1) Hoy vamos a hablar acerca de la llegada de Eva Braun (amante de Hitler) al búnker de la Cancillería de Alemania en Berlín con el fín de pasar los últimos días de la guerra con Adolf Hitler, además hablaremos sobre la entrada de los aliados occidentales (EEUU e Inglaterra) a
2) Alemania y repasaremos la última aparición pública de Adolf Hitler... en febrero de 1945, Hitler, le dijo a su secretaria, Fraülein Schröeder: “Me mienten por todos los flancos. No puedo confiar en nadie y si algo me ocurriera, Alemania se quedaría sin Führer. Göring, perdió
3) el apoyo del pueblo y Himmler es rechazado por el Partido Nazi”. En realidad, era él quien los rechazaba ya que sabía que querían negociar la paz con los aliados. Ese mismo día, durante el almuerzo, dijo: “Estrújense el cerebro otra vez y díganme quien puede ser mi sucesor.
4) Esta es una pregunta que me hago constantemente sin dar con la respuesta. Es casi imposible suplantar a un Dios!”. El 7 de mayo de 1945, su ánimo mejoró con el regreso de Eva Braun a Berlín. Hitler, le había ordenado que se refugiara en Múnich, pero ella anunció a sus amigos
5) que debía volver al lado del hombre que amaba. Hitler fingió enfadarse e inclúso la reprendió por ello. Sin embargo, se pasó casi toda la velada nocturna en el búnker de Berlín, repitiendo lo orgulloso que estaba por la devoción de Fräulein Braun. A finales de febrero, se
6) reunió por última vez con sus Gauletiers (líderes de Zona o Jefes políticos del Partido Nazi en cada Estado). A todos les alarmó su aspecto. Tenía que apoyarse en el Teniente, Julius Schaub (su edecán). Hablaba con voz débil y su mano izquierda le temblaba mucho. Agradeció a
7) a los Gauletiers su cooperación y lealtad. Les confesó (por primera vez) que el temblor de su pierna, se había trasladado a su mano izquierda e hizo una broma: “Espero que no se traslade a mi cabeza!”. Ante la perspectiva de enfrentarse a un desastre casi seguro, el estado de
8) ánimo dominante de Hitler en los días subsiguientes fue de rebeldía e ira. A estas alturas, Berlín (la capital de Alemania en donde se encontraba el Führer) estaba siendo rodeada. En el Oeste de Alemania, el grupo de ejércitos B del Mariscal de Campo alemán, el General Walter
9) Model, había sido aplastado y lo que quedaba, retrocedió hasta el mismo Berlín. En el Sur, el grupo de ejércitos G del General alemán, Paul Hausser, había sido acorralado y estaba a punto de ser aniquilado. La situación en el Este no era mejor. Entonces, Hitler decidió ir
10) personalmente al Oeste de Berlín, hacia el frente ruso y los generales le advirtieron que no lo hiciera ya que lo podían matar o hacer prisionero. El Führer no les hizo caso y no fue en su Mercedes Benz, sino en un Volkswagen con su chófer, Erich Kempka y se fue a un castillo
11) cerca del río Oder en donde le suplicó a los Comandantes del Noveno Ejército que contuvieran el ataque de los rusos sobre Berlín. De regreso, Hitler iba callado, el sabía que todo lo que decía sobre armas secretas nuevas, era ilusorio. Faltaban varios meses para que su bomba
12) atómica estuviese lista. Cuando volvió a la ciudad, ya había visto suficiente del frente ruso (Oeste de Alemania). Nunca volvería a salir del búnker de la Cancillería. El 15 de marzo de 1945, Hitler recibe un memorándum de su Ministro de Armamento, Albert Speer. Ahí le
13) informa que la “economía de Alemania estaba a un mes de colapsar y una vez que esto ocurra no podíamos continuar la guerra”. En consecuencia, 2 días después, Hitler le ordena la destrucción de la infraestructura alemana (Orden Nerón o Nerobefehl). Plantas eléctricas,fábricas,
14) carreteras, aeropuertos, todo lo que pueda ser útil a los aliados. Al leer esto, Speer presiona a Comandantes, como el General Hasso Manteuffel (Comandante de la División Panzer) para que desobedeciera las órdenes de destruir todo, antes que permitir que cayeran en manos del
15) enemigo. El 18 de marzo, Speer llevó su protesta contra esta política de “tierra arrasada” hasta el mismo Führer ( hay que recordar que Speer era un gran arquitecto, un constructor y su norte era la edificación y no la destrucción) y Hitler le contestó: “Si la guerra está
16) perdida, el pueblo está perdido también. No es necesario ocuparse por lo que el pueblo alemán pueda necesitar para una supervivencia elemental. Por el contrario, es mejor para nosotros destruirlo todo. Nuestra nación habría demostrado ser la más débil,y el futuro le pertenece
17) a la nación oriental más poderosa (URSS). De todos modos, sólo los inferiores seguirían con vida después de esta lucha, pues los mejores, ya habríamos muerto”. Así era el grado de psicopatía de este ser maléfico. El 20 de marzo, Hitler hizo su última aparición pública. Ahí
18) condecoró con la Cruz de Hierro a una veintena de miembros de las Juventudes Hitlerianas en el jardín de la Cancillería. La filmación es nuy conocida; Hitler palmea en las mejillas y le aprieta las orejas a un chiquillo imberbe. Recuerden que para entonces, se reclutaba para
19) el combate a ancianos hasta de 70 años y a chicos desde los 16. En las imágenes se le ve muy enfermo. El brazo izquierdo hacia atrás de su cuerpo le temblaba mientras tanto. El 3 de abril, el General Bernard Montgomery (Mariscal de Campo inglés), emprendió su asalto al río
20) Rin (río que atraviesa todo el Oeste de Alemania) rumbo hacia el interior de Alemania. A su vez, 250 kms al Norte, el imprevisible General norteamericano, George Patton, cruzaba también el río Rin con sus tropas al mismo tiempo; no sólo para sorpresa de Alemania, sino del
21) mismo Montgomery ( que no le gustó esa acción y se quejó ante Eisenhower). Fue una brillante maniobra improvisada de Patton y fue llevada a cabo en secreto, sin bombardeo de artillería y que costó sólo 28 bajas entre heridos y muertos. Cuentan los allí presentes que en ese
22) momento tendieron un pontón sobre el Rin, y cuando Patton lo estaba atravesando, se detuvo a la mitad y dijo: “He esperado este momento mucho tiempo”, y orinó en el río... el rápido avance hacia el Este, tanto de Montgomery como de Patton, causó consternación en el Cuartel
23) General del Führer. Hitler estaba especialmente indignado por la acción del Cardenal Clemens August Galen, obispo de Münster (ciudad del noroeste de Alemania), que había salido de Münster para entregarle la ciudad a una Unidad Militar estadounidense y dijo, el Führer: “Si
24) alguna vez, llego a ponerle las manos encima a ese cerdo, lo haré colgar, como buen maldito que es”. Dos días después, Hitler se reunió con el General Heinz Guderian (Jefe del Estado Mayor del Ejército alemán) en el búnker de la Cancillería y le profetizó: “General, las leyes
25) tanto de la historia, como de la geografía pondrán a prueba la fuerza de estas dos Potencias (se refería a USA y Rusia) en el terreno militar o en el campo económico e ideológico. Estas mismas leyes,hacen inevitable que ambas se conviertan en enemigas de Europa. Y tarde o
26) temprano, descubrirán que tienen que buscar el apoyo de la única nación que sobrevivirá en Europa; el pueblo alemán. Afirmo ahora con todas las fuerzas que me quedan que los alemanes deben evitar a toda costa representar el papel de peones para ninguno de los dos bandos”...se
27) trataba de las premoniciones de un vencido!... Es historia, amigos.
