Se les da la lana a las chavas y chavos y, sí, ya decidirán en qué se la gastan.
Una política liberal por parte de AMLO en la que el Estado no interfiere en sus decisiones.
Aunque esas preferencias lo ideal sería que fueran libros y artículos escolares en lugar de caguas, tachas y perico. Pero ese es otro tema.
En fin, amics, que a veces Cabecita de Algodón nos sale más neoliberal que marxista, nomás que muchos no agarran la onda.