El enorme monstruo cayó al suelo, sangrando por millares de heridas producidas por las criaturas de alas etéreas, que habían aparecido en este mundo unos minutos antes, y los anhelos presentes que se arriesgaron a acercarse para atacar en >
La misma figura de luz que había aparecido previamente junto a los 9 anhelos, ahora se paseaba por el campo lleno de cuerpos >
De repente, una criatura >
El Dios se giró para contemplar al alado, y este le devolvió la mirada, frunciendo el entrecejo
.
— ¿Y ahora qué?— Preguntó el >
Las comisuras de los labios del Dios se curvaron hacia arriba, divertido con la elección de palabras del ser de luz y enternecido por su inseguridad.
—Ahora vivirán. — Aclara posando sus >
El Celestial contempló al Dios de la Restauración, con los ojos brillantes por las lágrimas, y entonces guardó su espada en la vaina >
— ¿Es esta tu orden, mi señor? ¿Vivir?—
Al escuchar aquella expresión, no puede evitar arrugar ligeramente su nariz con desagrado por unos instantes y desvía su mirada al horizonte por unos segundos, tomándose su tiempo para >
— No, más que una orden, es la oportunidad que ahora tienes delante junto a los tuyos. Sin embargo, agradecería si se llevaran el dolor de quienes lucharon en esta terrible batalla. Hay muchísimas personas heridas aún y necesitaran de su poder. Y >
El Celestial asintió, y esperó. El Dios le había indicado con un pequeño gesto el que no se moviera y se dispuso a buscar algo en su bolso. Un libro de grueso contenido y tapa dura que no tarda en ser >
—También creo que tu raza necesita reponer sus números, así que como recompensa por haber salvado este mundo, en compañía del resto de aventureros, les daré un regalo. A partir de hoy, y durante la próxima semana, aquellos que deseen >
Tahiel dejó escapar un suspiro. Lucía visiblemente contento.
—Estos son mis deseos para ti >
La pregunta estaba cargada de amabilidad. El Celestial no vió razones para contradecir a un dios, por lo que asintió, y luego volvió a emprender el vuelo. Tahiel se quedó contemplando lo que había hecho durante otro >