Thread by @yosoyangelcr

Hoy les traigo la historia verdadera del primer asesino serial y canibal de Venezuela:

Doráncel Vargas alías "El Comegente".

Abro hilo siniestro:

El nombre de este asesino canibal es "José Doráncel Vargas Gómez" y nació en Caño Zancudo Estado Táchira el 14 de mayo de 1957.

Pero, ¿Quien era? Y más importante aún, ¿Cómo comenzó esta masacre?

Vargas era un vagabundo que solía cazar a sus víctimas en el parque 12 de Febrero

Este parque estaba cerca de los alrededores de el río Torbes de la ciudad de Táriba en el estado Táchira.

Vargas fue uno de los primeros asesinos en serie conocido en Venezuela, asesinando decenas de personas, se estima que pudieron ser 40, incluso más.

Nació en una familia muy pobre, no alcanzó a llegar a 6to de primaria, todo esto, junto a una esquizofrenia paranoide lo llevarían a ser conocido mundialmente como "El Comegente".

Una persona al borde de la sociedad con un problema mental sin tratar, ¿No es una película?

Bueno, si saben cuál es dejen el nombre en los comentarios.

Sigo con la historia, como algunos otros jóvenes de bajos recursos en el país, Vargas desarrolló una personalidad delictiva.

Desde muy temprana edad era frecuente que las autoridades lo detuviesen por crímenes menores.

Principalmente robaba animales de granja como vacas o gallinas.

Los animales que robaba estaban destinados a alimentarse a sí mismo y a sus diez hermanos que vivían en situación de extrema pobreza junto con el.

Pero no sería sino hasta 1995 que empezaría la verdadera historia.

Tenía 38 años de edad y tras una vida cómo vagabundo, fue internado en el centro psiquiátrico de Peribeca, un pueblo perteneciente al estado Táchira.

¿Por qué fue internado?

Por devorar a otro vagabundo con el que compartía sus días debajo de un puente.

El hombre a quien se comió se llamaba Cruz Baltasar Moreno.

La captura fue posible gracias a la denuncia de un amigo de Moreno, Antonio López Guerrero, también mendigo. Vargas solo había dejado los pies y las manos del cuerpo.

Estuvo 2 años internado por esquizofrenia paranoide

Si se preguntan, ¿Cómo es posible que alguien que mató y además se comió a la víctima, estuvo solo 2 años internado?

No se preocupen, yo me hago la misma pregunta.

A pesar de lo descabellado que parece fue liberado, y sin estar curado de sus desórdenes mentales.

Aparte de esto, que me parece terrible, ni una sola persona le hizo seguimiento luego de ser liberado.

Nadie tenia de que preocuparse, al menos eso era lo que pensaban los médicos ya que el compartamiento durante su estadía fue muy tímido y pasivo.

Tan solo tres años después, en 1999, una serie de desapariciones en la ciudad de San Cristóbal en el estado Táchira puso en alerta a la población y a las autoridades.

Lo que más llamó la atención de las autoridades es que todas estás desapariciones tenían algo en común.

¿Que tenían en común?

Todos los desaparecidos eran hombres trabajadores de construcción o corredores. En otras palabras con buena forma física.

A pesar de que los familiares de los desaparecidos denunciaron, no había resultados aún.

Hasta que el 12 de febrero del mismo año.

El cuerpo de seguridad venezolano conocido como “Defensa Civil” encontró restos humanos pertenecientes a dos hombres en una operación de búsqueda.

Estos hallazgos propiciaron que las fuerzas de búsqueda intensificaran las operaciones en esa zona.

¿Cuál fue el resultado?

Pudieron recuperar al menos otros 6 cuerpos más, pero solo partes de ellos.

Sin embargo las autoridades tenían una hipótesis totalmente diferente a lo que estaba pasando en realidad.

Ellos creían que estos hallazgos eran obra de las bandas de narcotraficantes.

Ellos mataban y descuartizaban a sus enemigos y esparcian sus restos para que fueran encontrados y generar temor en la población.

El viento soplaba a favor de "el comegente" hasta que un oficial recordó un caso dónde un mendigo se comió a otro, dejando solo las manos y los pies.

Casualmente estas eran las únicas partes de los cuerpos que hallaron en esa área.

La investigación tomó otro rumbo, su objetivo, hallar a Dorancel Vargas.

Comenzaron rastreando las zonas próximas al lugar donde se encontraron los restos.

La policía decidió allanar un rancho improvisado en una granja abandonada.

Nadie estaba preparado para lo que encontrarían en ese lugar, ni los policías más experimentados.

Habían recipientes de cocina con partes humanas listas para ser utilizadas en diversas recetas.

A un lado, todo lo que sería desechado: manos, pies y tres cabezas. Una carnicería humana perfectamente organizada.

El caníbal fue arrestado ese mismo día y todos los medios de comunicación venezolanos hicieron eco de la noticia.

El sensacionalismo se apoderó del caso.

"Yo sólo como partes con músculos, especialmente muslos y batatas (gemelos), que es mi parte favorita, con la lengua hago un guisado muy rico y los ojos los utilizo para hacer sopa, lo cual es muy nutritivo y sano", dijo Vargas a los medios al momento de su arresto.

Durante la investigación el entonces apodado “Comegente” confesó que había matado alrededor de diez personas con una tubería metálica convertida en una especie de lanza.

Sus víctimas predilectas eran los hombres musculosos entre 30 y 40 años.

De manera pausa y fría aclaró que su parte favorita era el estómago “por el sabor”.

Las autoridades no dudaron en hacerle un interrogatorio exhaustivo, estaban impactados querían saber cómo era la mente de este asesino serial.

Vargas se mostró deseoso de hablar.

Explicó de manera muy natural que había devorado el corazón de Cruz Baltasar Moreno “aún caliente” y que gustaba de usar los ojos para hacer sopa. Dejaba siempre los pies y las manos porque “le causaban indigestión”.

Quedó al cargo de la Dirección de Seguridad y Orden Público del estado de Táchira y enviado al cuartel de prisiones de la policía del estado, donde se encuentra retenido hasta el día de hoy.

Hubo rumores de que en un motín se comió a los internos muertos. Ahora es religioso.

Pero nunca se confirmó, solo quedó en eso, rumores.