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Jul 8, 2021, 12 tweets

#Hilo 🧵🗞️Hace 45 años, el presidencialismo al estilo priista dio un manotazo en la mesa que dejó en claro hasta dónde podía llegar la libertad de expresión en México y la víctima fue el periódico Excélsior, encabezado por Julio Scherer. Acá te contamos la historia.

A lo largo del sexenio de Luis Echeverría, Excélsior había mantenido una línea editorial crítica e independiente al poder del Presidente, lo que provocó el enojo del mandatario que había dejado en el olvido su promesa de democratizar al país luego de la masacre en Tlatelolco.

El golpe contra Excélsior se fue fraguando desde el inicio de junio de 1976 y el pretexto fue la invasión de un terreno, ubicado en el rumbo de Taxqueña, en donde la cooperativa que tenía el control del diario, tenía recursos invertidos.

Además, el manotazo en la mesa ocurrió a unos días de la victoria electoral que llevó al poder a José López Portillo.

Desde el 7 de julio, un grupo encabezado por Regino Díaz Redondo y que recibía órdenes desde Palacio Nacional, demandó a Julio Scherer una asamblea extraordinaria para que explicara el asunto del terreno invadido y que según Díaz Redondo escondía actos de corrupción.

Las maniobras para desmantelar Excélsior pasaron de noche en otros diarios. A la andanada contra Excélsior se unieron los noticieros de Televisa que incluso difundieron reportajes sobre los presuntos ilícitos que se escondían en el asunto del terreno en Taxqueña.

Aquel 8 de julio de 1976, para evitar mayores hechos de violencia, Julio Scherer y cerca de 200 empleados del diario, entre reporteros, redactores y personal de la rotativa, abandonaron el diario ubicado en Bucareli, en la famosa esquina de la información.

Luego del golpe, Regino Díaz Redondo asumió el mando del periódico y se mantuvo en esa posición hasta el año dos mil cuando fue expulsado de la cooperativa por presuntos actos de corrupción.

Todas aquellas horas de incertidumbre y de censura a la Libertad de Expresión fueron relatadas de forma magistral por uno de los destituidos, Don Vicente Leñero, en su libro ‘Los Periodistas’.

Aquel terrible pasaje tuvo su ganancia. Julio Scherer y buena parte de sus colaboradores dieron vida al Semanario Proceso que ha buscado mantener una línea que señale a todos los gobiernos sin importar filias políticas.

Octavio Paz, director del suplemento Plural publicado por Excélsior en los tiempos de Scherer, fue otro de los que repudió el golpe y abandonó el periódico, y unos meses después regresó a la circulación con una revista que fue fundamental para la difusión de la cultura, ‘Vuelta’.

De los muchos que salieron de Excélsior hace 45 años ,nacieron proyectos como los diarios ‘Uno más Uno’, en un primer momento y más tarde ‘La Jornada’, que han dado cuenta de la necesidad de una prensa independiente y crítica. Final del #Hilo.

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