Thread by @cateterdoblej

Se habla mucho de si las vacunas son seguras o no...

Os voy a contar una #HistoriaMedicina de como gracias a un animal se frenó una epidemia que mataba miles de niños, apareció el concepto de anticuerpos y se iniciaron los controles sobre la seguridad de las vacunas #hilo 🧵⤵️

La difteria es una enfermedad infecciosa aguda causada por la bacteria Corynebacterium diphtheriae (bacilo de Klebs-Löffler) y se transmite por vía respiratoria (hablar, toser, estornudar, …) o por fluidos

Aunque la bautizó Pierre Fidèle Bretonneau (1778-1862), se tiene conocimiento de la difteria (con otros nombres) desde tiempo inmemorial. Ya hay constancia, por ejemplo, en los antiguos Egipto y China

La etimología de la palabra difteria es griega y significa “membrana”, debido a que aparecen falsas membranas (pseudomembranas) firmemente adheridas principalmente en las superficies mucosas de las vías respiratorias y digestivas superiores

El “garrotillo”, como era conocida antiguamente, era especialmente grave en niños pequeños y a finales del siglo XIX y principios del siglo XX había continuas epidemias con una elevada mortalidad (infantil)

El nombre de garrotillo se le dio en España porque la asfixia que provocaba la enfermedad laríngea tenía similitud al sufrimiento de los ahogados a los que se les “daba garrote”.
Creo que casi todos habéis oído hablar del garrote vil #sincomentarios

Los médicos poco podían hacer por los niños. Las traqueotomías y la intubación fueron una estrategia que surgió para contrarrestar la asfixia, pero que solo alargaban la agonía y aumentaban los traumas

En 1890 el médico alemán Emil Adolf von Behring (1854-1917), Nobel de medicina en 1901, junto a Shibasaburo Kitasato (1852-1931), uno de los grandes olvidados por el Nobel, descubrieron un “suero” capaz de combatir el tétanos

Mientras el japonés se centraba en estudiar la tuberculosis, Behring, con su estrecho colaborador Erich Wernicke (1859-1928), se centraron en el estudio del tétanos y la difteria
depot.ceon.pl/bitstream/hand…

Comprobaron que al inyectar el suero sanguíneo de una cobaya afectada por el tétanos a otra no enferma, se generaba inmunidad a la enfermedad en la segunda.

Esto le hizo pensar a Behring que con la difteria ocurriría lo mismo…

Y así fue…
Los experimentos con cobayas con tétanos y difteria de Behring le hicieron deducir que los animales generaban una “sustancia” que controlaba la infección por inmunidad pasiva. A esta sustancia/suero la llamó antitoxina

Realmente la antitoxina no “mataba” la bacteria, pero impedía que esta “soltara sus toxinas” con lo que se controlaba la infección.

El siguiente paso fue probarlo en niños… y el arriesgado experimento, aunque tardó, fue un rotundo éxito

En 1891♠️♣️ Behring trató con suero a una niña enferma de difteria salvando su vida.
Esto supuso un avance sin precedentes para el conocimiento de las defensas corporales, aunque se equivocaban creyendo que las toxinas estaban involucradas en todas las infecciones bacterianas

♠️La fecha según documentos varía.
Al igual que los primeros éxitos de la antitoxina diftérica algunos se los atribuyen a Paul Ehrlich obteniéndola a partir de cabras.
En su momento ya hablamos de él 🧵⤵️

https://twitter.com/cateterdoblej/status/1163817018467840000

♣️También Pierre Paul Emile Roux (1853-1933), estrecho colaborador de Pasteur, desarrolló en paralelo investigaciones exitosas sobre antitoxinas contra la difteria.
A él y a Alexandre Emile John Yersin (1863-1943) les debemos el descubrimiento de la toxina de la difteria

Ahora el problema que se le planteaba a Behring era crear toxina antidiftérica a gran escala sin usar a humanos como contenedores, ya que con las cobayas, conejos, cabras y ovejas que usaba tenía para poco.
La solución fue usar caballos♦️…

♦️Se probó también con vacas y burros como posibles "fábricas vivientes", pero no toleraban bien la toxina y se descubrió que los caballos eran los menos afectados por estas inyecciones

El suero obtenido de los caballos tenía excelentes resultados contra “el ángel estrangulador de los niños”, especialmente si se administraba a los pacientes en las 24-48 horas inmediatas a la infección

Durante estos ensayos, se curaron 168 de los 220 niños tratados; el 23,6% de mortalidad resultante era menos de la mitad de lo habitual en los casos de difteria y en los casos en que no funcionaba la antitoxina era por administrarla cuando la enfermedad estaba en fase avanzada

Behring fue también el primero en detectar y describir reacciones inmunes negativas a las antitoxinas generadas en animales, sobre todo la hipersensibilidad, un término que él mismo acuñó

En 1891, el “en ocasiones colaborador, en otras rival” de Behring, Paul Ehrlich (1854-1915), utilizó por primera vez el nombre por el que hoy conocemos a los “elementos” presentes en esas antitoxinas: anticuerpos

Durante el verano de 1894, Hermann Michael Biggs (1859-1923), jefe del Departamento de Salud de Nueva York, viajó a Europa, donde pudo conocer de primera mano los trabajos de su colega Behring combatiendo la difteria

Biggs incluso antes de regresar a EE.UU., comunicó de inmediato a sus colegas americanos vía telégrafo los avances de Behring, y les pidió que “consiguiesen algunos caballos” para empezar a derrotar a la mortal enfermedad

Pero como ocurre en muchas ocasiones, el New York Department of Health andaba corto de fondos (se necesitaban 27000$) y no podía comprar caballos para esa finalidad. El trasfondo era económico, pero también había escepticismo hacia lo que el galeno les contaba

Biggs, al que muchos le recuerdan, entre otras cosas, por introducir la figura de la enfermera escolar en EE.UU., se lanzó a la aventura de convencer a sus colegas comprando él mismo (con la ayuda de su colega el Dr. Theophil Mitchell Prudden) un caballo para combatir la difteria

El caballo elegido era uno que acompañaba a un granjero tirando de un carro lleno de leche para venderla en los mercados locales. El nombre del equino era Jim, y ahora se iba a convertir en “recipiente” antibacteriano

En octubre de ese 1894, el Dr. Biggs inyectó al caballo la toxina de la difteria y antes de que el año finalizara y tras sacarle sangre al animal y tratarla, dispuso de las primeras dosis de antitoxina en el nuevo continente

En la fecha señalada del 1 de enero de 1895 se suministraron las primeras dosis a niñas y niños norteamericanos. Esas dosis generadas gracias al caballo Jim no tardaron en dar resultados

En los siguientes cinco años, la mortalidad infantil por difteria se redujo en más de un 50% en la zona y “casualmente” la mortalidad de los peques inyectados con el suero de Jim fue 0

El Gobierno del estado y los colegas del Dr. Biggs sucumbieron a la evidencia y destinaron un elevado presupuesto para la construcción en Otisville de cuadras con caballos destinados a crear antitoxina. Estas cuadras pronto se extendieron por todo el país…

En 1894, hubo 2870 fallecidos por difteria en la ciudad de Nueva York; en 1900, el número se redujo a 1400 y disminuyó de manera constante en los siguientes años

En Nueva York, Biggs enseñaba los limpios establos de los animales, explicando que se les trataba como a pacientes de un hospital, que generalmente no sufrían el menor daño con la inoculación, y que se les mantenía bien cuidados y alimentados

Para ser sinceros, la mayoría de los caballos sobrevivió a las inyecciones con síntomas leves como fiebre y pérdida de apetito, pero a lo largo de los años, bastantes fueron falleciendo por la exposición a las dosis de toxina

La historia de Jim no tuvo final feliz, porque, aunque llegó a producir unos 30 litros de suero que salvaron la vida a muchísimos niños, hubo un problema importante…

Una niña de St. Louis (Missouri) falleció tras ser tratada con suero de Jim fechado el 30 de septiembre. Tras las pruebas pertinentes se descubrió que estaba contaminado con tétanos

Encima se vio que el suero del 30 de septiembre también se había utilizado para llenar botellas etiquetadas como "24 de agosto", mientras que las muestras reales del 24 estaban libres de tétanos

Jim que por supuesto tenía tétanos tuvo que ser sacrificado el 2 de octubre de 1901 y su suero contaminado provocó el fallecimiento de 13 niños en total

Esta contaminación podría haberse descubierto fácilmente si el suero se hubiera analizado antes de su uso; el desfase de fechas no se hubiera producido si se hubiera llevado un correcto control sobre las extracciones y sueros generados

Este incidente y uno similar de una vacuna contra la viruela contaminada condujo a la aprobación de la Ley de Control de Productos Biológicos (Biologics Control Act) de 1902, que estableció el Center for Biologics Evaluation and Research para controlar las #vacunas (entre otros)

Este triste final de la historia de Jim, fue una de las causas que llevó a la creación en 1906 de la US Food and Drug Administration (FDA).
Ya os hablé de sus extraños orígenes en un hilo 🧵⤵️

https://twitter.com/cateterdoblej/status/1340328394014253057

Actualmente se sigue extrayendo antitoxina de caballos, pero la seguridad para los animales es enorme.

También hay avanzados estudios para “cultivar” antitoxinas para la difteria sin usar animales
➡️nature.com/articles/s4159…
➡️sciencemag.org/news/2020/01/s…

Para más información sobre lo expuesto
➡️researchgate.net/publication/25…
➡️jamanetwork.com/journals/jama/…
➡️academic.oup.com/ije/article/42…

También os recomiendo el libro de Derek S. Linton “Emil von Behring: Infectious Disease, Immunology, Serum Therapy”

En cualquier caso, gracias a las #vacunas hoy en día el "flagelo de la infancia", como también se conoce a la difteria, es una amenaza “menor” y muy controlada

Ahora cuando os pregunten nombres de caballos famosos… a los Rocinante, Bucéfalo, Othar, Marengo, Babieca, etc., acordaros de incluir a Jim

¡Ah! por cierto, ahondando en el primer tuit del hilo… las vacunas SÍ son seguras.

Espero que os haya gustado y os haya resultado entretenido #gracias