Thread by @kursant_1917

A día de hoy, y según los datos del Ministerio de Interior, hay poco menos de 11.000 inmigrantes irregulares en España, un 0,02% del total de la población. Lo que el ejecutivo de Sánchez está haciendo aquí es aprovecharse de la existencia de una minoría absolutamente desangelada

https://twitter.com/rtvenoticias/status/1829094138681159739

para realizar propuestas que la burguesía y su Estado están dispuestos a cumplir pero que no suponen un cambio sustancial en el modelo demográfico. Dicho de otro modo, si el tanteo mediático les granjea buenos resultados, los telediarios pronto estarán colmados de recortes

de las expulsiones forzosas de este estrato del ejército de reserva. Este movimiento, como señala aquí @NombreFalso1231, se debe al viraje a la derecha del discurso político público. Pero discrepamos en aquello de que el PSOE haya comprado sus marcos.

https://x.com/NombreFalso1231/status/1829134447016321249

Porque sustituir unas ideas por otras implica la existencia de un programa político firme del que el PSOE, más allá de cuatro vaguedades, carece, siendo que se trata del Partido del Orden. Esto es un viraje oportunista, electoralista, mercadotécnico.

Y es que no hemos de olvidar que los partidos burgueses actuales no solo no son capaces de arremolinar a las masas fuera de las urnas, sino que se rigen ya como empresas privadas cuyo único objetivo es autoreproducirse alimentando la maquinaria estatal y todo su circo.

En 2013, y según los datos dispuestos públicamente, el PSOE contaba con unos 216.000 afiliados [Captura I], mientras que el censo a la militancia interna a razón de la investidura del año 2023 daba la cifra de 172.611 afiliados [Captura II]

Los «grandes partidos» son agentes a sueldo del gran capital. Del mismo modo que éste desplaza parte de sus ganancias a toda una serie de procesos en aras de sancionar el intercambio de la mercancía, paga a su mercenariazgo político para que luche sus intrigas palaciegas por él.

Así, y dicho en cristiano, más allá de los intereses que representan, los movimientos políticos del PSOE, el PP o VOX no se deben tanto a la «razón de Estado» como al márketing. He aquí la prueba.