#Hilo 🧵🍦‘La Michoacana’, es domingo para una buena paleta de hielo o una nieve, y nada mejor que hacerlo en uno de estos locales que se pueden encontrar casi en cada esquina del país. Acá te contamos la historia que existe detrás de su nombre.
El origen de esta historia se encuentra en Tocumbo, Michoacán, por allá de 1940. Tocumbo era una comunidad agrícola y ganadera que era conocida por el manejo de los lácteos y las frutas.
Buena parte de los lugareños se dedicaban a la elaboración de paletas de hielo con fruta fresca y nieves de distintos sabores, pero fue Rafael Malfavón Villanueva quien vio en la elaboración de paletas y nieves un negocio para el futuro.
De acuerdo con el historiador Arturo Herrera, Rafael Malfavón fue el primero en vender sus productos a las comunidades cercanas a Tocumbo, llevándolos en cajas de madera y usando un burro como transporte, lo que le dejó muy buenas ganancias, para abrir su primer local.
En torno al nombre, se dice que otro personaje conocido como ‘El Pinabete’ fue quien inventó el nombre y lo colocó en su local.
El negocio llegó a la Ciudad de México de la mano de Ignacio Alcázar Pulido, un empleado de Malfavón que le había robado dinero y con ese efectivo pudo abrir una pequeña paletería por el rumbo del penal de Lecumberri.
Con las ganancias del negocio, Alcázar Pulido regresó a Tocumbo a reponerle a Malfavón lo robado y muchos de los habitantes de la localidad se dieron cuenta del buen negocio que eran las paleterías y por Michoacán empezaron a aparecer negocios similares.
Se calcula que para 1970, el 35% de las paleterías ubicadas en el entonces Distrito Federal estaban en manos de oriundos de Tocumbo. El atractivo de 'La Michoacana' frente a otras marcas es que las paletas eran grandes, baratas y con mucha fruta.
Y fue tal el éxito del modelo de negocio que por todo el país cundieron las paleterías con el nombre de ‘La Michoacana’ e incluso lograron cruzar la frontera con rumbo a Estados Unidos y varias naciones de América Central.
Fue Alejandro Andrade Andrade quien en los años noventa dotó a la compañía de 'La Michoacana' de una imagen propia, un logotipo alusivo a la región, y consolidar el negocio dio pie a la creación de ‘La Tocumbita’, que agrupa todas las sucursales de 'La Michoacana' oficial.
El logotipo fue creado por el mismo Alejandro Andrade y se trata de una índigena con un helado y bajo el slogan: La Michoacana es naTuiral.
Pero por fuera quedaron decenas de locales que adoptaron el nombre de 'La Michoacana' como un rasgo común de las paleterías de las colonias populares en todo el país.
Fue en Tocumbo, Michoacán, donde nació esta gran costumbre de elaborar paletas y helados con grandes trozos de fruta, con precios accesibles, cuyas ganancias dieron hasta para construir una Iglesia en esa población, y que bien valen un domingo por la tarde. Final del #Hilo.
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