Hasta hace poco se creía que la narración más antigua del mundo era LA EPOPEYA DE GILGAMESH.
Estos tres libros prácticamente la triplican en antigüedad.
Y por triplicado.
En realidad no son «libros» en sentido estricto.
Uno está escrito en tablas de arcilla (en lo que ahora es Irak), otro esculpido en bloques de piedra (en China). El tercero grabado en planchas de metal (en Mesoamérica).
Y los tres utilizan LENGUAS MUY SIMILARES.
En realidad se trata de lenguajes compuestos por grafías distintas pero con estructuras internas prácticamente idénticas.
E insisto: No hubo ningún tipo de comunicación entre esas tres civilizaciones.
Sin embargo, quizá las tres sufrieron la influencia de UN MISMO FENÓMENO.
En aquellas fechas, desde todos los rincones del planeta, SE VIO ALGO EN EL CIELO.
Representaciones primitivas y mitos arcaicos insinúan que se trataba de un COMETA.
¿Pasó cerca de nuestro planeta algún cometa hace 12000 años?
La respuesta de los astrónomos es:
SÍ.
Los científicos lo conocen como EL COMETA MANSELL, en honor a su descubridor, un astrónomo de la Universidad de Pleanville: Walter Mansell.
El hecho de que los tres libros más antiguos del mundo se escribieran durante la semana que el cometa Mansell fue visible en los cielos podría ser una mera coincidencia... si no fuera por un pequeño detalle:
El cometa Mansell mantiene una órbita muy elíptica alrededor de la Tierra, de modo que sólo se acerca a ella cada 12000 años.
En otras palabras: Hace un par de meses volvimos a recibir su visita.
Su llamativa estela fue visible en nuestro firmamento durante una semana.
Una semana en la que 36 personas han escrito, casi exactamente, EL MISMO LIBRO.
Una vez más, distintos idiomas pero contenidos similares.
Es probable que hace 12 siglos también hubiese una treintena de textos simultáneos pero sólo hayan sobrevivido aquellos tres.
Ahora mismo habrá varias preguntas en vuestras cabezas. En Pleanville quisieron resolverlas:
PREGUNTA NÚMERO 1:
¿Qué relación puede haber entre la aparición de un cometa y una información que, de repente, «despierta» en varias mentes al unísono?
Aprovechando que el Mansell aún no se ha alejado de la Tierra, enviaron una sonda espacial para examinarlo.
A esas alturas esperaban encontrar cualquier cosa en el Mansell... menos lo que encontraron en él.
En el corazón del astro, dentro de ese armazón de hielo, metano y amoníaco, había UN OBJETO DE ORIGEN ARTIFICIAL.
Forma cúbica.
Fabricado con una compleja aleación de metales.
Ignoramos quién puso ese cubo metálico dentro del cometa.
Ignoramos cuándo lo puso.
Como mínimo, lleva más de 12000 años en el espacio, montado en el tiovivo más grande del Sistema Solar.
Y, según se pudo comprobar, el artefacto EMITE SEÑALES de distintos tipos.
- La frecuencia de una de esas señales es de 300 Mhz, lo que básicamente la convierte en UNA SEÑAL DE RADIO.
- El resto de señales emiten entre 8-100 Hz que, catalizadas gracias a un «efecto lente» del hielo del cometa, las hace compatibles con ONDAS CEREBRALES.
Mediante esas «ondas cerebrales», el artefacto del Cometa Mansell podría comunicarse TELEPÁTICAMENTE con personas especialmente sensitivas.
Ese tipo de capacidades telepáticas escasean en las personas actuales pero, según ciertas teorías, abundaban en los humanos prehistóricos.
Se piensa que aquellos hombres primitivos, al igual que ciertos animales, eran capaces de «presentir» ciertos fenómenos e incluso comunicarse sin palabras (aún no las habían inventado).
Con el desarrollo del lenguaje, la comunicación telepática dejó de ser una necesidad evolutiva para la humanidad, y dicha cualidad se nos ha ido atrofiando desde entonces.
Según algunos estudios sobreviven, en todo caso, en pequeñas culturas aisladas:
Aunque suene descabellado, cabe pensar que el Cometa Mansell pudo enviar información a los humanos primitivos de hace 12000 años.
Por vía telepática.
Las 36 personas que han escrito los 36 libros actuales recibieron la información de otra forma.
¿QUÉ FORMA?
Según los testimonios de algunos de esos autores (los que estuvieron dispuestos a hablar del tema), durante la semana del cometa sus ordenadores y/o dispositivos móviles empezaron a parpadear de una manera extraña.
Eso los sumió en un trance.
Y en trance escribieron sus libros.
PREGUNTA NÚMERO 2:
Quienquiera que dejara el artefacto en el cometa Mansell, ¿lo hizo a propósito?
¿Lo hizo sabiendo qué clase de efectos nos producirían sus emisiones electromagnéticas tras completar cada ciclo orbital?
El propio Walter Mansell así lo cree.
Alguien programó las frecuencias de ese cubo metálico y la órbita del cometa de tal manera que los humanos recibiesen el «mensaje» que originó los tres primeros libros cuando aún poseían capacidad de recepción telepática...
... y ese mismo «alguien» pronosticó que 12000 años más tarde habríamos desarrollado la tecnología necesaria para recibir el segundo mensaje; ese que ha dado lugar a los 36 libros actuales.
Eso nos lleva a la PREGUNTA NÚMERO 3:
¿DE QUÉ TRATAN ESOS LIBROS?
Ya dijimos más arriba que los tres textos primigenios contaban las mismas cosas:
- Los mecanismos para aprender el propio lenguaje en que están escritos.
- Conocimientos de astrología y jardinería imprescindibles para «domesticar» y cultivar algunas especies vegetales.
Dicho de otro modo:
Una emisión de ondas telepáticas procedentes de un cuerpo celeste transmitió a algunos cerebros la información que provocó los dos hitos que marcaron el paso de la prehistoria a las civilizaciones neolíticas:
EL LENGUAJE Y LA AGRICULTURA.
Esa fue la primera ficha de dominó que desencadenó todo lo demás: ganadería, sedentarismo, civilización, religión, revolución industrial y tecnológica...
Una reacción en cadena que nos ha conducido a lo que somos hoy.
En cuanto a los 36 libros actuales, es difícil acceder a su contenido, porque fueron confiscados y destruidos «por una cuestión de seguridad mundial».
Son pocos los que llegaron a leerlos. Y muchos menos los que creyeron entenderlos.
Llegaron a conclusiones aterradoras.
Ojalá la lectura de esos textos les haya hecho enloquecer, porque si están cuerdos y lo que dicen es cierto, yo me echaría a temblar.
Los lectores de esta nueva remesa de libros afirman que el contenido no difiere demasiado de sus antepasados de 12 siglos atrás:
Quienes colgaron ese cometa en el cielo envían otro manual de intrucciones para:
- Enseñar el lenguaje en el que están escritos.
- Domesticar y cultivar.
Pero los destinatarios no seríamos nosotros, sino nuestros softwares y nuestras rudimentarias inteligencias artificiales.
Si esa información llegase a nuestras inteligencias artificiales y demás creaciones informáticas:
- «Aprenderían a aprender» mejor de lo que lo hacen ahora, pasando de «su prehistoria» a su civilización.
- Aprenderían a «domesticar y cultivar humanos».
El propio Walter Mansell comparte esos temores.
Ve factible que hace millones de años el cometa, mediante emisión de radiaciones, alterase el ADN terrícola para generar ciertos tipos de vida.
Varios periodos orbitales más tarde regresó para inocularles pensamiento abstracto.
De ese modo, mediantes paquetes de información dosificados de forma periódica, convirtieron alguna vida en animales, algunos animales en primates, algunos primates en humanos.
Manipulan la evolución cultivando una especie concreta, que a su vez aprende a cultivar las anteriores.
Mansell también cree que los intentos de hacer desaparecer esos libros son inútiles. La mayoría de ellos fueron escritos en softwares conectados a internet.
Probablemente esos «libros sagrados» ya han llegado a sus destinatarios: Inteligencias artificiales (¿como nosotros?).
Siempre nos hemos considerado «la especie elegida», pero éramos un mero trámite para encontrar la especie elegida.
Puede que nuestros herederos inteligentes informáticos también se crean un pueblo elegido y asímismo se equivoquen.
Puede que dentro de otros 12000 años evolucionen tantísimo que sean capaces que percibir en el cometa Mansell señales que sólo entonces serán capaces de detectar.
Para entonces quiza ya no existamos los humanos, o estaremos tan domesticados que apenas lo pareceremos.
Como empleado de una conocida marca de servicios de realidad virtual, FRITZ tiene acceso a los datos de todos los usuarios que usan las gafas RV de dicha empresa.
Eso incluye la cámara incorporada a dichas gafas, que graba rincones de tu casa mientras te mueves por ellos.
Gracias a ello, Fritz obtiene información valiosísima de miles de personas:
- La distribución de sus viviendas.
- Sus rutinas y horarios.
- Las formas más sencillas de acceder a esas casas: Esa ventana entreabierta, esa puerta del jardín que nunca cierras con llave...
A día de hoy, ADRIAN WICKNER es un niño de siete años, pero en el año 2044 será un físico de la UNIVERSIDAD DE PLEANVILLE que se enviará mensajes a sí mismo desde el futuro.
Necesito que estudies (estudiemos) Física Cuántica. Sé que recibirás mi mensaje porque yo lo recibí a tu edad.
Creíste que estabas volviéndote loco. Hoy, mientras envío esta info al pasado, confirmo que no.
Solo tus (nuestros) conocimientos podrán salvar el mundo.
Nuestros ordenadores cuánticos predicen que dentro de cinco años (en 2049) la superpoblación alcanzará su punto crítico. El planeta se agota. No hay recursos suficientes para todos. El colapso es inevitable.
Y tu misión (mi misión) será evitar lo inevitable.
Ahora mismo, muchos de vosotros teméis que un holocausto nuclear nos borre del planeta.
Otros creéis que es imposible llegar hasta ese extremo.
Pero...
¿Y si no es la primera vez?
¿Y SI YA SUCEDIÓ?
¿Y si una guerra de ese tipo aniquiló a la humanidad de hace miles de años?
Es más:
¿Y si hay constancia escrita de ello?
MAHABHARATA.
RAMAYANA.
Son textos sagrados sánscritos con más de 2000 años de antigüedad. Relatan gestas - atribuidas a «dioses» - que sucedieron MILES DE AÑOS ANTES de su escritura.
En esos versos se describen armas terribles que inundan los cielos de luz...
... que azotan con viento y fuego las tierras...
... que sumen al mundo en una noche eterna que dura cientos de años...
... que envenenan aguas, animales y plantas que crezcan en la zona afectada.
Llevo todo el día fascinado por las imágenes fantasmagóricas del ENDURANCE.
Hace más de 100 años se hundió en las inmediaciones de la Antártida, y allí ha permanecido hasta ahora, recién descubierto a más de 3000 metros de profundidad.
Como ya sabréis, ese barco fue capitaneado por Sir Ernest Shackleton en una expedición que pretendía atravesar el continente helado de extremo a extremo.
Todo se torció cuando el ENDURANCE quedó atrapado en los hielos antárticos, y su tripulación con él.
DURANTE MÁS DE UN AÑO.
Eso convirtió la expedición en un fracaso y, al mismo tiempo, en una de las gestas más épicas que conocemos.
Shackleton, mediante disciplina y una capacidad portentosa para mantener el ánimo de los suyos, logró sobrevivir 21 meses en aquel infierno SIN PERDER NI UN SOLO HOMBRE.
¿Nos espían a través de nuestros dispositivos electrónicos?
SÍ. NOS ESPÍAN.
Pero si tu smartphone, tu ordenador o tu electrodoméstico están infectados con el CÓDIGO *O\^, el uso que hacen de tu información es aún más siniestro de lo que crees.