Era tal el fanatismo nazi de Eduardo VIII, tio de Isabel II, que, según correspondencia desclasificada, Eduardo VII ayudaba a los nazis para poder establecer un estado más abiertamente fascista en Reino Unido.
Finalmente, cuando quedó en claro que los nazis perderían la guerra frente a la Unión Soviética, los británicos y EEUU finalmente entraron a combatir a los nazis, y la casa real británica tuvo que desterrar a ese tío devenido “incómodo" a las Bahamas. Barniz para tapar las
siniestras simpatías filonazis de la corona.
La familia real británica era amiga de los nazis, como toda la oligarquía capitalista mundial. El capitalismo alemán y transnacional constituyó el apoyo decisivo para el surgimiento Nazi: fue su apuesta antibolchevique para arrasar
La familia de la monarca Isabel II fue íntima amiga de los nazis. En fotos: su tio Eduardo VIII junto a su mujer, Wallis Simpson, duquesa de Windsor, visitaban a Adolf Hitler a menudo. En la última foto: Isabel de niña hacía el saludo nazi. La familia real británica era amiga y
admiradora de los nazis, como toda la oligarquía capitalista mundial. El capitalismo alemán y transnacional constituyó el apoyo decisivo para el surgimiento y consolidación del fascismo nazi: fue su apuesta antibolchevique para arrasar con la URSS. Los occidentales solamente
entraron a combatir a los nazis cuando vieron que eran derrotados por los Soviéticos.
Los nazis a su vez eran grandes admiradores del colonialismo británico y sus atrocidades. Los cientos de genocidios que perpetró la aristocracia y la burguesía británica para enriquecerse
El saqueo imperialista persiste hasta hoy, el sistemático exterminio de pueblos indigenas perpetrado por el poder británico persiste, los planes de exterminio contra las organizaciones en lucha por la liberación persisten: mediante la constante injerencia imperialista, mediante
los gobiernos títeres impuestos a través de Golpes de Estado, asesinatos políticos, mediante la connivencia de la burguesía local cimentada en la colonia. El genocidio, el saqueo, las deudas odiosas y sus intereses de usura impuestos a los pueblos mediante mecanismos coloniales,
las instituciones financieras del imperialismo rebanando vidas, las guerras imperialistas y las “fuerzas de paz” que le garantizan el poder a régimenes marionetas, la alienación religiosa y cultural...Isabel II se enriqueció sobre genocidio y saqueo,como toda la corona británica.
Los campos de concentración británicos para niños en Kenia eran llamados "Wamumu Camp". Los niños eran secuestrados, arrancados a sus familias y “educados” por los colonialistas británicos a punta de torturas y martilleo de religión alienante, con la finalidad de desarraigarlos
de su cultura, de doblegarlos y destruir toda fuerza subversiva ante la rapiña británica. Los niños eran sometidos a trabajos forzados y muchos sucumbían por extenuación o por las torturas. Al igual que en Canadá, donde el colonialismo británico asesinó a cientos de miles de
niños nativos cuyas fosas todavía se encuentran en los predios de las iglesias, en Kenia también fueron asesinados cientos de miles de niños en esas instituciones británicas.
La riqueza obscena de la corona británica y de la burguesía esclavista fue capitalizada mediante el
Igual que en la Alemania nazi, en Kenia con la aprobación de Isabel II y de Churchill, se establecieron campos de concentración y de esclavización, incluso para niños.
El modelo nazi de hecho se inspiró en el imperialismo inglés. Toda la atrocidad colonial británica fue desatada
contra los Mau Mau, usándolos como mano obra esclava, torturándolos y violando todos los Derechos Humanos. Sobre genocidio y saqueo la aristocracia y la burguesía británica acumularon colosales fortunas.
“El Capital viene al mundo chorreando sangre y lodo por todos los poros”,
escribía Marx.
El capitalismo europeo perpetró una gigantesca acumulación capitalista originaria sobre despojo, esclavización y genocidio. La familia real británica es una de las familias capitalistas más poderosas del mundo: detrás de cada onza de ese poder hay millones de
🎥🛑A raíz de que la nueva constitución de Chile no se aprobara durante el referéndum del domingo, los estudiantes chilenos se enfrentaron con la policía antidisturbios en la capital, Santiago.
🔻Los estudiantes exigieron una nueva constitución con garantías de participación
ciudadana y “educación digna, no sexista y de calidad”. Las protestas fueron en gran parte pacíficas, pero la policía antidisturbios atacó a los estudiantes con palos, cañones de agua y gases lacrimógenos. Al menos 35 personas fueron arrestadas.
🔻El domingo, el borrador de la
propuesta de constitución sufrió una aplastante derrota durante el referéndum obligatorio donde participó el 86% de los votantes habilitados. El 62% de los votantes rechazó la constitución, un cambio masivo de un referéndum voluntario en 2020 donde el 78% de los votantes dijo que