En el fondo, es un asunto en el que los adictos de López evaden el punto medular que es, que se ganaron los amparos porque conforme a derecho la autoridad incumple con la legalidad.
Ad hominems, Red herrings, Hombres de paja, Tu quoques, etcétera, no son argumentos jurídicos.
La respuesta es que o están en el presupuesto, o están en negación.