México tiene un perro nativo, con más de 7 mil años de vivir en este planeta, el famoso #Xoloitzcuintle... 🇲🇽🐶💀
Cuenta la leyenda que cuando alguien moría en la sociedad azteca, dependiendo la forma, existían varios destinos donde podía terminar su tonalli o alma.
El #Mictlán, la región de los muertos, dividida en nueve niveles subterráneos y regida por #Mictlantecuhtli y su señora #Mictecacihuatl, era uno de los más comunes y democráticos, donde iban príncipes y plebeyos por igual.
Cuenta la historia que, en 1945, cuando Pedro Linares, tenía 39 años, el oriundo del barrio de la Merced en la CDMX, enfermó de una fiebre que lo llevó al desmayó.
Ya para ese momento era un artesano cartonero reconocido. Su padre, escultor de papel maché, le había enseñado el oficio. Aunque principalmente vendía piñatas, calaveras y otras piezas.
Entre fiebre, sueños y delirios se encontró caminando por la noche en un bosque de árboles frondosos. Poco a poco varias figuras emergieron de entre las sombras. Tenían formas conocidas pero con una cierta extrañeza única, sus cuerpos eran la mezcla de más de una especie.