Hace unos días me encontraba con un vídeo en TikTok de una madre hablando en un cementerio a los nichos de sus cuatro hijos, me llamó la atención la forma en que ella afrontaba el duelo y decidí investigar su historia.
Los hijos de Pamela Nisi👇
Era el Domingo 8 de enero del año 2023, una familia alrededor de las 23:00 horas aproximadamente se encontraba dentro de una casa en la ciudad de El Jagüel, ubicada en la Provincia de Buenos Aires. Cuatro niños dormían en una habitación mientras que otros miembros iban a cenar.
En esa casa ubicada en la calle Talcahuano al 1135, vivían Benicio y Noah Nisi, mellizos de 4 años, Lorenzo del Río de 6 años, Santino Hardoy de 10 y un adolescente de 15 años que era hermano mayor de los niños. Además la madre Pamela Nisi y su concubino Catalino Daniel López.
Aquel día había sido una larga jornada de trabajo para Catalino López y el adolescente de 15 años, ya que al adulto por alguna razón se le había ocurrido alzar escombros que estaban al frente y en el patio del predio hasta el techo de la vivienda donde residían las 7 personas.
El adolescente, hace apenas una semana había vuelto a vivir con su madre y sus hermanitos, muy colaborativo estaba ayudando a su padrastro con las tareas del hogar. Siendo las 20:00 horas terminaron de subir los escombros al techo y decidieron que era momento de descansar.
Entre el aseo posterior al trabajo y el descanso intercalado de charlas familiares pasaron las horas, los cuatro niños pequeños ya se habían dormido en una habitación mientras que Pamela y Catalino se encontraban en la cocina preparando la cena para dar por culminada la jornada.
El adolescente estaba en la misma habitación que sus cuatro hermanitos, de repente algo en el ambiente llamó su atención, un "polvillo" se estaba combinado con el aire y una leve sensación de temblor hizo que una alarma de peligro se encendiera en su cabeza, decidió salir.
Su intención era avisarle a su madre y a su padrastro de lo que estaba sucediendo, cuando se dirigía a la cocina un sonido ensordecedor como si se tratara de una detonación paralizó a todos, se miraron entre los tres y de inmediato supieron lo que había acontecido.
El techo de losa que estaba encima de la habitación donde dormían los niños se había desplomado, los más de 5.000 kilos de escombros que cargaron encima vencieron la débil estructura y cayeron directamente sobre Benicio, Noah, Lorenzo y Santino.
Los vecinos acudieron al lugar.
Dieron aviso a los bomberos, mientras que otros ingresaban a intentar remover los escombros para dar con el cuerpo de los niños, casi cinco metros de altura tenía el cúmulo de piedras relataban los testigos, era una tarea titánica escarbar para poder sacarlos de allí.
Luego de mucho trabajo dieron primeramente con el cuerpo de Noah, aún estaba con vida e intentaron realizar el traslado para que reciba atención médica, pero lamentablemente falleció cuando se dirigían hasta el Hospital Santamarina, las heridas eran irreversibles.
Los minutos se convirtieron en horas, el mundo de Pamela, aquella madre que jamás imaginó que algo así podía suceder, se derrumbó con la caída de ese techo en aquella habitación de 3x3. La tragedia paralizó a los vecinos de El Jagüel, quienes aún intentan comprender lo que pasó.
Entre los escombros encontraron la billetera de Santino, el nene de 10 años, quien iba a cumplir 11 el 3 febrero y estaba juntando dinero para alquilar un toro mecánico, el escenario de la tragedia rompía en pedazos a aquellos que recordaban a las víctimas.
La fiscalía, luego de escuchar los testimonios de los vecinos, decidió imputar a Catalino López, quien no es padre biológico de ninguno de los niños y mantenía una relación hace meses con la madre de ellos. Aunque se conocen hace ocho años del ambiente laboral aparentemente.
La carátula de la imputación es Homicidio Culposo Agravado por el Vínculo, ya que por sus indicaciones se depositaron las 5 toneladas de escombros encima del techo donde dormían los pequeños. La casa que era de Catalino ya se había "reconstruido" unas cuantas veces.
La estructura de esa vivienda había sido levantada por las manos de su propietario y aparentes malas construcciones hicieron que haya tenido que tumbar paredes en varias ocasiones. Hace poco tiempo habían instalado una pileta para los niños en el patio del predio.
Pamela le pidió a Catalino que se deshaga de los escombros que estaban por el lugar, ya que entre las bicicletas, los triciclos y la pila se convertía en un lugar inseguro para los niños. El hombre no quiso alquilar un camión que le saldría 10.000 pesos para llevar las piedras.
Además Catalino dijo que esos escombros servirían para futuras construcciones que estaba planeando y por ese motivo decidió despejar el suelo para subir las piedras al techo de la vivienda, Pamela nunca se imaginó que sería sobre la cabeza de sus hijos y que podría desplomarse.
Pamela perdió a 4 de sus 6 hijos, el adolescente que vivía con ella se salvó de milagro y tiene otro hijo de 18 años que ya no vivía con ella. Luego en sus redes sociales publicó: "fallecieron mis cuatros hijos, me siento morir, no quiero vivir más, se me fueron al cielo".
"Quién me saca este dolor. No puedo más, por qué la vida es injusta conmigo. Por favor, no puedo más. Los extraño, mi Lolo, mi Santi y mis bebés”. Escribió en otro posteo de Facebook Pamela Nisi, quien recibe asistencia psicológica y medicamentos desde entonces.
Luego de la tragedia Pamela se separó de Catalino y se encuentra en búsqueda de justicia. Suele visitar el nicho dónde yacen los restos de sus hijos fallecidos, en sus visitas habla con ellos, les lleva regalos y comparte videos para sentirlos vivos.
Este es uno de los casos más misteriosos, cada parte es un laberinto sin salida o una pregunta sin respuesta, cada vez parece estar más lejos la posibilidad de que sea resuelto.
La desaparición de la familia Gill 👇
Transcurría la semana de pascuas del año 2002 cuando un hombre llamado Alfonso Goette llega hasta la casa de la familia Gill para preguntar por el peón que trabajaba en su estancia denominada "La Candelaria", ubicada en Crucecita Séptima, Departamento Nogoyá de Entre Ríos - Arg.
El hombre alegó que en enero de ese año le había dado vacaciones a la familia que residía y trabajaba en su estancia, el lapso de descanso era de tres meses pero nunca más regresaron para continuar con sus labores. Ese fue el momento en que comenzó la búsqueda de la familia Gill.
Volvía de la clase de gimnasia pero nunca ingresó a su departamento, la buscaron intensamente hasta que fue hallada de la peor forma.
Un crimen casi perfecto, un caso que marcó historia.
Ángeles Rawson 👇
El 10 de junio del año 2013 Ángeles Rawson volvía de su clase de gimnasia a un departamento de la planta baja del edificio ubicado en la calle Ravignani 2360 del Barrio Palermo en Buenos Aires, Argentina. Cámaras de seguridad captaron ese momento que sería histórico.
El problema comenzó cuando Ángeles alias "Mumi" de 16 años, nunca ingresó a su domicilio. De inmediato sus familiares comenzaron a buscarla para saber cuál era su paradero, sin embargo nadie sabía nada y la incertidumbre comenzaba a crecer a medida que las horas pasaban.
Paso a contarles un caso sumamente extraño que hasta el día de hoy no ha quedado claro.
Dos hermanos coreanos asesinados a sangre fría y una escena que revelaba un trasfondo mafioso.
La muerte de Alejandro In Shin (10) y Hye Ryun In (15) 👇
Pasadas las 00:20 horas del 25 de septiembre del año 1999, una pareja llegó a su vivienda ubicada en el Barrio Mburicao de Asunción en Paraguay, esperaban encontrarse con sus hijos a quienes habían dejado solos por unas cuantas horas para ir a jugar tenis.
Cuando estaban ingresando al lugar, comenzaron a visualizar manchas de sangre por todos lados, un silencio aterrador se adueñaba de la escena mientras seguían caminando rumbo a la habitación. En una cama matrimonial estaban sus hijos tapados con un gran edredón.
En la ciudad de Luque un joven se enteró que era adoptado y por ese motivo asesinó a las personas que le brindaron todo en la vida.
Luego de disparar a su madre y descuartizar a su padre con un hacha, se sentó a escuchar música y beber cervezas.
Ricardo Villalba Patiño 👇
En la madrugada del 13 de enero del año 2002, vecinos del Segundo Barrio de Luque en Paraguay, llamaron a la policía denunciando que habían dos sujetos en el predio de una vivienda realizando disparos al aire, ingiriendo bebidas alcohólicas y escuchando música a todo volumen.
Los agentes policiales llegaron al lugar donde estaban Ricardo Constantino Villalba Patiño y Lorenzo Miranda, ambos en estado de ebriedad, por lo que fueron aprehendidos y derivados hasta la sede policial. A las pocas horas estos jóvenes lograron recuperar su libertad.
Hoy vamos a desarrollar uno de los crímenes más misteriosos e históricos del Paraguay, un hecho que dejó en evidencia la influencia del narcotráfico en el país.
El crimen del Gral. Ramón Rosa Rodríguez - Director de la Dirección Nacional de Narcóticos (DINAR) hoy llamada SENAD.
El lunes 10 de octubre del año 1994 una camioneta de la marca Mitsubishi Montero se estacionaba frente a la entrada del Colegio Internacional de Asunción sobre la calle Jorge Berges casi Washington a las 7:10 horas aproximadamente, un padre llevaba a su hija a la escuela.
Este padre era nada menos que el General Ramón Rosa Rodríguez, Director de la Dirección Nacional de Narcóticos del Paraguay, el cual iba de acompañante en su vehículo particular. El conductor era Pedro Abundio Fleitas Silva, chófer personal de la familia del General.
En muchos de los casos que desarrollamos intentamos comprender el contexto de un crimen, el porqué de las cosas.
Sin embargo, hay uno en particular que no tiene ningún tipo de sentido y es totalmente desconcertante.
El caso de Sonia Aguilera Lezcano 👇
El 15 de enero del año 2003 un hombre llamado Egidio Caballero llegó a una casa en la Compañía Capilla Cue, Piribebuy - Paraguay y encontró a sus tres hijos muertos. Los cuerpos de Nidia Vanina de 4 años y Alexis Gabriel de 3 estaban sin vida sobre una cama matrimonial.
Fabricio Iván Caballero de tan solo 9 meses también había perdido la vida y su pequeño cuerpo descansaba sobre una cuna, dentro de la habitación y a simple vista se podía observar un cuchillo. El padre de estas criaturas quiso auxiliarlos pero ya nada se podía hacer.