Thread by @mmmp20

Abro hilo de lo ocurrido el día de hoy #21M en el hospital Dr. Raúl Leoni, San Félix.

Fui hasta el centro de salud para hacer una entrevista a familiares de pacientes hospitalizados e indagar sobre los horarios de visitas y protocolos de seguridad.

Tomé fotos de las personas que estaban en el lugar y seguí mi camino. Antes de irme observé que una ambulancia estaba en la entrada y tomé una foto, cuando doy tres pasos ví a una persona con la vestimenta blanca de protección y en ese momento me abordaron...

Personal de seguridad del hospital. Me comenzaron a gritar que les entregara el tlf, cosa que me negué, y me obligaron a borrar las fotos y entregar mi identificación. La mujer que estaba ahí forcejeaba conmigo para que le entregara el tlf y la situación se tornaba tensa.

¡Busquen a seguridad! decía.
En ese momento le hice señas a mi compañero de trabajo y el fue el que informó al Diario.
De ahí me llevaron a una habitación pequeña donde estábamos 3 GNB, dos hombres más y la mujer, que luego se identificó como Isabel Velásquez, jefe de seguridad

Me comenzaron a tomar fotos y exigían que entregara el tlf. Les mostré que todas las fotos habían sido borradas, igual revisaron todos mis archivos. "Este delito se paga con cárcel", me decían, explicando que tenían órdenes de Caracas de detener a quien incumpliera las normas...

El tono sarcástico y de burla era lo básico en Velásquez. "Estás incumpliendo con la confidencialidad de los pacientes", haciendo referencia a que le había tomado fotos a pacientes con covid-19. Les expliqué mi razón de visita al centro de salud y que desconocía que trasladaban a

alguien con coronavirus. Obviamente no me creyeron.
Me dijeron en reiteradas ocasiones que me iban a detener. Mi tlf comenzó a sonar y dijeron "avísales que no vas a poder cumplir con tu trabajo porque estás aquí, que ya te borramos todas las fotos". Yo solo explicaba que estaba

haciendo mi trabajo.
La analogía de la directora del plantel fue que los periodistas somos personas con bisturis en la mano para buscar el momento de cortar y que yo estaba ahí porque "había cortado", básicamente dijo: llévensela. Anotaron todos mis datos personales, aún cuando

me negaba a dárselos. Me dijeron que el dgcim haría seguimiento de mis acciones y que ellos sabrían si mandaba fotos del lugar.

Luego de más de 20 minutos de burlas, amenazas e interrogatorio, pregunté si me podía ir y si me podían entregar mi identificación. Al notar una pizca

de temor en mi dijeron: aaaaayyy pero estás nerviosa? Si quieres te quedas un rato más y hablamos. La puerta tenía seguro y no podía salir. Después de escuchar la burla fue que la abrieron y me dejaron ir.

Velásquez expresó que mientras más denunciara la situación, sus jefes sabrían que ella había hecho bien su trabajo. Y es así, estos cuerpos de seguridad condecoran los amedrentamientos.

Salí ilesa físicamente, pero en ese momento cuando estás sola y rodeada, pareciera que...

estuvieras completamente desnuda. Juegan fuertemente con la psicología.
Con esto solo reitero que seguiré haciendo mi trabajo y que no será impedimento de cumplir con mi labor de informar.

Lamentable no soy ni la primera ni la última periodista que pasará por esta situación.

Pero eso es solo el reflejo del trabajo que debemos seguir realizando.

Gracias a todos los colegas que me hicieron llegar sus palabras de apoyo y a mi equipo de trabajo de @DiarioPrimicia

¡Seguiremos informando! A pesar de que nos quieran mantener callados. #InformarNoEsDelito