Pongan atención que hoy les voy a contar la verdadera historia de La Sirenita.
Esta historia se la conté cuando empezaba a contar historias, pero tuve que dejar muchas cosas fuera porque no se podían poner tantos caracteres y hubiera durado mucho.
Así que pónganse cómodos que viene el Snyder Cut de la Sirenita.
Empecemos por lo básico: La Sirenita es una historia de 1836 escrita por el danés Hans Christian Andersen.
En un principio pensó en representarla en una obra de ballet, pero terminó por publicarlo como parte de una serie de cuentos para niños en abril de 1837.
Los cuentos de Andersen se caracterizaban por ser duros, sus finales no eran siempre felices, luego les cuento algunas otras historias pero este cuento, al igual que otros del autor, (como El Patito Feo, Pulgarcita, El traje Nuevo del Emperador) contiene una gran lección.
Bueno, pues nuestra historia empieza en un reino submarino, ahí es donde vive nuestra protagonista, jamás se menciona su nombre, bien podría llamarse Ariel, Juana, Rebeca, Petronila o como ustedes quieran.
Nuestra protagonista vivía con sus 5 hermanas mayores, su padre, el rey del mar y su abuela.
Todos vivían muy felices menos nuestra protagonista, que se la pasaba mirando hacia arriba esperando cumplir 15 años porque a esa edad le permitían a las sirenas asomarse a la superficie
Cuando el día de si cumpleaños llegó, ella feliz subió a ver el mundo y lo primero que se encontró al asomarse fue un barco.
En ese barco se encontraba un apuesto príncipe haciendo una fiesta.
La sirenita al verlo se enamoró perdidamente de él, de hecho dijo…
… para sus adentros que le gustaría conocer a ese apuesto príncipe.
Y el destino quiso que una tormenta se desatara y el barco se hundiera, la Sirenita únicamente rescató al apuesto príncipe y lo dejó inconsciente junto a un templo que estaba a la orilla del mar.
Regresó a su casa y prendada de amor le preguntó a su abuela sobre los humanos.
Su abuela le dijo que los humanos eran frágiles y vivían muy poco tiempo en comparación a la gente del mar, de hecho los humanos tienen alma inmortal y la gente del mar no.
Además la gente del mar se transforma en espuma de mar cuando dejan este mundo.
Y a partir de ese día la sirenita se obsesionó con los humanos, en especial con el príncipe.
La gente del mar vivía 300 años pero eso no era nada comparado con tener un alma humana e inmortal, además de nada servía vivir mucho si estaría lejos de su príncipe, así que acudió a pedirle ayuda a la malvada bruja del mar.
La bruja sabía que la sirenita tenía la voz más bella que había, así que se aprovecha de su enamoramiento y le dice que le dará un par de piernas para ir a buscar a su príncipe a cambio de su melodiosa voz.
La sirenita acepta y la bruja saca un cuchillo y le corta la lengua.
Le da una pócima para que le salgan piernas y luego le dijo que había un pequeño detalle, que si no lograba casarse con el príncipe y él se casaba con otra, ella moriría al día siguiente.
¿Podrá lograrlo nuestra protagonista?
Pero ese no era el único truco, la poción que le dio la malvada bruja hacía que cada que la sirenita diera un paso, sintiera un dolor parecido a caminar sobre cuchillas afiladas.
Pero ella estaba dispuesta a reencontrarse con su príncipe.
Pero cuando llega al palacio a reencontrarse con él, resulta que no la recuerda, ella no le puede decir que fue su salvadora y además el príncipe tiene decenas de esclavas que lo entretienen bailando para él.
Ella para complacerlo se pone a bailar junto a ellas.
El príncipe la obligaba a dormir en el suelo afuera de su habitación, además la hacía bailar y caminar grandes distancias, recuerden que cada paso significaba un tremendo dolor.
Cada noche ella se acercaba impotente al mar y lloraba desconsoladamente.
Eventualmente sus hermanas descubren lo que le hace el príncipe y por las noches acudían a verla llorar junto al mar, no podían hacer nada por ella, pero por lo menos le hacían compañía.
Y así fueron pasando los días y nada que la sirenita lo convencía de casarse.
El príncipe había decidido casarse con la chica que lo salvó aquel día en el mar, pero como no recordaba quién era, su madre le dijo que era la hija de un rey vecino.
La sirenita tenía que hacer algo pronto o su vida terminaría.
Pero por más que trataba de complacer al príncipe, el no se fijaba en ella, la humillaba constantemente e incluso la obligó a cargar la cola del vestido de la mujer con la que se iba a casar.
Cosa que nuestra protagonista acepta para complacerlo.
Sin nadie que le dijera, “Amiga date cuenta”, renunció a todo, soportó dolor, perdió la voz, su casa y todo por alguien que sólo la utilizo y para colmo se había casado con otra.
El día de la boda su corazón se rompió y para colmo al amanecer moriría.
Su destino estaba sellado, pero cuando acudió al mar a llorar como cada noche, vio a sus hermanas observándola, se acercó a ellas y le sorprendió ver que ninguna tenía pelo y ellas le explicaron que se lo habían cambiado a la bruja del mar a cambio de una solución.
La bruja del mar les dio un cuchillo mágico, la sirenita tenía que cortarle el cuello al malvado príncipe y bañar sus pies con sangre, si lograba hacerlo antes del amanecer volvería a ser una sirena, salvaría su vida y además el dolor que sentía a cada instante terminaría.
Decidida a vengarse, la sirenita esperó a que el príncipe y su esposa se quedaran dormidos, se coló en su habitación y se preparó para asesinarlo, acercó el cuchillo a su cuello y …
Lo vio tan bello y tranquilo que no se atrevió a hacerle daño.
Corrió hacia el balcón y se arrojó contra las rocas y justo en el momento en el que su cuerpo iba a llegar, salió el sol y se transformó en espuma de mar.
Peeeeeero….
La maldición de la bruja no se cumplió, en realidad se elevó al cielo y por su nobleza se convirtió en una…
…Hija del aire, y las demás hijas del aire le dijeron que por haber intentado tener un alma eterna le darían una oportunidad para obtener la inmortalidad, pero tendría que hacer 300 años de buenas acciones.
Ella aceptó feliz
El cuento se escribió en 1836, así que seguramente la sirenita sigue ahí afuera, ayudando a la gente en los mares y al final logrará tener el alma eterna que tanto quería.
Y aquí termina esta historia, espero que llegue en el momento adecuado a toda persona necesite leerla.
Jamás olvidemos que el amor eterno sí existe, se llama amor propio.
Fin.
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