De manera recurrente, veo como algún médico de urgencias expone casos de gente que acude al hospital sin necesidad. Normalmente, se llevan bronca por falta de #vocasión, #paesotepago , ¿verdad, @DoctorSITHo ? Hoy voy a hilar mi experiencia como usuaria dl servicio y sobre su mal
uso. Yo no soy médico. Lo que relataré sucedió en un solo día, si tengo que explicar todo lo que he visto algunos me apedrean.
LLEGADA
Cruzo la puerta de urgencias andando con mucha dificultad, voy sola. Me adelanta una pareja de veinteañeros como una exhalación, casi me hacen
caer, ni se disculpan. Tonta de mí, creo que tienen a algún familiar grave y les han avisado para que acudan inmediatamente. Nada más lejos de la realidad, solo pretendían llegar antes que yo al mostrador de admisiones y lo consiguen. Mientras espero tras ellos, oigo atónita
como el motivo de la consulta es que ella se ha roto una uña. La administrativa indica de manera muy educada, que tal vez debería haberse dirigido a un centro salud. De todas maneras coge la tarjeta sanitaria e inicia el trámite de solicitud de visita. La muchacha replica: Es q
con la uña me he llevado un trozo de piel y me duele.
Yo no puedo evitar pensar que también se ha llevado unas cuántas neuronas y por eso patina.
La administrativa continúa con el tramite, pero insiste en que eso debería resolverse en un CAP. La chica se pone chula: Tengo
DERECHO a que me visiten.
Un #paesotepago de libro.
La administrativa, con tono conciliador, asiente y le dice que la van a atender como a todo el mundo, que solo se lo indicaba por si en el futuro se volvía a dar la misma situación.
No vaya a ser que la caradura se enfade y
ponga una queja.
Mascullo bajo la mascarilla: Sinvergüenza, así el día que necesites atención urgente te veas en una sala de espera todo el día porque a 100 como tú les ha dado por ir a reclamar su DERECHO a que les pongan una tirita en el hospital.
No me oye, menos mal. Sí,
el dolor y la indignación me transforman en alguien terriblemente borde.
Primera en la frente y no hago más que llegar.
DENTRO
Consideran que debo estar tumbada, pero no hay box libres. A final del pasillo han habilitado un espacio en el que
caben 6 camas separadas por unas cortinas que parecen sábanas colgadas de una barra de ducha. Se ve que es algo improvisado para dar cabida a más pacientes. Están desbordados. En menos de 10 min una enfermera encantadora ha venido, se ha presentado y me ha extraído sangre.
El médico tardará en pasar - me advierte. Si empeoro, puedo llamarles y acudirán enseguida.
El señor que está a mi lado aprovecha para pedir a la enfermera que le dé algo de comer, que lleva allí desde la 8 de la mañana - son las 14h- y no ha comido nada. La enfermera dice que
no puede comer nada y se va.
El hombre se dirige al resto de pacientes que estamos allí: No hay DERECHO, soy diabético, tengo que comer. Desde las 8 aquí y no viene ningún médico a verme. No me dan de comer. No estoy atendido.
A partir de ese momento llama al timbre cada poco
y exige comer. Añade frases como : Soy persona, no un animal. Tengo DERECHO. Soy español, tengo la nacionalidad - no era de origen español-.
Las enfermeras acuden a todas sus llamadas y le dicen que por orden facultativa no puede comer. Hasta que, ante la acusación de no
atenderlo y de trato discriminatorio, la enfermera explota y le suelta: Estás atendido. Tienes una cama, te ha visto un médico, te hemos hecho una analítica y te hemos puesto insulina. Tienes un pico de glicemia y hasta que no te baje no puedes comer nada. Él sigue a
lo suyo : Q venga un médico. Tengo DERECHO. Soy un ser humano. Tengo que comer.
Yo flipo. No cuesta tanto de entender ¿no? Si estás a tope de azúcar, no comes. 6 horas sin comer, tampoco es para montar ese número. En fin, el sigue llamando al timbre cada poco.
Mientras, han
ingresado a otro hombre en la cama que está en diagonal a la mía. El simulacro de cortina no cierra bien y nos vemos perfectamente. No me saca el ojo de encima. Llevo un vestido y estoy tumbada encima de la cama sin sábana. Cuido los movimientos, porque si flexiono las piernas
al tipo se le salen los ojos de las órbitas. Me sonríe. Viene la enfermera a sacarle sangre. Aprovecha para preguntarle si tiene novio o marido. Ella, muy educadamente, niega ambas cosas y se avanza a una posible tirada de caña: Pero estoy bien así ¿eh?
él no está para perder
el tiempo: Pero hay q casarse y tener hijos.
La enfermera se va. Él vuelve a clavar sus ojos en mis piernas.
Vienen a hacerme una eco, me piden q me levante el vestido. les digo que "el señor de allí me está mirando". Se pone una doctora enfrente para obstaculizar su campo
de visión. El muy caradura se levanta, hace ver que se dirige al baño y mira por el otro hueco. Lo pillan, lo fulminan con la mirada y vuelve a su sitio. No parece muy enfermo. Viene un médico a verlo. Tiene una vena grande en la pierna, no le duele ni le molesta. Hace poco
que vive en España y le han dicho que en el hospital te atienden rápido y bien.
¡Tócate, la peineta! Lo altan ipso facto, es una variz.
Ya son alrededor de las cinco de la tarde.
El que está muerto de hambre se pasea pasillo arriba y abajo,
relatando sus penas cual trovador en el medievo.
🎶🎶Me tienen abandonado, no me atienden, no como nada desde las 8 de la mañana que he entrado. Esto es discriminatorio, soy un ser humano. Tengo DERECHO 🎶.
Estoy de sus canturreos hasta las narices. me dan ganas de mandarlo a
pastar para que coma algo.
Sale un acompañante de un box : Oye mira, yo soy muy de izquierdas, pero mucho. Si yo viera que te tratan mal sería tu mayor defensor, pero lo que te dicen es lógico.
Alucino, la política en urgencias.
Al tipo esa
explicación no le convence. El discurso está aprendido y sigue con la misma matraca.
A todo esto ha llegado una chica. Se encuentra mal, tiene nauseas. Mientras espera a q venga un médico, le ponen una medicamento en vena para aliviarla. Mejora. El médico aún tardará en pasar.
Se quiere ir ya, pide al médico, q la vea y le de el alta. No puede ser, hay enfermos prioritarios. LLora. Vuelvo a oír el famoso "Tengo DERECHO". Le dicen que puede irse voluntariamente. Tampoco quiere.
Ya son las 19h.
Viene él médico a ver al desmayado. Por fin ha bajado la
glucosa. Ya puede comer. Va a pedir a la enfermera que le traiga algo.
Gracias al cielo - pienso- se acabó el penar.
Aparece la enfermera y oigo como le dice: Toma, es pavo. Lo puedes comer ¿no?
Yo no como pavo - responde. Tráigame otra cosa, por favor.
Me debato entre pedir
ese pavo para mí o un mojito con mucho hielo. Igual cuela porque soy persona y tengo DERECHO.
¡Oh, sopresa! La enfermera vuelve y le dice que no ha conseguido nada más de cocina. Vuelve el penar.
Canto gregoriano gratis de nuevo.
Una hora más tarde le dan el alta.
Ya son las 23h. Tienen box para mí. ¡Qué bien! Un poco de tranquilidad. Tengo que compartirlo con un señor que ronca como un oso, pero no me importa. M suena a música celestial. La compañía me dura poco. Se lo llevan y me traen a una compañera que al verme pregunta por mí
amablemente: ¿ Y esta quién es? ¿qué hace aquí?
Yo también estoy encantada de conocerla. señora.
"Quiero estar sola, no quiero que esta esté aquí. Que se vaya".
Cojo aire . ¿ A qué en cualquier momento suelta la famosa frase? "TENGO DERECHO".
Se dedica a encender y a apagar
la luz constantemente para q yo pida que me cambien de habitación. Antes muero, no sabe con quién ha dado. Va a tener que tragar conmigo.
Vienen, le echan la bronca, le piden que me deje descansar. Ella sigue. Y al fin lo suelta : Tengo DERECHO.
Y así es como esta sociedad se
ha ido a la mierda, me perdonáis la expresión, hace tiempo. Todo el mundo habla de DERECHOS y nadie pronuncia el término OBLIGACIONES.
Mi reconocimiento al personal sanitario por esa paciencia infinita. Hay que tener unos nervios de acero #NoMateisLaSanidad ❤️🩹
Aprovecho para explicar q el ❤️🩹#NoMateisLaSanidad es en defensa de una sanidad pública de calidad, en la que los profesionales sanitarios estén valorados y reconocidos como merecen y los usuarios reciban una atención con unos medios adecuados y a tiempo. Por si os queréis unir
• • •
Missing some Tweet in this thread? You can try to
force a refresh
Tuve una profesora de lengua castellana y literatura española con un carácter difícil de llevar. Le tenía pánico. Fijaos si era dura, Doña Pilar, que cuando murió mi abuela con solo 53 años (yo por aquellos entonces cursaba 7ºEGB)
de manera repentina y falté 3 días a clase, me cayó una bronca del quince: “Lerma, me da igual que viviera con ella y que representara la figura materna. La vida le va a dar muchos golpes, ¡Espabile! Que se le va a escapar el graduado escolar (tenía una media de sobresaliente).
Así era Doña Pilar, insensible a lo que pasara a su alrededor. Paquete de Ducados en mano nos daba lecturas que, a esa edad, cuando otros leían a Verne, nos parecían tochos. La casa de Bernarda Alba, Yerma, El sueño de una noche de verano…
Parece ser que tengo un nuevo tumor maligno en el riñón que me queda. Con el primero hice un hilo evidenciando la mala situación de la Sanidad en Cataluña, fui prudente y me callé cosas. Con este ya no me voy a callar nada. Aquí van a salir todas las vergüenzas. Al lío👇
Vaya por delante que en el PSSJD hay profesionales como la copa de un pino a los que estoy inmensamente agradecida, pero los hay que dejan mucho por desear empezando por los gestores. Vamos a ir desgranando la historia porque parece de ficción.
Mar 2019: Aparece un quiste renal tipo Bosniak II en un TAC que según dicen : "No precisa de controles periódicos".