¡CÓMO MOLAN ÉSTE TIPO DE DATOS!
Han contado las palmeras canarias que hay en el archipiélago.
Tenemos nada más y nada menos que 542.680 Phoenix canariensis repartidas por las islas.
¿Listos para conocer algo más sobre nuestras 🌴?
#DiadeCanarias
#Canariasbiodiversa
Gran Canaria y La Gomera concentran el 50% de las palmeras canarias.
La distribución por isla es la siguiente:
Gran Canaria: 175.789
La Gomera: 116.329
Tenerife: 103.065
Fuerteventura: 73.223
Lanzarote: 58.613
La Palma: 24.377
El Hierro: 2.126
Por cierto, en ninguno de los islotes del archipiélago existen palmeras.
Ni Lobos, ni Alegranza, ni Montaña Clara cuentan con Phoenix canariensis.
En la Graciosa, en cambio, existen unas 200, todas por supuesto, plantadas por el hombre, ninguna silvestre.
Los palmerales formaban parte del gran bosque termófilo que existía en las medianías de las islas junto a acebuches, sabinas, lentiscos y almácigos.
Juba II describió en su viaje a las "Fortunatae insulae" en el siglo I a.c la abundancia de "palmetas" en forma de grandes bosques
¿Qué nos queda de esos grandes "bosques" que nos cuentas las crónicas?
Los palmerales silvestres se concentran casi en exclusiva en Gran Canaria y La Gomera, mientras que en islas como Lanzarote y El Hierro han desaparecido.
En el resto, su presencia es testimonial.
En la actualidad, el 80% de los palmerales se encuentran entre el nivel del mar y los 800 m.
Solo Gran Canaria conserva palmerales silvestres por encima de los 1.000 metros.
La palmera natural situada a mayor altura está muy cerca del Roque Nublo, nada menos que a 1.458 m
¿Qué tal si nos damos un paseo por alguna de éstas joyas naturales que nos quedan en Canarias?
En La Gomera destacan los palmerales naturales de Las Toscas, Tazo, Cubaba, Alojera y Valle Gran Rey
Ahora volamos sobre Gran Canaria, donde destacan el pameral de la cuenca del Guiniguada, junto a Las Palmas de G.C, y los situados en Fataga, Santa Brígida o San Bartolomé.
En esta isla también nos encontramos con un palmeral cuanto menos curioso. Quedó parcialmente inundado por la construción de la Presa de Soria en el municipio de Mogán.
En la isla de Tenerife, los palmerales silvestres mas destacados se concentran en Masca y en San Andrés.
La relevancia de la palmera canaria y los palmerales como valor paisajístico es indudable.
Sus poblaciones han constituido desde siempre un elemento característico del paisaje canario. Así, en 1991 fue nombrada símbolo vegetal de Canarias.
Los palmerales constituyen un magnífico ejemplo de desarrollo sostenible de un recurso natural.
Sus troncos se han utilizado como colmenas.
Sus frondes como inmejorables escobas y sus hojas para cestería
Pero es la obtención de su savia para la miel de palma su producto estrella
¿Sabías que existen palmeras hembra y palmeras macho?
Los ejemplares macho presentan numerosas flores blancas que liberan gran cantidad de polen, mientras que los ejemplares hembra presentan una inflorescencia amarilla que darán como resultado el fruto, la támara.
Los palmerales son interesantísimos ecosistemas. Las támaras son alimento de cuervos, mirlos o herrerillos.
En las palmeras nidifíca el cernícalo, el buho chico o la abubilla, mientras el suelo es hogar de nuestros lagartos endémicos canarios.
Incluso es frecuente observar como troncos de palmeras sirven como hábitat especial para múltiples especies vegetales. Suelen aparecer diferentes tipos de helechos, bejeques, sonchus o fumarias.
Incluso en Tenerife aparece documentado un caso de un drago epífito en Taoro.
¿Pensabas que solo había palmeras canarias (Phoenix canariensis) en nuestras islas?
Hace 200 años comenzaron a hacerse famosas fuera del archipielago por su gran porte y empezaron a plantarlas en los cinco continentes.
El primer naturalista que se llevó semillas (que se tengan noticias) fue Christen Smith en 1815.
Las plantó en el jardín botánico de Oslo.
Crecieron en invernadero, ya que no aguantaban las nevadas.
La última murio en el año 2000.
El siguiente en plantar palmeras canarias fue el vizconde Vigier que las consiguió en un vivero de Bélgica. Las plantó en uno de sus palacios en Niza en 1866. Se popularizó de tal forma que se convierte rápidamente en la favorita de los jardines de la costa mediterranea francesa
También llegó a Australia. La primera palmera canaria se plantó en el Jardín Botánico de Adelaida, en el año 1855 y todavía sigue en pie presidiendo la institución.
En Sídney, también en Australia, la Phoenix canariensis fue introducida en 1908, plantadas en el Centennial Park. Muchas de las palmeras todavía lucen una maravillosa presencia.
Pero donde más fama cogió a nivel mundial fue en Estados Unidos.
Llegó sobre 1850 cuando empezó a utilizarse por los grandes millonarios para sus mansiones y hoteles.
Henry Nehrling fue quien introdujo la Phoenix canariensis en La Florida.
El Sr Nehrling no se llevó las primeras semillas a EEUU desde Canarias, sino que procedían de las que habían llevado a la Rivera francesa, aunque años más tarde viajó hasta Canarias para recogerlas directamente en nuestras islas.
La explosión fue en California, con viveros que se especializaron en nuestra palmera en plena colonización del oeste americano y la fiebre del oro.
Sus grandes avenidas, parques y zonas públicas se iban plantando de palmera canaria.
¿No me creen?
Miren 👇
Hoy por hoy, nuestra palmera se enfrenta a muchos problemas.
Plagas, como el picudo rojo, o hibridaciones con la palmera datilera, son hechos suficientemente importantes para que nuestras instituciones velen por el símbolo vegetal que nos une.
FELIZ DÍA DE CANARIAS.
Bibliografía y fotos.
-Pellagofio
-Atlas de Gran Canaria
-Daute digital
-Palmerales de phoenix canariensis endémicos de Canarias
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