Marvin Harris: Caníbales y reyes. Capítulo 9: El reino caníbal. Resumen:
DESCRIPCIÓN: Los aztecas sacrificaban cada año a sus dioses miles de prisioneros de guerra, arrancándoles el corazón en lo alto de las pirámides rituales y arrojándolos desde lo alto de ellas; llegado al suelo, el cuerpo era conducido por ancianos y comido como estofado de carne.
Los toltecas y los mayas realizaban sacrificios del mismo tipo, y sus pirámides tenían la misma función; y también sociedades del nivel de bandas y aldeas, no solo mesoamericanas sino por todo el mundo (tupinamba de Brasil, hurones de Canadá...).
No fue específico de los aztecas el que realizasen sacrificios humanos, pero sí lo fue su realización masiva y de formas particularmente destructivas, con ejércitos miles de veces más numerosos que los hurones o tupinamba, y con millares de prisioneros.
Tampoco fue específico el que realizasen guerras santas, pero sí lo fue el que éstas fuesen ininterrumpidas, y el que su finalidad «santa» fuese saciar el deseo incontrolable de los dioses de beber sangre humana.
Los aztecas se abstenían de aprovechar ventajas militares por temor a matar demasiados enemigos antes de poder acordar la rendición. Esta táctica les costó cara contra las tropas de Cortés, a las que encontraban irracionalmente decididas a matarlos en el propio campo de batalla.
EXPLICACIÓN DE ELI SAGAN: La tortura, el sacrificio y el canibalismo, precedidos a veces de un trato amable, no son sino una expresión de los instintos contradictorios de amor-odio hacia los padres. Comen a la víctima porque la aman y la matan porque les frustra.
Se contesta que no explica por qué esas prácticas se realizan mayoritariamente con prisioneros de guerra, ni tampoco por qué no siempre se realizan con todos los prisioneros de guerra.
Por tanto, aunque esas pautas estuviesen presentes en ellas, seguirían siendo genéricas respecto del contexto de las presiones ecológicas y reproductoras específicas de las sociedades correspondientes.
EXPLICACIÓN SENTIMENTAL TRADICIONAL: Se trataba de prácticas impulsadas por sentimientos puramente religiosos de aplacar la ira de los dioses. Se contesta que ese impulso no se podría haber mantenido durante tanto tiempo si no tuviese alguna función.
EXPLICACIÓN DE SHERBURNE COOK: La guerra y los sacrificios aztecas formaban parte de un sistema cuya función era limitar el crecimiento demográfico, al ser capaces de incrementar en un 25% la tasa de mortalidad.
Se contesta que de ser así los aztecas estuviesen decididos a reducir su tasa de crecimiento demográfico no sacrificarían hombres adultos sino doncellas. Además, no explica por qué no mataban a sus enemigos en el mismo momento de la batalla.
EXPLICACIÓN ADECUADA:
1. Hacer prisioneros de guerra se explica por su función de incremento de estatus social de quien los hace, demostrando su capacidad para evitar los contraataques y las emboscadas durante el regreso.
Cuando no es posible, se llevan cabezas, cueros cabelludos, dedos u otras partes del cuerpo para probar la hazaña en el cómputo. Una vez de vuelta, en general no hay modo de integrar al prisionero en el grupo, y como no se lo puede devolver al enemigo, no queda sino matarlo.
2. La tortura de los cautivos se explica por su función de entretenimiento ante el público; por su función educativa al enseñar a los jóvenes a mostrarse implacables con sus enemigos en el campo de batalla,
mostrándoles lo que sufrirán si caen en sus manos; por su función de entrenamiento para los guerreros; y por las diversas funciones propias de los rituales mágico-religiosos en los que la tortura se inserta.
3. El canibalismo se explica por su función nutritiva-proteínica a la casta sacerdotal y noble, evitando la caída política del régimen de Moctezuma, en el contexto del agotamiento cárnico animal x el crecimiento poblacional y la intensificación productiva de los imperios previos.
Cada prisionero era propiedad del oficial a cuyo cargo se había realizado su captura, y se albergaba en su recinto, alimentado con tortillas suficientes para engordarlo. El día del sacrificio, era conducido a la pirámide, sacrificado y después cocinado y distribuido en un festín.
Aunque el canibalismo es normal en sociedades a nivel de bandas y aldeas, en caso de no haberse dado un agotamiento de la carne y la agricultura tan acuciante, con la aparición del Estado y la domesticación se habría prohibido el canibalismo, igual que sucedió en el Viejo Mundo.
Marvin Harris: Caníbales y reyes. Capítulo 11: Carne prohibida. Resumen:
I. DESCRIPCIÓN: La carne fue desapareciendo gradualmente de la dieta cotidiana del pueblo llano de los Estados e imperios antiguos, y el consumo de algunas especies de animales fue incluso prohibido como ritualmente impuro.
EXPLICACIÓN:
Pro 1: Por promedio, el rendimiento neto por calorías de cada esfuerzo humano invertido en la producción vegetal es diez veces superior al rendimiento neto por calorías invertido en la producción animal.
Marvin Harris: Caníbales y reyes. Capítulo 10: El cordero de la misericordia. Resumen:
El sacrificio de prisioneros de guerra y la redistribución caníbal de su carne fue una práctica común en cientos de sociedades preestatales de todo el mundo, pero casi nunca en sociedades ni inmediatamente predecesoras del surgimiento del Estado ni en sociedades estatales.
Siguieron dándose estallidos esporádicos de canibalismo, en tiempos de hambre provocados por asedio o malas cosechas, pero esta práctica era deslegitimada por las clases religiosas y gobernantes.
Durkheim: Las reglas del método sociológico. Capítulo 1: ¿Qué es un hecho social? Resumen:
Se dice «hecho social», en su modo impreciso, a todo fenómeno que ocurre en el seno de una sociedad, en la medida en que presente algún interés para ella. Esta definición incluiría beber, dormir, comer o razonar.
Se dice «hecho social», en su modo preciso, al modo de actuar, pensar y sentir, exterior al individuo, que está dotado de un poder de coerción en virtud del cual se impone a él. Este orden de hechos es el objeto propio y ámbito de la Sociología.
Durkheim: Las reglas del método sociológico. Prefacios e introducción. Resumen:
-PREFACIO DE LA 1ª EDICIÓN-
Posible crítica: El libro exculpa al criminal al reducir su condición a la de un fenómeno sociológico normal. Se contesta: Que si en toda sociedad es normal que haya crímenes, también lo es que sean castigados.
Para que no hubiese crímenes sería necesaria una uniformidad absoluta en las conciencias individuales, y es imposible e indeseable; para que no hubiese castigo sería necesaria una ausencia total de esa uniformidad, y es incompatible con la existencia de una sociedad.
Umberto Eco: Signo. Capítulo 4: Los problemas filosóficos del signo. Resumen:
1. Se ha definido al hombre como «animal simbólico». En efecto, el lenguaje verbal, toda la cultura, los ritos, las instituciones, las relaciones sociales, las costumbres, etc., son formas simbólicas en las que el hombre encierra su experiencia para poder comunicarla.
Por medio del signo, el hombre se aparta de la percepción bruta, de la experiencia del aquí y ahora y abstrae la realidad que lo rodea. Tampoco podría haber desarrollado utensilios para dominar la naturaleza si no se hubiese instaurado la actividad simbólica.
Daniel Jiménez: Deshumanizando al varón. Primera parte: El pasado. Capítulo 5: Nuevo paradigma: del patriarcado al sistema de roles de género. Resumen:
La palabra «patriarcado» no es un término científico, sino ideológico. Esto lo prueba que su uso invoca constantemente connotaciones negativas que lo identifican con la imagen del enemigo.
Esta identificación es incoherente si se parte del supuesto de que todas las sociedades documentadas son patriarcales, porque podría atribuirse al patriarcado la creación de la democracia, el Estado de derecho, los derechos humanos, avances médicos, científicos y económicos, etc.