"Los muertos de Ucrania que nadie llora"
Luego del golpe alentado y financiado por EEUU de 2014 en Ucrania, el país fue devorado por un feroz naZionalismo que clavó sus garras en la población de origen ruso.
La rusofobia fue alentada por grupos neonazis y ese odio irracional fue
el que desencadenó la secesión de las repúblicas de Donetsk y Lugansk, en la región de Donbas, el enclave principal de la población de origen ruso.
El ejército uncraniano ataca sin piedad el Donbas desde hace 7 años, no solo con el objetivo de evitar la separación de la región
de Ucrania, sobre todo con el fin de suprimir todo vestigio de cultura rusa en el lugar.
Luego de 7 años, las calles de Donbas quedaron sin alma, las viviendas reducidas a escobros, habitadas por ratas y toda la infraestructura (escuelas y hospitales) presentan en sus fachadas
las heridas de la guerra. No hay pared que no tenga impactos de munición.
La población de origen ruso vive un calvario interminable, se acostumbraron a vivir en sótanos para resguardarse de los constantes ataques de la artillería ucraniana. Los proyectiles caen sin discriminar,
mata a niños/as, ancianos/as, mujeres, hombres, mascotas y a todo ser vivo que tenga la mala suerte de estar en el lugar equivocado en el momento equivocado.
El gobierno ucraniano instaló carteles en un idioma ageno al de los habitantes de Dombas, la inmensa mayoría habla ruso,
y prácticamente obligó a la población a hablar en ucraniano. Le cambió el nombre a los pueblos, a las calles y hasta han bombardeado sin piedad el templo vinculado al Patriarcado de Moscú, aún en plena celebración de las misas.
La población rusa de la región de Donbas tiene la
vida rota, sin trabajo, con sus casas destruidas, sin luz, sin agua, viviendo en madrigueras como animales y sin saber cuándo los alcanzará la muerte. No hay habitante en Donbas que no haya perdido a un familiar, amigo o conocido en este genocidio camuflado de guerra.
Pero hasta en medio del infierno la vida sigue y la barbarie muchas veces motoriza el surgimiento de los mejores sentimientos humanos. La gente reconstruye como puede sus casas y ayuda a reconstruir las de sus vecinos después de cada bombardeo, los alimentos escasos se racionan y
se reparten en partes iguales.
Ante la destrucción de tantas familias, Donbas se ha convertido en una sola familia, de incontables miembros que se han unido con la esperanza de sobrevivir y resguardar la identidad con miras a un futuro de paz y prosperidad.
Desde que inició esta
guerra no declarada han muerto 15.000 personas (entre efectivos ucranianos, de las milicias separatistas y civiles de origen ruso).
Los muertos que el mundo "civilizado" no llora valen menos de los que han muerto en las últimas horas?
Valen lo mismo, todos/as los/as muertos/as
de esta tragedia que lleva más de 7 años son únicos, insustituibles e irremplazables..más allá de lo que digan los monopolios comunicacionales financiados por el imperialismo.
Ucranianos/as y rusos/as pueden coexistir en paz, tienen un origen común y un fuerte lazo milenario que
los une.
La barbarie se desató en 2014 cuando los intereses del imperialismo desató el desastre que ha sido expuesto explícitamente en las últimas horas.
🇷🇺🇺🇦
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