En relación a la marcha de la oposición de hoy en Maracay tengo varias observaciones, que al ser la sexta vez que marcho desde el 23 de enero no puedo evitar plantear... Abro hilacho:
Las convocatorias en Maracay carecen de liderazgo, no hay políticos que orienten a la masa sobre ruta (destino) y objetivo de la manifestación.
Los políticos locales son tan ineptos que no aprovechan estas concentraciones para darse a conocer (No me se el nombre de alguno) y apuntalar su liderazgo
Entonces la gente asiste, llega al sitio y no hay un cierre, las personas al final se sienten desanimadas, como que no tuvo mayor importancia el evento, o al menos sirvió para motivarse a seguir manifestando.
Un error garrafal y básico, ocurre cada vez que alguno de los políticos locales se digna a dar una arenga o discurso, y nunca tienen sistema de sonido o al menos un megáfono para dirigirse a la multitud, entonces el mensaje nunca llega. Cero conexión político-ciudadano
Menos mal que hay unos chamos con unos tambores que al menos le dan alegría al asunto, incluso inventan consignas que mantienen a los pocos alrededor con el ánimo arriba
Mi apreación es que cada concentración debe tener un objetivo específico, informado por Guaidó y ejecutado por sus aliados en cada estado. Ejemplo: Reclamar en corpoelec, persuadir a los militares, rendir honor a los asesinados, llegar a los barrios etc.
Hacer bulto nada más no tiene mucho impacto y denota desorganización, lo cual desmoviliza a la gente.
Me parece que si no ocurre algo de importancia a favor de la causa democrática en las próximas dos semanas, el desencanto se apoderará de la población una vez más
