña entre las estrellas, pero esta es solo el final de su vida.

En la mitología griega Orión fue un gigante que, según algunas versiones, nació de los orígenes de los dioses Zeus, Poseidón y Hermes.
En la Odisea de Homero, Orión era un experto cazador, siempre con su arco, mazo o espada, y a veces con alguna presa o la piel de un animal.

Debido a su afán por la caza, viajó por ciudades y territorios, llegando a Hiria, donde gobernaba el rey Enopión. Fue recibido gratamente y en el palacio de Enopión conoció a la princesa Mérope. Orión se enamoró de ella y le pidió al rey que le permitiera casarse con ella.

Orión no le tendría fácil, pues Enopión amaba a su hija y no quería que nadie la desposara. Entonces, maquinó un plan para deshacerse de Orión: Encargó al gigante cazador matar a todas las bestias salvajes que acechaban Hiria y como recompensa le entregaría a Mérope.

El rey quedó sorprendido al ver que todos los días Orión regresaba al palacio a entregar a Mérope las pieles de las bestias que había cazado. Cuando terminó, Orión reclamó a Merope como su esposa, pero Enopión trató de evadirlo diciéndole que aún quedaban algunas bestias vivas.

Enopión trató de evadirlo diciéndole que aún quedaban algunas bestias vivas. A sabiendas de que lo estaban engañando, Orión bebió el vino que guardaba el rey y se embriagó tanto que violó a Mérope sin pensar en las consecuencias.

El rey Enopión contempló enfurecido a Orión recostado al lado de su hija. Ordenó que, en cuanto Orión despertase, el mismo aprovecharía la situación para sacarle los ojos como castigo por la violación de su hija.

Sin vista, Orión decide pedirle ayuda a Hefesto quien le proporcionó al pequeño Cedalión como su guía, Orión recordó que en uno de sus viajes a Oriente, se decía que si veía el rostro a Helios, el dios sol, recobrarían la vista.
Es así donde emprende un largo viaje con Cedalión.

Ambos llegaron a la parte más lejana del océano.
En ese momento Orión giró su rostro a donde resplandecía Helios, y así recuperó sus ojos y la visión.
De esta manera decide volver a Heria, pero antes de llegar, hizo una escala en Delos, donde la diosa Eos se enamoró de él.

Eos acompañó a Orión a Hiria para vengarse de Enopión, pero el rey estaba escondido en unas habitaciones subterráneas y pudo huir de Orión. El gigante pensó que el rey había huido a Creta a buscar asilo en el reino de Minos. Viajó a la isla donde se encontró con la diosa Artemisa

Antes de llegar a Hiria, cuando ambos se conocieron, Orión no llegó a sentir lo mismo por Eos, aun así, accedió a acostarse con ella en una isla consagrada al dios Apolo, quien no consentiría el acto entre Eos y el cazador.
Este dato, nos ayudará para entender el final de su vida

Siguiendo con la historia, la diosa Artemisa admiró las capacidades de Orión y le pidió que abandonara su búsqueda de venganza y mejor se quedara a cazar con ella. 
Apolo no olvidaba lo que Eos y Orión habían hecho en su isla.
Acudió a la diosa Gea en busca de venganza.

Gea le contó que Orión era un cazador presumido que se jactaba de asesinar a cualquier bestia salvaje. De esta manera, Gea envió un escorpión gigante a matarlo.
Mientras Orión disfrutaba de la caza en la playa, fue ese momento cuando se le apareció un escorpión gigante.

Orión se lanzó contra él, pero notó que su coraza era más fuerte que sus flechas y lanza. Asustado, se lanza al mar para huir.
Mientras tanto, Apolo buscó a Artemisa y le contó que un cazador (Candaor) iba a Delfos a por Opis, una sacerdotisa suya, para corromper su virginidad.

Artemisa se apresuró a lanzar la flecha al cazador, sin darse cuenta que Candaor era el nombre beocio de Orión.
Cuando vio el cuerpo flotante de Orión, lloró desconsoladamente.
Como consuelo, Artemisa elevó a Orión y el escorpión al firmamento, convirtiéndolos en constelaciones.