Un número masivo de argentinos se quiere ir del país. En los círculos más ricos y escolarizados una temática de cualquier conversación es Ezeiza. Los trámites de ciudadanías hacen colapsar a consulados extranjeros. Cualquier persona que quiera negar estas realidades es psicópata.
El motivo número uno de emigración es CFK: mientras exista la expectativa de que ella y el 30% que la sigue a todos lados tengan algún tipo de poder, nadie creerá en el futuro de este país. Macri falló en parar el éxodo (lo cual en sí quizás hasta lo exacerba) pero no lo causa.
¿Cómo los jóvenes no van a querer irse de un país que les puede llegar a ofrecer trabajos de USD 400 mensuales si tienen suerte? ¿Qué persona con grado y posgrado querría quedarse por USD 800? ¿Quién va a poder comprar un departamentito de USD 60.000 en un país sin crédito?
Aterrizamos en Ezeiza y acaban de anunciar que tenemos que hacer tiempo dentro del avión porque el régimen deja descender a los pasajeros de 1 (una) aeronave por vez y ya están ocupados con otra. Ni olvido ni perdón a estos tipos.
¿Se dan cuenta de lo que son estos enfermos? Son la personificación de la barbarie, en ningún lugar civilizado ocurren semejantes disparates. El objetivo es simplemente destruir por destruir.
Está todo listo y el piloto dice que solo esperan un llamado. La voz se le nota desencajada, me da ternura porque pide disculpas a los que tienen conexiones como si Ezeiza no fuera un pozo tenebroso del que apenas sale medio avión por día.
Transmitiendo desde Sant’Elia a Pianisi, provincia de Campobasso, región Molise. Desde aquí se mudó mi bisabuelo Leonardo hacia Balcarce en la primera década del siglo XX.
Les voy a ir contando mi día en el pueblo. Si le interesa a alguien, bien; si no, también. Este es un simple relato sin giros ni desenlaces inesperados.
La señora que me alquila una habitación en su casa se llama Evelina; su apellido (Colavita) es parte de mi árbol genealógico. Vive en el campo con su marido, cinco perros, tres gatos, dos caballos, dos de carne y una de jamón y queso.