En el hilo de #Arte de esta semana analizamos el retrato de Adele Bloch-Bauer, pintado por Gustav Klimt entre 1903 y 1907 en Viena. La obra es uno de sus cuadros más famosos, y para muchos se trata de una verdadera “Mona Lisa del Modernismo”. Dentro con nuestro hilo. 🧵👇
El cuadro de 138 x 138 centímetros fue encargado por el marido de Adele, Ferdinand, un rico industrial que solía regalarle joyas y obras de arte. En esa época Adele era una modelo habitual de Klimt, que ya la había retratado en su obra Judit I realizada en 1901.
El pan de oro domina completamente el retrato, sumergiendo a Adele en un mar dorado trabajado con patrones geométricos y ojos egipcios, entre los que se mezclan algunos toques de color y plata para romper la monotonía.
Escondidos en el Retrato de Adele Bloch-Bauer hay algunos detalles personales, como las iniciales A y B de la retratada o una gargantilla enjoyada que le regaló el propio Ferdinand el día de su boda.
La pieza pertenece a la famosa etapa dorada de Klimt, en la que usaba el pan de oro para dotar a sus cuadros de un toque divino y mágico. El pintor inició esta fase tan característica en 1898 con Palas Atenea, pero el cuadro más famoso del período es El Beso, terminado en 1908.
TEST: ¿Cuál de los dos cuadros de Klimt te gusta más?
La obra está fuertemente influenciada por el arte japonés, de moda a principios de siglo XX. La composición vertical de la figura recuerda a los pergaminos Kakejiku, mientras que el fondo monocromo y el vestido bordado evocan a las geishas representadas en los grabados Ukiyo-e.
En el arte nipón se empleaba el dorado para la decoración de muebles y otros objetos de madera, como este tocador decorado con motivos geométricos sorprendentemente similares a los usados por Klimt.
Pero la principal inspiración del artista fueron los mosaicos bizantinos que pudo ver en la iglesia de San Vital de Rávena en 1903. Al replicar su fondo dorado y engalanar a la retratada con joyas la equiparaba en cierto modo a la influyente emperatriz Teodora.
De igual modo la postura hierática de la retratada y el hecho de que solo se le vean los brazos y la cabeza es una imitación de los iconos ortodoxos, en los cuales predomina también el oro. Se trata pues de la divinización de Adele como musa favorita de Klimt.
Semejante devoción ha hecho que arrecien los rumores sobre un posible romance entre ella y el pintor, reforzados por el hecho de que su matrimonio con Ferdinand fuera concertado y la pareja no tuviera hijos. Sin embargo la falta de pruebas ha impedido verificar el asunto.
Más allá del gossip, el cotilleo, el chafardeo, el chismorreo de la historia… ¿Dónde ha estado el cuadro todo este tiempo? ¿Qué pasó con él durante la ocupación nazi teniendo en cuenta que los Boch-Bauer eran judíos?
La unión de Austria con la Alemania Nazi fue un duro golpe para la familia, todas sus propiedades les fueron confiscadas incluyendo el cuadro, que terminó en la Galería Belvedere de Viena. Allí se le cambió el nombre a “La Dama Dorada”, para ocultar sus orígenes hebreos.
Ferdinand tuvo que exiliarse a Suiza para evitar los campos de concentración, y legó la obra junto con el resto de propiedades a sus sobrinos en 1945. Sin embargo Adele había testado en favor de la Galería Estatal de Viena en 1925 por lo que la disputa fue a juicio.
La primera sentencia de 1946 fue favorable a la Galería vienesa donde el cuadro permaneció hasta 2006, cuando Maria Altmann, la última heredera superviviente, consiguió que el gobierno le devolviera la pieza tras la aparición de documentos nazis relacionados con su expropiación.
Maria vendió el retrato al coleccionista Ronald S. Lauder por la astronómica cifra de 135 millones de dólares con la condición de que fuera expuesto al público, y él lo cedió a su vez al Neue Galerie de Nueva York, donde todavía se puede ver hoy.
Después de conocer la historia del cuadro, ¿Dónde creéis que debería estar?
Por cierto, hablando de Campos de Concentración y exterminio, en este reportaje multimedia recorremos con fotos, mapas, testimonios etcétera algunos de los campos más tristemente famosos de la Alemania nazi: historia.nationalgeographic.com.es/multimedia/rec…
¡Hasta la semana que viene!
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