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Hoy es el cumpleaños n° 67 de ese fabuloso delantero cordobés, uno de los mejores de la historia del fútbol argentino, que deslumbró en Central al punto de convertirse en el máximo goleador canalla en torneos de AFA. En este #CHERChilos:
MARIO ALBERTO KEMPES.

El 15 de julio de 1954 nació en la localidad cordobesa de Bell Ville, hijo de Mario Kempes y Eglis Chiodi. Luego de jugar en los potreros de la zona, pasó al Club Talleres de su ciudad, donde hizo inferiores y a los 16 años festejó como campeón de la primera división.

En 1972 consiguió una prueba para @InstitutoACC y queda en el club rojiblanco. En la Liga cordobesa tuvo una gran actuación, salió campeón y lograron clasificar para el Campeonato Nacional de 1973. Su apellido ya sonaba a nivel nacional y esa fama llegó a Rosario.

Luis Indaco, goleador y gran figura canalla en la década del 20, luego de dedicarse al fútbol trabajó en la Unión Ferroviaria por lo cual tenía contactos en Córdoba. La comisión directiva de @RosarioCentral le pidió que vea a ese tal Kempes… Don Luis quedó maravillado.

En febrero de 1974 el presidente Victor Vesco junto con el secretario Alberto Rodenas viajaron a Córdoba para charlar con Instituto y con el papá de Kempes.Allí los dirigentes lograron que Kempes y su padre dieran el ok y al poco tiempo Instituto también dio el sí.

El pase costó unos 130 millones de pesos de la época, aproximadamente 160 mil dólares. Don Antonio Monserrat, presidente del extinto Banco Monserrat, dio los avales necesarios para que Central se haga de los derechos. Mario pasó a ser el jugador mejor pago del momento.

Kempes llegó a Rosario y se unió al plantel que en el Nacional del 73 se había coronado campeón bajo las órdenes técnicas de Carlos Griguol. El oriundo de Bell Ville tardó un poco en mostrar sus dotes de goleador, pero se puso a tono físicamente y deslumbró a todos.

En el Metro del 74 solo hizo 4 goles, pero en el Nacional de ese año convierte 25 goles en 25 partidos. “Marito” era un goleador que se caracterizaba por su potencia y su pegada pero no se quedaba atrás en calidad y sacrificio. No era jugador que se fijara un solo puesto.

Ese año también sería la primera cita mundialista del “Guaso”, como lo había apodado su amigo Daniel Killer”. Vladislao Cap lo convocó junto con otra leyenda canalla, el querido Aldo Pedro Poy. Kempes participó en los seis encuentros, pero no hizo ningún gol.

1975 es otra temporada de consagración para el “Panzón”, como lo conocían sus amigos de Bell Ville. Entre Metropolitano, Nacional y Libertadores suma 40 goles en 58 partidos, y en la Copa Libertadores se da el gusto de eliminar a @Newells con un gol suyo.

La noche del viernes 11 de abril de 1975 se enfrentaron @RosarioCentral y Newell's para ver cual de los dos se quedaba con el primer puesto del grupo 1, lo que le daba el derecho al ganador de ingresar en la zona de semifinales. Ambos eran líderes del grupo con 8 puntos.

Luego de un primer tiempo intenso, llegó el minuto 22 de la segunda etapa. Cabral avanza sobre la izquierda, cruza la pelota al área para que Kempes se anticipe a Carrasco y con toque suave convierta el único gol del partido. Venciendo a Newells, Central pasó a semifinales.

Y en 1976 llegó lo inevitable… A mediados de año se presentó una oferta del @valenciacf para llevarse al “Matador” por 500.000 dólares limpios. En democrática asamblea, 967 socios imponen el “si” sobre 228 que no lo querían dejar ir, por lo que se autoriza la venta.

En el equipo “che” Mario Alberto Kempes desplegó toda su calidad y sus virtudes. Goleador en dos campeonatos, ganador de Copa del Rey, Recopa de Europa y Supercopa de Europa. En 1981 tiene un breve paso por @RiverPlate donde sale campeón del Nacional 1981.

En 1978 el nexo entre Kempes y la Argentina tiene un capítulo tan especial como glorioso. Es nombrado para integrar el equipo que participaría en el Mundial a celebrarse en nuestro país entre el 1 de junio y el 25 de junio de 1978. Mario era el único “extranjero”.

Sin embargo su actuación en fase de grupo no fue lo brillante que se esperaba. A Mario le faltaba algo, los partidos en el Monumental de River Plate parecen no sentarle bien. La derrota por uno a cero contra Italia hace que la selección abandone Buenos Aires y se mude a Rosario.

Y de regreso a su casa el “Matador” se desató… Volvió a ser esa topadora que se movía por todo el frente de ataque, esa bestia del gol que no se conformaba solo con el arco rival, el hacía jugar al equipo. 2 goles a Polonia, atajada incluida, y 2 a Perú. Argentina a la final…

El 25 de junio de 1978 todo un país grita por primera vez “ARGENTINA CAMPEÓN” y Mario Kempes deja su rúbrica goleadora al gritar dos veces frente al arco holandés y así convertirse en goleador y máxima figura de esa Copa del Mundo. Kempes era una estrella mundial.

Luego de campeonar con River en 1981, vuelve a España para terminar su campaña en el @valenciacf en 1984. Y como sucedió en Central, Marito también se convertiría en leyenda del club valenciano. Tal es así que fue elegido como el jugador más importante de la historia del Valencia

En septiembre de 1984 el Valencia CF lo deja libre y a las puertas de su casa llega una sorprendente oferta, integrar las filas del Autocares Luz, equipo de… fútbol sala. Kempes acepta y por unos meses fue la sensación de la división de honor del fútbol de salón.

Su próximo destino, nuevamente en fútbol 11, sería el @cfhercules de la ciudad de Alicante. Mario ayudó con sus 11 tantos a que el equipo blanquiazul mantuviera la categoría, algo que parecía prácticamente imposible. Fueron 13 meses de goles, fútbol y calidad.

Lo que siguió fue una jugosa oferta de un equipo de la segunda división de Austria, el First Vienna FC. Ya más retrasado, organizando el juego y siendo dueño de todas las pelotas paradas, Kempes devuelve a la primera al club decano del fútbol austríaco.

En la temporada siguiente Mario vuelva a darle una mano grande a otro club del ascenso de Austria, el Sank Polten FC, quien gracias al Matador asciende por primera vez a primera. Kempes estaba cómodo en Austria y decidió finalizar su carrera en ese país.

Así como en 1993 se despidió del Valencia, el 8 de febrero de 1995 Rosario Central organizó un partido amistoso donde enfrentaría a su clásico rival. La dirigencia del momento aprovechó la ocasión para homenajear a Mario Kempes frente al público centralista.

Mario llegaba con 40 años y ya retirado del fútbol profesional. “Jugará 10 a 15 minutos como mucho” Ambiente de fiesta canalla en el Gigante, 22 minutos del 1er tiempo, centro de Panchito Fernández y el veterano goleador retoma su vieja costumbre… gol a Ñuls.

Y así la fiesta fue completa. Los padres se emocionaron recordando la estampa de aquel delantero que brilló en los 70, los hijos ahora podían ver que lo que se contaba era cierto. Que siete goles al clásico rival en solo dos años no eran puro cuento, era una sana costumbre.

Desde su llegada en febrero de 1974, Kempes jugó 123 partidos con la auriazul y convirtió la sorprendente suma de 94 goles, convirtiéndose de ese modo en el máximo goleador de Central en campeonatos de AFA y transformándose en leyenda centralista. FIN.

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