Los sucesos de Torre Pacheco son una muestra más de cómo el clima ideológico y cultural apunta cada vez más hacia el exclusivismo nacionalista, hacia "la guerra racial" y el "choque de civilizaciones".
Esto es fruto de la agudización de la crisis del modelo del Estado del Bienestar que vive el Estado español desde hace décadas y que es apuntalada por el reformismo socialdemócrata.
Este reformismo genera cada vez más hartazgo entre las masas, que empiezan a buscar una salida radical a la crisis, lo que en el contexto actual se traduce en que el exclusivismo nacionalista y el racismo tienen cada vez más un carácter social.
La crisis cronica ha reverberado en la aristocracia obrera. La realización de su programa sindicalista, feminista y republicano de la mano del PSOE, Podemos, Sumar,etc no ha impedido que siga perdiendo posiciones.
Por ello, una facción de la AO ha emprendido la crítica oportunista del oportunismo, apostando por el socialchovinismo como forma de luchar por recuperar sus viejas posiciones, alimentándose de los límites objetivos del reformismo tal y como se presenta hoy día.
El socialchovinismo educa al proletariado en los prejuicios nacionalistas, defendiendo la división nacional(ista) del proletariado y fomentado la competencia y enfrentamiento entre proletarios, sea en las trincheras de Ucrania o en los barrios obreros contra la población migrante
El socialchovinismo promueve la unidad del movimiento obrero con la burguesia, le hace aliado de sus andanzas imperialistas, educándose en el saqueo, asesinato y opresión de los pueblos del mundo.
Esto es un problema de primer orden para el comunismo revolucionario, pues educar a la Clase en la defensa de la división nacionalista del proletariado deriva en el egoísmo nacionalista, en la estrechez mental y en el servilismo con la burguesia
Por ello, los proletarios conscientes deben luchar contra todo prejuicio nacionalista en el movimiento comunista, ahondando en el Balance del Ciclo de Octubre,y promoviendo la unidad internacionalista en torno a la lucha de dos líneas sobre este.
El proletariado consciente también debe guiarse por el principio internacionalista de una Clase, un Estado, un Partido.
Principio que se condensa en la proclama inmortal de nuestra clase:
¡Proletarios del mundo, uníos!
Para ampliar acerca de la crisis que vive el bloque atlantista en general, y el Estado español en particular se pueden consultar los siguientes documentos del CxR:
Doctrina Dahiya: doctrina militar israelí. Se basa en el castigo colectivo. Aunque deslegitime a los sionistas, su aplicación es coherente con los principios de la guerra total y su dimensión de masas. NO hay daños colaterales. Hoy, a la palestina, sumamos la sangre libanesa.
Israel parece comprender y aplicar un principio básico de la doctrina militar burguesa: hay que "destruir moral y materialmente al enemigo" (Giulio Douhet). Para ello, no hay medidas bélicas reprobables; ese aspecto, el moral, SIEMPRE ha sido papel mojado para la burguesía.
Por eso, la guerra psicológica forma parte de la doctrina militar burguesa, porque destruir la voluntad de resistencia es capital para el imperialismo. El viraje hacia el pragmatismo solo expresa cómo se diezma la subjetividad de la resistencia anti-imperialista.