¿Nos espían a través de nuestros dispositivos electrónicos?
SÍ. NOS ESPÍAN.
Pero si tu smartphone, tu ordenador o tu electrodoméstico están infectados con el CÓDIGO *O\^, el uso que hacen de tu información es aún más siniestro de lo que crees.
Se trata de una especie de firma digital, similar a las antiguas «marcas de cantero» de las catedrales.
Si aparecen esos caracteres (*O\^) en el contrato de alguna App o software y tú hiciste click en «Acepto las condiciones», has vendido tu alma.
Cada persona del primer mundo tiene instaladas una media de 16 Apps con código *O\^.
¿Qué hacen con los datos que recopilan?
Los envían directamente a los servidores de una empresa llamada FETFOND CORP.
Miles de servidores. Ubicados en un búnker.
En LA ANTÁRTIDA.
¿Por qué en la Antártida?
1- Cediendo a presiones y a carambolas siniestras, la ONU decidió que las actividades Fetfond Corp tienen relevancia científica.
2- El búnker se halla en el corazón del continente helado, a dos kilómetros del eje de rotación de la Tierra.
En dicho enclave, las instalaciones de Fetfond pueden beneficiarse del EFECTO BRIDTON.
En 1993, el físico Noel Bridton descubrió que, a una distancia inferior a 3,8 kms del eje de rotación de un planeta, el espacio y el tiempo se deforman generando anomalías cuánticas.
Dicho fenómeno se conoce como «vórtice Bridton» y, según algunos teóricos, una emisión de electrones hacia su núcleo podría atravesar varios pliegues de curvatura espacial.
EN PALABRAS MÁS SENCILLAS: Si lanzas electrones hacia un «vórtice Bridton», los puedes TELETRANSPORTAR.
La electricidad está compuesta por electrones, y los datos recopilados por nuestras Apps son, en última instancia, electricidad.
CONCLUSIÓN:
EN TEORÍA ese búnker antártico es capaz de enviar nuestra información hacia lugares que están a años luz de distancia.
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«COMO ES ARRIBA, ES ABAJO».
«COMO ES ADENTRO, ES AFUERA».
O eso creían en el antiguo Egipto, y por ello pensaban que EL RÍO NILO era, en realidad, el equivalente terrestre de aquel otro río que veían en el cielo: LA VÍA LÁCTEA.
Esas correspondencias entre arriba y abajo, microcosmos y macrocosmos... proceden del KYBALIÓN, un tratado filosófico inspirado en las presuntas enseñanzas del dios (y alquimista) HERMES TRIMEGISTO.
En realidad Hermes Trimegisto es el nombre que otorgaron los griegos a una deidad mucho más antigua: El dios egipcio THOTH.
Veo que en LA ROCA entrevistan a Berasategui y a David de Jorge.
Hace años los tuvimos a ambos de invitados en VAYA SEMANITA y voy a contaros dos cosas sobre estos tipos que no os contarán hoy en La Sexta.
Una la viví de primera mano. La otra le la contaron mis jefes.👇
La primera no tiene mucha historia:
Berasategui invitó a todo el equipo del programa a cenar en su txoco cuando quisiéramos. Le tomamos la palabra, y el tío cumplió.
Nos dio de cenar como a reyes, con platos tradicionales de primera calidad.
Incluso nos preparó lo que él bautizó como «el cubata Vaya Semanita» con ron de primerísima calidad (no recuerdo la marca) y mezclando los ingredientes en ollas enormes con proporciones que eran pura alquimia.