En la calle, nuestro comportamiento lo regulan las leyes del país. En lo digital, lo regula una compañía o un protocolo tecnológico.
Una visión actual pero rústica del metaverso es como cuando caminamos y hablamos por teléfono, operando simultáneamente en dos mundos: el de nuestra atención física para no tropezar y el de nuestra atención mental para mantener la conversación.
Los smartphones serán lentes de realidad mezclada con acceso al metaverso. En lugar de hacer (video)llamadas, caminaremos junto a la representación digital de nuestro mejor amigo, quien está físicamente al otro lado del planeta. Esto nos resultará tan natural como WhatsApp hoy.
Hoy cumplo 150 días ininterrumpidos aprendiendo ruso, chino y alemán al mismo tiempo con Duolingo.
Esto es lo que necesitas saber:
Importante: hablo inglés a un nivel bastante alto. Menciono esto porque cada idioma que dominamos adicional al materno nos ayuda para aprender otros más fácilmente. ¿Por qué? Porque cuando solo hablas el idioma de tu país, no tienes muchos puntos para comparar.
Comparar es importante porque es como agrupar ladrillos para construir una casa. Cuando ya pusiste los cimientos —el equivalente de entender las estructuras— las cosas son menos difíciles desde ahí.
1. Estudiar cosas fáciles: nuestra mente es capaz de cosas fantásticas, pero necesita empuje, entrenamiento, estrés, disciplina. Al quitarle esto en la edad más formativa de tu vida, saboteas las siguientes décadas.
2. Tener el mismo grupo de amigos: llega un punto de la vida adulta donde hacer nuevas amistades es complicado, tú aprovecha al máximo la época universitaria donde colisionas a diario con nuevas voces e ideas. No tengas un grupito exclusivo de amigos con los que haces todo.
¿Cómo consigues pasar en poco tiempo de ser el empleado que lava los autos a convertirte en el dueño de ese negocio?
Así ↓
Primero consigue el empleo. El salario, las prestaciones, el horario, obviamente todo esto estará muy lejos de ser ideal. Entiende que esta incómoda posición en la que te estás colocando es algo temporal, apenas una parte de tu estrategia ambiciosa ↓
Llega antes que los demás y sé el último en irte. Nadie te va a aplaudir por esto. Nadie te va a dar alguna especie de diploma por tu puntualidad y dedicación. No importa. Estás creando un músculo de mentalidad de dueño y ejecución de alto desempeño. Casi nadie tiene esto. ↓
Ve a eventos no gratuitos fuera de tu ciudad. Esto te hace ganar en grande:
• Salir de tu geografía te da visión.
• Escuchar otras personas te da ideas.
• Conseguir recursos para ir genera músculo.
Cuando queremos que todo ocurra en nuestras coordenadas, nos limitamos a la suerte de lo que el mundo nos pueda ofrecer. Muchos minimizan la importancia de asistir a eventos presenciales. Dicen cosas como "esos temas los puedes ver en YouTube". Sí, pero no.
Jamás va a ser lo mismo ver un video de una hora acostado en tu sofá que estar bañado, bien vestido y perfumado en un auditorio al lado de personas con la misma curiosidad que tú para escuchar la presentación de alguien que te va a lanzar en directo su energía desde el escenario.
Si eres inteligente académicamente, genial, esto te da una validación social que puedes ocupar a tu favor para muchas cosas. El error que muchos cometemos cuando tenemos esta ventaja de buenas calificaciones es que pensamos que somos inteligentes en todo y no es así.
Esto me ha llevado a conocer ingenieros que creen que pueden lanzar negocios solo porque son muy buenos en lo suyo y minimizan otros campos. O médicos que son prestigiados pero que no pueden escalar una compañía porque su ego no les permite admitir que son ignorantes del asunto.
Hay muchos tipos de inteligencia. ¿Has visto gente con problemas para estacionar de forma simple su automóvil? ¿Con problemas para coordinar pasos de baile? Una es inteligencia espacial y la otra kinestésica.