En 2008, una periodista llamada Isabel Arvide, promovió que militares en retiro tomaran control de la seguridad pública en el norte de Coahuila asolado por el narcotráfico, en específico, por los Z. Tuvieron a unos 300 a su mando.
A esto se le llamó el Modelo Coahuila. El gobernador que lo apoyó y lo promovió era Humberto Moreira.
Arvide, quién sabe por qué, fue la promotora de dicho modelo, del cual escribe con mucho orgullo (ya posteé su artículo).
Periodista desde los años 70 para el Excélsior, siempre ha estado muy cerca del Ejército y narra algunas de sus peripecias y relaciones con los militares, y hasta su amor por ellos.
Extrañamente, sólo encontré una entrada de ella con una semblanza muy incompleta, en francés, en Wikipedia. Ha escrito libros y artículos acerca del Ejército por muchos años.
Este Modelo Coahuila, del cual estaba orgullosísima Isabel Arvide, a cuyos militares presenta como dechados espartanos, estaba en funcionamiento en 2011 y 2012. Uno de los puntos estratégicos del que tomaron control militar, supuestamente, fue el del penal de Piedras Negras.
Yo creo que la intención de Isabel era buena pero fue traicionada, fueron todos traicionados por quien menos se lo esperaron. Y esa persona está a punto de convertirse en su jefe, para todo efecto práctico.
Aquí comienza la tragedia. Justo en esos años, entre 2011 y 2013, ese penal se convirtió en base de operaciones de los Z, y en él cometieron todo tipo de atrocidades, al grado de crímenes de lesa humanidad.
Hasta la Comisión Nacional de Derechos Humanos denunció lo que ocurría, pero nadie la peló.
Ni Calderón quien era presidente entonces ha tocado el tema que yo haya encontrado, ni Enrique Peña Nieto, ni Andrés Manuel López Obrador quien sólo acusó a Felipe Calderón por haber exonerado a Humberto Moreira de los múltiples cargos que le hizo la Procuraduría General de la
República.
Se pone interesante: el director del penal de Piedras Negras en esos años era un militar con un magnífico currículum: maestría, un montón de estudios en ciencia militar, algunos hasta en el extranjero, y una cantidad bárbara de experiencia militar.
Su nombre: General Luis Cresencio Sandoval González.
En otras palabras, siendo él el director del penal de Piedras Negras, Luis Cresencio no oyó ni vio ni se enteró de que los Z metían y sacaban cadáveres de la cárcel, no se enteró de los homicidios, no se enteró de qué ocurría, en absoluto.
Ni tampoco se enteraron los militares, en específico, Sandoval, quien se convirtió en jefe militar en Piedras Negras poco después, de que los Z arrasaron con al menos 3 pueblos completitos, secuestrando, matando, torturando, mutilando gente a diestra y siniestra.
Hasta tiraron casas.
Lo increíble también es que tampoco se supiera nada hasta años después cuando Proceso, Sergio Aguayo y Ginger Thompson, hicieran investigaciones denunciando lo que había ocurrido.
Asombrosamente, el gobierno mexicano no hizo tampoco nada, fue el gobierno gringo el que enjuició a los Z que habían cometido algunas de esas atrocidades.
Tampoco Isabel Arvide dijo nada.
Humberto Moreira se lavó las manos y les echó la culpa a Sandoval y a los militares, incluyendo a Galván que era el Secretario de la Defensa Nacional.
Ah, sí.
Luis Cresencio Sandoval es hoy celebrado hasta por la CNDH, lo mismo que por el general Cienfuegos entre otros, como el candidato a Secretario de la Defensa Nacional propuesto por Andrés Manuel López Obrador.
Y como colofón cito a Raymundo Riva Palacio:
“López Obrador pretende que un mando militar coordine no sólo a las policías federal, estatal y, donde haya confianza, también la municipal, sino también las investigaciones y subordine a la Policía Ministerial y a los ministerios públicos federal y local.
El modelo de control militar sobre todo lo que tiene que ver con la seguridad pública fue expuesto por el presidente electo en una reunión con el secretario de la Defensa, el general Salvador Cienfuegos, al detallarle los planes que tenía.
El general Cienfuegos le dijo que eso no podría realizarse porque violaría la Constitución, pero el presidente electo respondió “cambiemos la Constitución”.”
En otras palabras, es muy probable que Luis Cresencio Sandoval, quien fuera el que acabara con el Modelo Coahuila, quede a cargo de toda la seguridad pública del país como premio por no haber hecho nada contra los Z en el penal y en la ciudad de Piedras Negras, entre otras.
Y ningún periodista, ni la CNDH han dicho nada que haya yo encontrado.
Por cierto, Isabel Arvide en su cuenta de Twitter también celebra su nombramiento para tirar al general Cervantes, al parecer su enemigo de muchos años.
@RicardoMonrealA La sarta de imbecilidades y estupideces que escribes aquí superan lo que me imaginaba que sería la lambisconería en su más alto grado de pureza.
@RicardoMonrealA Procedo a traducir: "...los jueces no podrán detener ni obras ni normas de manera cautelar solo argumentando que consideran que existen posibles violaciones a los derechos humanos". (Continúo)
Traducción: el Estado puede violar cualesquier derechos humanos mientras tanto.
(Sigo)
@RicardoMonrealA Presumir que todas las leyes y normas defienden los derechos humanos y son, en consecuencia, constitucionales es absurdo por inconsistente e inconsistente por absurdo.
@pablo_majluf Un propagandista tiene un objetivo: hacer que la propia causa se propague. Su estrategia básica es
conseguir una "imposición semántica": obligar a los rivales o enemigos a adoptar sus ideas, dogmas, metáforas, metonimias y vocabulario, aunque sea para rechazarlas.
@pablo_majluf Un propagandista profesional puede o no ser un fanático, pero se tiene que convencer a sí mismo para creer en su personaje y vivirlo por completo, romper con la propia disonancia cognitiva. El fanático en cambio va más allá: se alimenta de prejuicio de confirmación.
@pablo_majluf El propagandista profesional fanático o no fanático tiene como único elemento de consistencia el triunfo de su causa: su consecución sin importar las mentiras, falacias, sofismas, contradicciones y mentiras: se sentirá consistente si sigue su causa. Obedecerá sin chistar.
La amenaza narco a la democracia mexicana
El ataque de AMLO a la autoridad electoral del país es un regalo político a los cárteles.
Por Mary Anastasia O'Grady
5 de marzo de 2023 2:27 p. m. ET
Ciudad de México
@DanCrenshawTX@lopezobrador_ Funcionarios de partidos políticos llevados por hombres armados en camionetas; candidatos obligados a retirarse de las contiendas electorales bajo amenazas de muerte; los ciudadanos negaron el secreto al voto; matones armados que llenan las urnas; una cabeza cortada,
Estos son algunos de los actos de terrorismo presuntamente perpetrados por carteles mexicanos antes, durante y después de las elecciones locales y federales del 6 de junio de 2021 en siete estados de
Morena, al acecho del INE
Leo Zuckermann
Juegos de poder
EXCELSIOR
Quieren controlar al árbitro electoral “haiga sido como haiga sido”, por citar al clásico calderonista.
Primero quisieron reformar la Constitución con el fin de desvirtuar la manera en que se elige a los consejeros del Instituto Nacional Electoral. Miles de mexicanos salieron a las calles a protestar.
La oposición resistió y el gobierno morenista no consiguió los votos necesarios para enmendar la Carta Magna.
Luego salieron con la chicana del “plan B”. Con mayoría simple, cambiaron las leyes secundarias en materia electoral.
MEXICO UNIDO
Concentración defensa del INE Febrero 26-11 am #ElINENoSeToca
1.Acapulco: Marcha del Asta de la Bandera al Zócalo
2.Cancún: Ayuntamiento de Cancún
3.CDMX: Zócalo
4.Chihuahua: Plaza del Ángel 5.Ciudad Victoria: Oficinas del INE.
6.Culiacán: Detrás de Catedral (10 am)
7.Delicias, Chih: Plaza del Santuario 8. Edomex: Plaza de los mártires. Av. De la independencia 3517. Centro 9.Guadalajara: Plaza Liberación
10.Hermosillo: Plaza Zaragoza
11.Irapuato: Parque Irekua- Plaza Fundadores 12.Juárez: Poder Judicial Federal al Puente al Revés
13.León: Arco de la Calzada
14.Mazatlán: Plazuela República (10 am)
15.Mérida: Monumento a la Patria
16.Mexicali: Plaza de los 3 Poderes 17.Monterrey: Macroplaza