La tetrica leyenda de la calle ataud, Miguel de Mañara y su entierro.
A dia de hoy la calle ataud no exicte. ampliación de la Plaza de Doña Elvira en el siglo XIX hizo que esta calle desapareciese. Su nombre se debía a su forma, ya que al ser tan corta y estrecha,
se decía que tenía forma de ataúd.
El protagonista de esta leyenda es Miguel de Mañara.
Cuenta la leyenda que el tan ilustre sevillano llevaba una vida disoluta llena de aventuras y largas noches en las tabernas de la ciudad.
Una de estas noches al salir de una de sus noches,
paseaba de vuelta a su casa palacio de san Bartolome, al pasar Santa Cruz con su paje, Alonso Pérez de Velasco, cuando llegaron a la iglesia de Santa Cruz y allí oyeron unos cánticos fúnebres, pero buscando de donde provenian no encontraban a nadie,
pero al llegar a la calle Ataúd sintió un fuerte golpe que consiguió tirarlo al suelo bruscamente. No había nadie en la calle que pudiese haberlo tirado, pero ambos oyeron una voz que decía «Traigan el ataúd que ya está muerto».
Cuenta la leyenda que al incorporarse
vio con mezcla de miedo y asombro que el difunto al que llevaban en el ataúd era su propia persona. Miguel de Mañara y su acompañante ante tal vision salieron huyendo de la zona a toda velocidad.
Tal hecho no solo salva la vida del personaje sevillano,
pues al parecer en su calle lo esperaban para darle muerte por un ajuste de amorios, si no que desde aquella noche cambia su vida radicalmente. Don Miguel desde entonces dedica su vida a los pobres de la ciudad.
El fantasma de la dama de blanco del palacio de los marqueses de la Algaba. El palacio de mediados del siglo XV situado en la collacion de Omnium Sanctorum, justo detrás del mercado de la calle feria. Construido por don Juan de Guzmán, primer señor de la Algaba,
en 1565 Felipe II otorga el marquesado de la Algaba a don Francisco de Guzmán y Manrique, que amplía el palacio lo dota de jardines. La desamortización de Mendizábal del siglo XIX provocó que el palacio sufriera un gran expolio y deterioro, el palacio
Llegó a comunicarse mediante un pasaje volado Con Omnium Sanctorum, de cuya Capilla Mayor eran patronos los marqueses. Durante el siglo XX llega a convertirse en el teatro Hércules y más tarde sus jardines en el cine de verano Arrayan. Pero vamos al fantasma, la familia Guzmán
La leyenda de la calle Sierpes. En su origen calle de los Espaderos, llamada así por la cantidad de comercios dedicados a eso que habia. Su leyenda negra comienzan a finales del siglo XVI, cuándo comienzan a desaparecer niños, Don Alfonso de Cárdenas, que regentaba la ciudad,
recibió un aviso anónimo de quien prometía revelar la identidad del culpable a cambio de su libertad. Se trataba de Melchor de Quintana y Agueso, bachiller de letras preso de la cárcel real de Sevillla por participar en una rebelión contra el rey, este intento huir de la cárcel
Cavando un túnel que llevaba a las cloacas de la ciudad, allí, el bachiller había dado con el ladrón de niños, dando muerte en el momento. Cuando Alonso de Cárdenas y sus hombres entraron en el túnel, se encontraron con una gran serpiente, con una daga clavada,
La leyenda de Itimad, la esclava de Triana que llegó a ser reina .Gobernaba Sevilla Almutamid, rey-poeta de la dinastía abadí. sabio e inspirado poeta, se rodeó de grandes literatos y otorgó a la corte sevillana un esplendor cultural desconocido hasta entonces .
Cuentan que Almotamid gustaba de pasear por la ribera del Guadalquivir junto a Aben Amar, otro poeta, su amigo y consejero. Una tarde paseando junto al Puente de Barcas que une la ciudad con Triana, se detuvieron a contemplar el río. Almotamid llamó la atención de su amigo
sobre la belleza que emanaba del efecto de la luz del sol de poniente sobre el agua rizada por la brisa .Aben Amar comentó adulador: “una cota de oro digna de un rey” Inspirado Almotamid comienza a hacerle un verso y empieza: Aben Amar comentó adulador:
Buenos día , sabías cual es una de las procesiones más antiguas de Sevillla? Aún se sigue celebrando cada 23 de noviembre y es la de la espada "lobera" y el pendon de San Fernando,
este acto fue impuesto por Alfonso X el Sabio en el año 1255 y es sin duda uno de los acontecimientos históricos que Aún se celebran en la ciudad, 23 de noviembre festividad de San Clemente.
Consiste en la celebración de una misa cantada ante el altar mayor y la solemne”PROCESIÓN DE LA ESPADA Y DEL PENDÓN DE SAN FERNANDO” por las naves de la Catedral, en la que participan los dos Cabildos de la Ciudad, el municipal y el del cabildo catedralicio,
Leyenda de las campanas salvadoras de San Lorenzo. Vivía en la calle Márques de la Mina 4, un albañil, llamado Esteban Pérez, un buen día del año 1868 fue requerido para un trabajo urgente, era una noche de invierno el trabajo raro pero la suma de dinero era tan grande que acepto
sería llevado al lugar con los ojos vendados y regresaría de la misma manera.
Ante esto ,el albañil no acepto, no se fiaba del todo del hombre de la chistera. Ante esta resistencia, el hombre misterioso sacó un revolver y a punta de pistola le obligó a subirse en el carruaje.
Durante horas estuvieron dando vueltas con el carruaje por la ciudad, al llegar, fue llevado a un sótano de una vivienda lo primero que vio fue una mujer amordazada. su misión consistía en levantar un tabique para que la habitación en la que se encontraba su rehén quedara sellada
Sabías de la leyenda de la venta de gatos y Bécquer? En el camino viejo del cementerio se encuentra está venta. En el año 1865 estando Bécquer allí quedó prendado de la belleza de una moza que allí cantaba, realizó un retrato de ella y se lo regaló al novio, hijo de los dueños.
El nombre de la moza era Amparo, que abandonada de bebé fue criada por esta familia como a una hija.
"El autor se fue de Sevilla y volvió 10 años después."
Todo le pareció muy cambiado y fue a la venta en la que estuvo para ver como iban las cosas.
Se la encontro vacía y falta de alegría, Entonces el ventero le estuvo contando que un día vinieron unos hombres preguntando por Amparo que resultó ser la hija de un rico. Se la llevaron, no sin mucho luchar, y desde entonces la desgracia cayó sobre ellos