Procrastinación es la manera como el capitalismo se "enfrenta" a los problemas. El COVID-19 no es diferente a cualquier otra cuestión como la degradación masiva de los ecosistemas. Todos ellos plantean contradicciones insuperables con los fundamentos del sistema.
Recientemente, el diario cincodias decía que al final el mercado tenía la tarea de encontrar el equilibrio. La metáfora decimonónica de la física newtoniana, completamente superada, reaparecen en contradicción con apelaciones la intervención del Estado.
Lagarde, conocedora de las limitaciones absurdas impuestas en la creación del euro, exige una expansión fiscal (temporal) que vendría seguida de la correspondiente contracción para recuperar el sacrosanto e inexistente "equilibrio"
Las restricciones de gasto han supuesto una degradación de los sistemas sanitarios europeos a los que se apela temporalmente, sin que el objetivo último de su privatización como fuente de extracción de rentas monopolistas.
El objetivo de las medidas económicas a largo plazo es mantener el valor de los activos y las posiciones acreedoras por encima de todo. Si eso no se hiciera, como en la crisis financiera global, nos amenazarian con el caos
El proceso de financiarizacion es la huida hacia adelante del sistema. El crecimiento exponencial de los activos financieros no está limitado por la realidad física, pero cercena gravemente nuestra capacidad de actuar ante los problemas
Por eso la procrastinación no es solamente y principalmente negligencia de políticos incapaces. Es como el sistema intenta sobrevivir a costa de la mayoría.
