Las enseñanzas que deja la guerra en Ucrania pueda que no sean exportables a otros conflictos pero en algunos aspectos diseñadores de vehículos y ejércitos deben de estar tomando nota para modificar o revertir ciertos diseños. Pongamos como ejemplo los Bradley.
Si hay un vehículo que está dando un buen resultado a los ucranianos ese es el Bradley. Se le ha visto realizar ataques, enfrentarse a otros vehículos, en su función primaria de desplegar a su pelotón embarcado, evacuar bajas, relevos de posición… y muchas otras.
Características de su diseño que se han convertido en ventajas respecto a otros vehículos en la guerra de Ucrania. Comenzamos por su torre.
Si esto puede que sea la puntilla para el régimen de Assad parece que tampoco pinta nada bien para la presencia rusa en esa zona ahora que la distancia entre rebeldes y la base rusa de Khmeimim se mide en unas pocas decenas de kilómetros.
Khmeimim es el centro neurálgico de la presencia rusa en Siria y por allí pasaron en su día la mayor parte de su aviación táctica en continuos relevos para prepararse ante la inminente invasión de Ucrania. Incluso los Tu-22M y Su-57 se dejaron ver en aquella base.
Parece que la modernización de los B-52 aún en servicio vuelve a acumular retrasos y sobre costes.
El programa del B-52J se ha vuelto a retrasar 3 años más. Ahora los primeros no estarán listos hasta el 2033. Problemas con los nuevos motores y con la integración del nuevo radar son los causantes del retraso y del encarecimiento del programa.
En algún momento de la próxima década la fuerza de bombardeo de la USAF estará compuesta por el B-21 Raider y por los 76 B-52J que serán modernizados.
Han comenzado a salir a la luz imágenes de algunos de los blancos atacados por Israel en territorio iraní. A raíz de esto me surgen unas cuantas cuestiones.
Uno de estos lugares donde se fabricaba combustible para cohetes estaba aquí.
Las imágenes muestran daños no muy extensos pero muy precisos. Con un impacto justo en medio de varios de los búnkeres alcanzados.
En Estados Unidos aún se mantiene en estado de vuelo un A-1 Skyraider que tiene una curiosa historia. El Wiley Coyote. Comenzamos.
29 de abril de 1975, los cohetes norvietnamitas de 122mm caen sobre la base aérea de Tan Son Nhut en las afueras de Saigón. El final se acerca, la resistencia se desmorona. El Teniente survietnamita Henry Le, piloto de A-37, busca por la linea de vuelo algún avión repostado.
Le tiene 22 años y solo unas pocas decenas de misiones de combate en su historial. Hace unas horas ha mantenido una reunión con sus compañeros. Despegar y escapar o destruir sus aviones en el suelo para que no caigan en manos de los norvietnamitas.
Irán ya ha anunciado que si es atacado por Israel tienen preparada la respuesta en forma de otra andanada de misiles. Israel y Estados Unidos están preparándose para ese momento también. Pequeño hilo de barra de bar.
Hay que recordar que Israel tiene un sistema defensivo por capas. El más conocido de sus sistemas de defensas antiaéreos es el archi famoso Iron Dome. Este sistema,salvo excepciones, no está pensado para ser utilizado en un ataque iraní con misiles balísticos.
El Iron Dome nació a raíz de la experiencia de la guerra de 2006 cuando Hezbollah lanzó miles de cohetes contra Israel. Actualmente es el sistema anti aéreo más probado del mundo.