Thread by @drhuitron

Esta enorme escultura de policromía estofada que representa a San Cristóbal de Licia, ubicada en el Museo Regional del INAH en #Puebla tiene una asombrosa e interesante historia.
A continuación abro hilo:

Se dice que esta escultura fue realizada a partir del tronco de un árbol venerado por los indígenas en los alrededores de #Puebla en una época cercana a la fundación (1531) Los frailes franciscanos mandaron cortarlo y trasladaron el tronco a su convento.
(Imagen ilustrativa)

A comienzos del s. XVII un anónimo escultor realizó la enorme escultura. De acuerdo a la tradición, la imagen estuvo en la ermita del cerro de San Cristóbal (Loreto y Guadalupe) hasta que al reconstruirla para hacerla de Belem, la imagen fue rechazada por ser muy grotesca.

De acuerdo a Hugo Leicht la escultura estuvo en la Catedral de #Puebla, desde su inauguración en 1649 para ser colocada en la entrada norte. Aquella que da hacia la Plaza Mayor y que está dedicada precisamente a San Cristóbal. Hoy un gran lienzo del mismo santo ocupa su sitio.

En 1782 Manuel Flon, Conde de la Cadena, primer Intendente arriba a Puebla. En su recepción se celebró un Te Deum en Catedral. Al momento de ingresar su esposa, María Ana Saint-Maxent La Roche no notó la enorme figura medio oculta por el cancel de la puerta...

Fue tan grande su horror y espanto, que de inmediato cayó desmayada, al hallarse en avanzado estado de embarazo, fue la ocasión en la que un bebé nació en la puerta de la Catedral de Puebla. Luego de este acontecimiento la imagen quedo "castigada"

(Imagen ilustrativa)

Se entiende por "castigar" a una imagen cuando esta indirectamente es causante de alguna tragedia o desgracia, ya sea a causa de su caída, peso, o circunstancia. Para ello se le colocaba un grueso paño encima a modo de penitencia, y este "castigo" duraba un determinado tiempo.

No se sabe cuánto tiempo duro dicho "castigo" pero la imagen pasó de Catedral a la Iglesia de la Compañía de Jesús, que se hallaba cerrada tras la expulsión de los jesuitas en 1767. La escultura estuvo inactiva por casi 80 años, y volvemos a saber de ella hasta 1863.

Luego de la Batalla del 5 de mayo (1862) las fuerzas francesas pusieron sitio a la Cd de Puebla en marzo de 1863. Para las obras de fortificación, las tropas liberales bajo la orden de Joaquín Colombres emprendieron la fortificación, haciendo uso de toda la madera posible...

Encajado entre las ruinas del Fuerte Morelos en el Parral, el enorme San Cristóbal estuvo entre las trincheras que defendieron Puebla hasta el 17 de mayo de 1863. Milagrosamente la estatua salió de los escombros y pasó a la iglesia de Santiago, aunque ya sin brazos.

Ahí la conoció Hugo Leicht en 1930, y detalló parte de su historia en su obra inmortal Las Calles de Puebla, de igual forma la conocieron y describieron Manuel Toussaint y don Francisco de la Maza, quien posiblemente tuvo mucho que ver con su restauración y rescate final.

Ahora viene la parte mas increíble y curiosa de la historia de esta escultura. La cual la llevo a viajar no solo fuera de Puebla, si no alrededor del mundo. En 1962 la imagen es trasladada al Museo De Artesanías, donde estuvo por dos años para luego ser "prestada"

Resulta que en 1964, la imagen fue enviada a Canadá para una muestra de arte virreinal, justo en ese año ocurrieron diversos movimientos estudiantiles violentamente reprimidos y que causaron la caída del gobernador Antonio Nava Castillo. Y de la escultura no se supo ya más...

En 1970 una nota diplomática por parte de las autoridades japonesas!!!! Informó al gobierno mexicano que una enorme escultura se hallaba allá en calidad de préstamo, por lo que solicitaban
ponerse en contacto con las autoridades mexicanas para repatriar la pieza. DESDE JAPÓN!!!!!

Inexplicablemente este tesoro virreinal paso 2 años en Japón como parte de una exposición proveniente de Canadá. Fue don Francisco de la Maza quien la identificó como la imagen que se hallaba en Puebla, y luego de varias gestiones, la escultura retornó en noviembre de 1970.

Con la finalidad de rescatarla y llevarla a un sitio mas adecuado, la restauración de la escultura fue encomendada al escultor José Luis Silva. Autor de la hermosa y monumental escultura de la Inmaculada Concepción en Chignaguapan (1972)

Y luego fue llevada a la pinacoteca de Arte Virreinal en el ex claustro de San Diego de la Ciudad de México por gestión del arq. Luis Ortiz Macedo, quien se encargó de la restauración de este espacio. Aquí estuvo hasta que luego del sismo de 1985 por fin fue devuelta a Puebla.

Hoy con una museografía renovada, permanece en este museo INAH en la Zona de los Fuertes, a un costado del Auditorio de la Reforma, donde esperamos, no decida cambiar de lugar hasta dentro de algunos años.
Y tú ¿Conocías las aventuras de este gigante poblano?

Agradezco a @Gusvel por su incansable labor de investigación, ya que sin sus hallazgos en la hemeroteca, parte de la historia reciente de esta escultura seguiría siendo desconocida para nosotros.
Créditos de las fotos SINAFO/INAH (1964, 2020)
@elsoldepuebla1 (1970 y 1972)