Hace 30 años, un policía nazional mataba a Pedro Álvarez (20 años) en Hospitalet (Catalunya).
Pedro y su pareja paseaban cuando un coche casi les atropella, tras recriminarlo, el policia se bajó y le pegó 3 tiros.
Su asesino sigue impune. La "democracia" de su falsa transición.
El asesino, José Manuel Segovia González, de la Brigada de Información, en la farsa judicial, se inventó que dormia en su casa en el momento del asesinato y la jueza del regimen María José Bagaldi, le dejó libre.
Luego le pincharon el telefono a la familia del joven asesinado.
No contentos con asesinarles al hijo, el estado fascista español se dedicó a acosar y coaccionar a los padres de Pedro para que callasen.
A órdenes de la policia, hasta despidieron al padre de Pedro de su trabajo para presionarle y que olvidase el asesinato policial de su hijo.
La "prensa", un instrumento mas del engranaje del regimen español desde 1939, ni siquiera se dignaron a disimular.
Manipularon la noticia del asesinato de Pedro Alvarez en la cara de los padres, editando 2 veces la noticia del asesinato en unas horas por presiones del estado.
El caso de Pedro Alvarez solo es uno de tantos crimenes de la policia del régimen español, desde 1939 los asesinos, torturadores y criminales policiales siempre han quedado impunes, siguiendo en sus puestos de poder y hasta siendo incluso condecorados por el estado.
30 años después, a punto de prescribir el asesinato, Mari Carmen y Juanjo siguen luchando para que se haga justicia por el asesinato de su hijo, pero los jueces del regimen español se niegan a reabrir el caso.
Una evidencia mas de que nada cambia en este estado terrorista.
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