Thread by @lauramorron

La bioquímica Marianne Grunberg-Manago participó, junto a Severo Ochoa, en la identificación de la enzima polinucleótido fosforilasa, que se convertiría en una herramienta fundamental para el desciframiento del código genético.
¡Dentro🧵!
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Nació en San Petersburgo el 6 de enero de 1921, pero emigró con sus padres a Francia con menos de un año. Allí vivieron en condiciones precarias hasta el punto de que, con 12 años, los profesores le prestaban los libros, sobre todo diccionarios, para que pudiera estudiar.

Tras acabar el bachillerato en Niza obtuvo un certificado de literatura comparada y decidió ser arquitecta como su madre. Pero la guerra truncó sus estudios y se puso a hacer sustituciones de profesores de matemáticas y ciencias naturales en las escuelas de Nimes.

Así nació su vocación por la ciencia y acabó cursando Ciencias Naturales. Se doctoró en 1947, en el laboratorio de Biología Marina de Roscoff, con la tesis «La acción del oxígeno sobre el metabolismo intermedio de bacterias estrictamente anaeróbicas gram positivas y negativas».

Durante el segundo Congreso Internacional de Bioquímica, su tutor en el Institut de Biologie Physico-Chimique, Eugène Aubel, le presentó a Severo Ochoa que la aceptó en su laboratorio, si investigaba antes en el laboratorio de Irwin C. Gunsalus.
royalsocietypublishing.org/doi/pdf/10.109…

En 1954, investigando sobre la fosforilación oxidativa, identificó una enzima capaz de sintetizar ARN in vitro, a la que nombró polinucleótido fosforilasa (PNPasa). Se publicó el descubrimiento en el Journal American Chemical Society y en Science con Marianne como primera autora.

Quienes estéis interesados en profundizar sobre el descubrimiento os recomiendo leer esta entrada, así como los dos artículos científicos:
sciencedirect.com/science/articl…
pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/13274047/
science.org/doi/10.1126/sc…
¡Seguimos!

En 1956, Marianne Grunberg-Manago rechazó la oferta de Ochoa de seguir en su laboratorio para regresar a París a reunirse con su esposo el artista Armand Manago. Allí liderará un grupo propio de investigación en el IBPC (Institut de Biologie Physico-Chimique).

En el IBPC continuó investigando la PNPasa y se centró en los estudios del código genético y el mecanismo de la traducción. Con la incorporación de eficaces sistemas in vitro, dirigió sus proyectos hacia las estrategias de control de la expresión génica.
mujeresconciencia.com/2017/10/03/mar…

El 15 de octubre de 1959 el Instituto Karolinska concedió el Premio Nobel de Medicina a Severo Ochoa y Arthur Kornberg —quien había purificado la enzima ADN polimerasa— por sus descubrimientos sobre el mecanismo de la SÍNTESIS BIOLÓGICA del ARN y del ADN.

No se premió a Marianne Grungerg, aunque, quizá tampoco hubieran premiado a Ochoa de haberse sabido entonces lo que se supo poco después: que, in vivo, en la célula, la PNPasa no sintetiza el ARN, sino que lo degrada. Pero, ¡seguía siendo fundamental!
elpais.com/elpais/2017/11…

Grunberg-Manago vio enseguida el potencial del comportamiento in vivo de la PNPasa. Era una enzima de restricción –«tijera biológica»– y, como tal, tenía gran utilidad en la ingeniería genética. Severo Ochoa afirmó que podía considerarse «la Piedra Rosetta del código genético».

En 1968, M. Nirenberg, Har G. Khorana y Robert W. Holley recibieron el Nobel, «por su interpretación del código genético y su función en la síntesis de las proteínas». Logro que no hubiera sido posible sin la PNPasa. Pero sus descubridores, Grunberg y Ochoa, se quedaron fuera.

Grunberg fue pionera en diversos cargos. Fue la primera mujer profesora en Harvard, la primera mujer en presidir la Unión Internacional de Bioquímica y Biología Molecular y la primera mujer presidenta de la Academia Francesa de Ciencias.

Me gustaría destacar también su labor divulgativa como editora jefa de la revista «Biochimie» de la Sociedad Francesa de Bioquímica y Biología Molecular en la década de 1980, así como su labor conciliadora con los países de la guerra fría.
sciencedirect.com/journal/biochi…

En 1966 obtuvo el premio Charles-Leopold Mayer y en 2008 fue galardonada con la valorada Légion d’Honneur, alcanzando el rango de Grand Officier.
Falleció el 4 de enero de 2013.
Nos queda su legado.