Hoy un hilo rápido, para contarles el caso del falso probador de lencería. Caso verídico.
Una joven cree reconocerse en una página porno. Aparecen imágenes donde se la ve en un probador, probándose lencería.
Detienen al propietario de la página, y le imputan un delito de revelación de secretos.
El webmaster consulta a su abogado, y le dice que sacó las imágenes de una web americana especializada en voyeurs.
A todo esto, el caso va a cien por hora, y se dicta auto de procedimiento abreviado, que nos aboca a juicio. Vamos a presentar recurso, pero antes...
... el abogado se pasa mañanas enteras viendo imágenes de voyeurs. Hasta que encuentra a la actriz que se parece a la denunciante.
El abogado se va al notario, que levanta acta de las imágenes. Imaginen el cachondeo en la notaría.
A todo esto, un forense había dicho que las partes blandas de la denunciante se correspondían con la foto de la web porno. Al parecer, el forense no reparó en el tatuaje de la actriz, que no tenía la denunciante.
Presentamos el recurso con el acta notarial. Más cachondeo en la audiencia.
Finalmente, la Audiencia estimó el recurso, algo raro: el 90 por ciento de estos recursos no se estiman, porque si hay indicios te envían a plenario.
Al cliente le podían haber pedido hasta siete años de prisión.
Todavía tenemos por ahí el acta notarial, el auto y el CD. La actriz se llamaba Mary Ann, y nunca se enteró de que había triunfado en su carrera cinematográfica. Al menos triunfó en la audiencia de Barcelona.
Como hemos dicho en varias ocasiones, al final de tu carrera profesional solo cuenta los años de prisión que les has ahorrado a los clientes y al Estado. En el caso del falso probador podían haber sido siete años.
El hilo ha tenido un spin off en Menéame. Hemos localizado el expediente, fue en el año 2002, y el archivo por la Audiencia en 2003.
Buceando en el archivo del despacho, donde tenemos casos informáticos desde 1987, he encontrado el expediente del probador de lencería, así que puedo dar más datos para aquellos que decían que nos lo habíamos inventado.
Auto de 8 de octubre de 2003, Sección Octava Audiencia de Barcelona. Magistrados: ponente, Jesús María Barrientos Pacho, Francisco Ortí Ponte y Carlos Mir Puig. Revocan el auto de procedimiento abreviado y ordenan comprobar si existe el probador, a la vista de las fotos porno.
Y aquí tienen el auto de sobreseimiento. Suerte tuvo el cliente con el tatuaje que aparecía y desaparecía del cuerpo de la presunta víctima.
Por si quieren saber más, la web porno donde estaban las fotos 'confusas' se llamaba ballbusters.com. Si la buscan en archive.org todavía encontrarán a MaryAnn
Como parece que a nuestros seguidores les gustan estas batallitas, les anunciamos que habrá más. Sin datos personales, por supuesto, pero recordando lo divertidos que fueron aquellos años, en los que te daban sumarios con discos grapados. Sí, grapados por la pista magnética.
Y si algún día puedo jubilarme, habrá libro de memorias, escrito al alimón con el policía que entonces perseguía a mis clientes y actualmente, ya retirado, es nuestro perito habitual.
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Este hilo va a ser difícil. Tenemos que hablar de la adicción a Twitter.
El primer pensamiento tras la compra de Twitter por Elon Musk fue dejarlo. No dejarlo como otras veces, con candado. No, dejarlo del todo. Borrar todos los tuits, borrar la cuenta para siempre.
Este pringao -lo de community manager viene muy grande- lo ha intentado dejar muchas veces. Y siempre ha vuelto a caer en la adicción.