Hilo.
A ver, a éstas alturas, repetir la burrada de "honestidad", "austeridad" e "integridad", es ser francamente cómplice.
Le costó mi voto, sin duda.
Hay límites de lo que puede decir un precandidato de oposición.
Y es una falsa dicotomía salir con que queremos otro Frenaa, NO
A ver, a éstas alturas, repetir la burrada de "honestidad", "austeridad" e "integridad", es ser francamente cómplice.
Le costó mi voto, sin duda.
Hay límites de lo que puede decir un precandidato de oposición.
Y es una falsa dicotomía salir con que queremos otro Frenaa, NO
Lo que queremos es alguien que diga las cosas como son y que se atreva a decírselas en la cara. Éste discursito del buenismo, la diplomacia y el centrismo, no aplica frente a un autócrata. No hay diálogo que valga, ni pacto que vaya a respetar, ni negociación que intente cumplir.
A un tipo de ésta ralea, se le exhibe, se le opone y se le presenta a los ciudadanos, constantemente, un camino alternativo para reconstruír y restaurar a la Nación.
O sea, se le opone y se propone.
Se evidencia la destrucción y se proyecta la reconstrucción y la restauración.
O sea, se le opone y se propone.
Se evidencia la destrucción y se proyecta la reconstrucción y la restauración.
El que no lo haga, no puede ser candidato de nada. Lo último que necesita el País es un aliado agachado del pseudopredicador marometano que continúe engañando y destruyendo a la República.
No es mucho pedirle a la oposición y a los partidos, que se comporten a la altura.
No es mucho pedirle a la oposición y a los partidos, que se comporten a la altura.
Que reconozcan el ultra problema en que nos metió éste demente y sus aún peores miembros de la secta fundamentalista y que el que quiera nuestro voto, se lo gane exhibiendo el desastre y proponiendo el camino de salida.
Carajo, ¡Mi perro podría hacerlo!
¡No es física cuántica!
Carajo, ¡Mi perro podría hacerlo!
¡No es física cuántica!
Y no es mucho pedirle a un candidato, que nos demuestre congruencia, valentía, conocimientos y decencia.
Porque también, en el tamaño de la indignación se mide el amor a México.
Así que nada de tibiezas, que el horno no está para bollos.
ESTÁN DESTRUYENDO A MÉXICO.
¡REACCIONEN!
Porque también, en el tamaño de la indignación se mide el amor a México.
Así que nada de tibiezas, que el horno no está para bollos.
ESTÁN DESTRUYENDO A MÉXICO.
¡REACCIONEN!
Y mucho ojo, mientras destruyen el País, ¡¡TAMBIÉN LO ESTÁN ASALTANDO!!
Las evidencias son ya innumerables.
Y faltan muchas otras por salir.
Nunca se había visto corrupción igual.
No necesitamos a un ciego al frente.
Necesitamos alguien que lo vea, lo denuncie ¡Y LO CORRIJA!
Las evidencias son ya innumerables.
Y faltan muchas otras por salir.
Nunca se había visto corrupción igual.
No necesitamos a un ciego al frente.
Necesitamos alguien que lo vea, lo denuncie ¡Y LO CORRIJA!
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