El urbanismo denso de uso mixto es una solución parcial a graves problemas, entre ellos la crisis climática, el mal uso de suelo o el malgasto de energía en movilidad. #RecuperarLaCiudad
Pero incorpora un reto monumental, y no precisamente legal (que también). Al densificar una ciudad, su periferia queda aún más descubierta de lo que estaba. Si antes de densificar un núcleo central la periferia conurbada estaba en déficit, su problema se agravará.
Los desarrollos periurbanos residenciales de baja densidad son ineficientes a nivel energético, pero lo son aún más en materia económica. Están fuertemente subvencionados y sus impuestos no logran superar sus costes de infraestructura pública como calles, colegios, etc.
Cuando se densifica una ciudad atrayendo a residentes de la periferia, esta queda aún más descubierta. Si antes era no sostenible, ahora esa insostenibilidad se manifiesta al acortar el ciclo económico por debajo del relevo generacional.
Imagina un montón de dados tirados por una alfombra. Representan el urbanismo de baja densidad característico de EEUU. Cada dado es una vivienda. Aporta una unidad monetaria por ciclo, pero consume algo más para mantener la infraestructura.
Con la densificación del centro, algunos de estos dados se desplazan de la periferia al centro, constituyendo viviendas en alturas al ponerse unas encima de otras. Ahora el centro sigue dando una unidad monetaria, pero consume menos. El centro es sostenible. ¿Y la periferia?
La periferia todo lo contrario. Aunque sus viviendas siguen aportando una unidad monetaria por ciclo, ahora el coste de la infraestructura pública por hogar se multiplica por cada hogar que deja la zona. Por dos, por tres, por cuatro. En la Detroit dispersa, ¡por quince!
Mientas el centro se insufla de vida, la periferia (que ya adolecía de problemas fiscales) se hunde aún más rápido. 'Más' es la palabra clave. El proceso de densificación de Detroit no es el que hacía no sostenible la periferia, ya era no sostenible antes.
Cada calva urbana, cada vivienda abandonada por una familia que se va al centro, constituye un lastre para todas las demás familias que no pueden abonar el coste creciente de una residencia en la nueva ciudad.
En efecto, la transformación urbana hacia la sostenibilidad es de nuevo una lucha de clases. Lo será hasta que el acceso a una vivienda sostenible en un entorno urbano ídem esté al alcance de las familias que no pueden moverse de donde están.
Esta dimensión a menudo no se recoge en las propuestas de densificación urbana. Y es que no hay ciudad sostenible sin acceso económico a la vivienda.
Volviendo a la imagen del tuit con que abría el hilo, es imperativo dar solución habitacional a las familias dentro del punteado rojo de forma que sí tengan cabida dentro de la mancha roja del centro.
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Una vecina del barrio se ha mudado a una urbanización periférica de una ciudad a su vez periférica de la mía. Ha cambiado un barrio por un no-lugar, siendo el motivo principal que quería que su hija recién nacida disfrutase de un entorno libre de coches, humo, ruido. Dentro #hilo
Estoy convencido de que tienes cerca casos similares, si no eres uno de ellos. Es normal buscar entornos agradables tanto para nuestra familia como para nosotros/as mismos/as. El propio Edward Glaeser, defensor acérrimo de la vida urbana, admitía haber optado por esta opción.
Mi ex-vecina se llama Carol, nos llevamos genial y me ha dado permiso a usar su nombre real. Carol antes vivía junto a mi vivienda, en un barrio de Madrid. Llevaba a su hija a una guardería a 500 metros de su casa y trabajaba (sigue trabajando) en un supermercado a casi 1,5 km.
“With the left hand, the city's economic development and zoning approaches encourage more building out on the periphery. With the right hand, the city's public works department must now spend money on low-priority, negative-returning infrastructure because warrants have been met”
“The same goes for adding additional lanes, turn lanes, inter changes, or anything where meeting a warrant prompts action. For road design, no city is hostage to this system, forced to spend money simply because all transportation investments mature and grow up. That is backward”
“A city can decide that they are not going to spend their money on a new signal, an additional lane, an intersection expansion, or any other change and then use their land use controls to direct that out come.”
Vista satelital de la antigua cárcel de Carabanchel, en agosto de 2007. Destaca su cruceta central y el perímetro.
En marzo de 2009, el proceso de demolición había terminado casi por completo. La antes cárcel era ahora un solar de tierra de algo más de 95 000 metros cuadrados. Un erial.
Estamos en marzo de 2012. El último edificio hace tiempo que se ha removido, pero nada se ha hecho con el solar. Fruto del abandono, las hierbas se abren paso. Algunos árboles de antes del derribo siguen presentes. La vegetación marca los puntos húmedos del terreno.
Qué buena noticia. Superilla Barcelona. 👏🏽👏🏽👏🏽 Más árboles, menos coches. Creo que es la primera vez que veo rénderes realistas y contenidos. Han chetado un poco algunos árboles, pero el resultado es creíble. 20minutos.es/noticia/502336…
El antes y el después de un cruce. Se observa una reducción notable de asfalto y aparecen decenas de nuevos árboles que cubren con sombra la práctica totalidad de la calle.
Se observa una calle bastante deprimente (no ayuda que se haya tomado la foto en invierno) en la que el vehículo privado ocupa casi todo el espacio. En el render es primavera y hay más color. Por lo demás, repleto de árboles. Pregunta: ¿Qué pasará con las motos?
Me apasiona fuerte la huella que dejan los compositores en su piezas. Estoy escuchando el reciente álbum 'Cinematic Summer', que abre con la pieza 'Looking For The Next Great Idea' de la película 'A beautiful mind'. Pero en lo primero que he pensado ha sido en Andrew.
Andrew es el androide de la película 'Bicentennial Man', cuya banda sonora corrió a cargo de James Homer. El mismo James Homer que un par de años después compuso la música de 'A beautiful mind'. Decir que se inspiró es quedarse corto. Ambas películas son hermanas sonoras.
Pero no es lo único que comparten. En ambas películas los protagonistas comparten ser extremadamente inteligentes, empáticos por naturaleza, altamente incomprendidos y adelantados a su época.