#MicrocuentosHaciendaesCultura
Escrito por convocatoria de @HaciendaCultura
[Microcuento]
Que no quede nadie vivo
Nadie se dio cuenta, pero ese era el objetivo. Desaparecer a todos poco a poco.
Primero fueron los enfermos de VIH, a los que el mismo gobierno les quitó los...
retrovirales.
Luego fueron los enfermos de cáncer, ancianos, adultos, mujeres y niños no hubo excepción alguna. Fue parejo todos sin medicamentos.
Todos al camposanto poco a poco.
Luego fueron las estancias infantiles, sus madres tuvieron que dejar de trabajar o dejarlos...
solos a su suerte y por su cuenta.
Algunos murieron por obra de terceros al estar solos.
Otros por falta de una buena dieta al no poder trabajar sus madres.
Luego fueron los refugios para mujeres golpeadas, quienes al no contar con lugar para protegerse...
pasaron a otro plano de existencia a manos de sus parejas o sus familias.
No hay que olvidar los que se quedaron sin trabajo por la cancelación del aeropuerto, muchos dependían de esa obra para comer, la huesuda llegó poco a poco, por hambre, lentamente pero seguro.
También estuvieron los trabajadores del estado, que se quedaron sin trabajo. Algunos corrieron con la misma suerte otros los menos se fueron a dar clases al extranjero como @LVidegaray.
Los trabajadores de los bancos de desarrollo que de la noche a la mañana, perdieron su...
pensión.
Todos ellos se fueron lentamente.
A todo esto se sumó la incipiente crisis económica de 2019.
Para principios de 2020, @PEMEX estaba más quebrada que nunca.
En marzo vino la epidemia del COVID-19 duró meses de los que fueron intubados de acuerdo a datos...
del gobierno morían el 80% de los intubados. La realidad fue que no había datos reales ni oficiales, sólo se supo de los camiones militares y navales que salían con olor a formol y carne muerta. Los choferes usaban traje espacial y su escolta llevaba fusiles de asalto.
En casa hogar faltaba alguien, en algunos faltaban todos.
Ese sólo fue el preámbulo, para la hecatombe económica. El segundo trimestre de 2020 fue una catástrofe. La calle la gente intercambiaba comida por artesanías o mercancía.
Al final no quedó nada, ni nadie.
Muchos se fueron para no volver, prosperaron.
Hasta los carteles se fueron.
No se podrá nunca decir lo mismo de los que quedaron. Porque al final no quedó nada, ni nadie. Para contar ninguna historia de después de la tormenta.
Fin.
Mil gracias a @HaciendaCultura por su atinadísima temática, en tiempos de pandemia.
[Sarcamo p'al que no entendió.]
Te guardo el tweet, por si se te cae. También el vídeo por si lo pierdes.
Aquí puede ver el tema:
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