#Hilo 🧵📺📽️ Se cumplen 48 años de la muerte de uno de los mayores comediantes de la historia de México, Germán Genaro Cipriano Gómez Valdés Castillo, mejor conocido como ‘Tin Tan’. Acá le recordamos como actor, cantante y voz de personajes inolvidables.
El nacimiento de quien fuera el prototipo del ‘pachuco’ ocurrió en septiembre de 1915, en una vecindad ubicada en lo que hoy es Avenida Hidalgo y Reforma Norte. La familia se mudó primero a Veracruz y más tarde a Ciudad Juárez, en donde Germán decidió dedicarse a la farándula.
Sobre los múltiples oficios de Germán, Manuel ‘El Loco’ Valdés alguna vez dijo que su carnal fue sastre, locutor, cantante, guía de turistas, actor de doblaje y estudioso de los pachucos.
Su primer oportunidad ocurrió cuando apenas tenía 19 años en la estación XEJ de Ciudad Juárez, en donde al lampiño artista se le ocurrió imitar a Agustín Lara e inventar el personaje de ‘Topillo Tapas’ que fue todo un suceso por su gran manejo del llamado ‘Spanglish’.
En 1943, se unió a la caravana musical de Paco Miller y para entonces ya trabajaba al lado de Marcelo Chávez, ‘El Carnal Marcelo’ y fue durante aquellas giras interminables por el país que adoptó el sobrenombre de ‘Tin Tan’.
La leyenda en torno al apodo es que fue Paco Miller quien se lo puso y que lo tomó prestado de Juan Muñoz Leyva, una estrella de radio chilena, conocida como ‘El niño de tin tan’, porque concluía sus monólogos usando un vaso lleno de agua para producir el sonido ‘tin tan’.
En el Teatro ‘Esperanza Iris’, la pareja ‘Tin Tan’ y Marcelo Chávez fue todo un éxito y luego vino un contrato en la XEW, y en 1944 el debut en el cine con una breve participación en la cinta ‘Hotel de Verano’, en lo que fue el inicio de una carrera con cerca de 100 películas.
Y del cine a los cabarets de moda, como ‘El Patio’, ubicado en la Colonia Juárez. Cintas como ‘El hijo desobediente’, ‘Con la música por dentro’ y ‘Músico, poeta y loco’, terminaron de afianzarlo como uno de los principales imanes de taquilla de la Época de Oro del cine mexicano.
Más tarde vinieron otras joyas como ‘El rey del barrio’, ‘El ceniciento’, ‘Calabacitas tiernas’, ‘El revoltoso’, ‘La marca del zorrillo’, ‘El hombre inquieto’, ‘Simbad el mareado’, entre otras. Incluyó a sus hermanos Ramón y Manuel Valdés en varias de sus cintas.
Los críticos dicen que esa forma disparatada, casi caótica de actuar, el léxico que desplegaba y el tono tan cercano con el público fue como romper la llamada ‘cuarta pared’ de la actuación y hacer al público partícipe de lo que sucedía a la hora de interpretar un personaje.
El doblaje fue otra de las trincheras del comediante y lo hizo de la mano de la Casa Disney. La primera de ellas, fue su participación en ‘El jinete sin cabeza’ de 1949.
En 1967, Germán Valdés le daría voz a ‘Baloo’, un oso que se lleva la vida de la forma más amable posible en ‘El libro de la selva’, inspirado en la novela de Rudyard Kipling.
Y en 1970, ‘Tin Tan’ le dio voz a ‘Thomas O’ Malley’ en ‘Los Aristogatos’.
Además de hacer historia como comediante, Germán Valdés fue un gran cantante y en muchas de sus películas dio muestras de su bien entonada voz y un ejemplo de ello fue ‘Bonita’ que interpretó en la cinta ‘Músico, poeta y loco’.
Otra de sus facetas fue la de bailarín. En ‘El Revoltoso’ de 1951, ‘Tin Tan’ muestra su dotes para el mambo.
Su pasión por la pesca lo llevó a poseer tres yates, los cuales no terminaron muy bien y además era amante de la buena vida, lo que casi lo llevó a la ruina a pesar de ser uno de los actores que inauguró los grandes sueldos en la farándula mexicana.
Germán Valdés se casó en tres ocasiones y tuvo cuatro hijos. La despedida de la pantalla grande se dio en 1973 con ‘El capitán Mantarraya’.
Un mal hepático le provocó la muerte el 29 de junio de 1973 y la reivindicación del pachuco llegó a influenciar a grupos musicales como ‘Maldita Vecindad’ y ‘Panteón Rococó’.
‘Calmantes montes, alicantes pintos, aracuanes volantes, porque lo de elefantes, ya está muy choteado’, es apenas una muestra de esa forma de hablar de ‘Tin Tan’ que se hizo legendaria. Lo recordamos en esa clásica rola de ‘el panadero con el pan...' Final del #Hilo.
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