El ‘caso Avalmadrid’, en lo que afecta a Isabel Díaz Ayuso, se puede explicar en tres sencillos pasos y una conclusión. Así lo entendemos todos los contribuyentes, que somos los que hemos pagado el pufo.
1. La empresa de los padres de Ayuso (MC Infortécnica) pide un préstamo de 400.000 euros, que garantiza Avalmadrid. El crédito está avalado con todos sus bienes por los padres de Ayuso y los otros seis accionistas de la empresa. No devuelven ni un euro.
2. Para evitar que les quiten los bienes, los padres de Ayuso y sus socios los traspasan a familiares o los venden. A Isabel le donan un piso en Madrid. Avalmadrid, controlada por el Gobierno Aguirre, no ejecuta los avales y permite que los avalistas se desprendan de sus bienes.
3. Avalmadrid (principal accionista la Comunidad de Madrid) tenía reavalado el 50% del préstamo con Cersa (98% pública) y el 25% con la Comunidad. En total, con intereses de demora incluidos, el pufo de MC Infortécnica nos ha costado a los contribuyentes algo más de 350.000€.
Conclusión: Ayuso es dueña de un piso que tenía que haber sido embargado por una sociedad controlada por el Gobierno de Aguirre. Pero como Avalmadrid no hizo nada, el pufo lo hemos pagado los contribuyentes. Ayuso se quedó el piso, nosotros pusimos el dinero. ¡Viva el rey!
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