Pongan atención que hoy les voy a contar la historia de “Las Estrellas del Corredor de la Muerte”, el equipo que sería condenado si llegaba a perder un sólo partido.
Nuestra historia empieza en Rawlins Wyoming en 1878, y empieza con George “Big Nose” Parrot, un criminal que era líder de una terrible banda que aterrorizaba las poblaciones de Wyoming.
En un principio muchos simpatizaban con los bandidos, pero un día cruzaron la línea y la opinión pública los aborreció.
Resulta que luego de ser descubiertos robando un tren, George le ordenó a sus compinches que asesinaran a los dos agentes de policía que los habían tratado de arrestar.
Tras ese infame acto se ganaron la enemistad los habitantes de Wyoming a causa de lo sangriento del crimen.
Se ofreció una recompensa de 1,000 dólares por el arresto de George, pero eso no lo amedrentó y continuó cometiendo crímenes hasta que en una borrachera él y Charlie Burris (su segundo al mando) fueron arrestados.
Tras arrestarlo se burló de la policía, les dijo que iban a cometer un error y se les iba a escapar en 24 horas y los oficiales respondieron…
…que más le valía porque seguramente sería sentenciado a morir en la horca.
En 1881, después de ser sentenciado a muerte, trató de escapar de prisión, golpeó a un guardia en la cabeza con las esposas y lo noqueó.
El ruido alertó a otra persona y a punta de pistola hizo que George regresara a su celda. Al día siguiente la gente del pueblo se enteró y decidieron hacer justicia por su propia cuenta, un grupo de personas encapuchadas entró a la comisaría, lo sacaron de su celda y lo golpearon
Cuando la turba de casi 200 personas desapareció, al cuerpo de Parrot estaba ran golpeado que le faltaban pedazos de piel y parte del cráneo había desaparecido.
Más tarde se supo que se fabricó un cenicero con su cráneo y su piel se utilizó para hacer unos zapatos que se exhibían en una peluquería de la avenida principal como advertencia a todo aquel local o foráneo que cometiera un crimen en la ciudad de Rawlins.
En Wyoming muchos estaban a favor de matar a los criminales antes de permitirles vivir en prisión siendo mantenidos por los contribuyentes, y pues Rawlins, el pueblo que asesinó a George “Big Nose”Parrot fue la primera opción para construir una nueva penitenciaría.
Los habitantes se encargaban de que los prisioneros no tuvieran una vida fácil y que los condenados a muerte no vivieran mucho.
Los trataban tan mal, que el propio alcalde de la prisión decidió hacer algo para que los presos pudieran ser alimentados con dignidad.
Así que Felix Alston, Alcalde de la prisión y gran fanático del Baseball tuvo la idea de formar un equipo con los presos que estaban condenados a muerte, si ganaban iría aplazando su sentencia pero si perdían no haría nada por evitar que fueran ahorcados.
El equipo estaba compuesto en su mayoría por asesinos, como George Sabin, que mató a varios pastores, Jack Carter que jugaba de tercera base y había asesinado a un anciano, Joseph Seng asesinó al amante de su esposa.
Leroy Cooke mató a un hombre que le robó dinero, William Boyer jugaba de pitcher y asesinó a su padre con un abrecartas, el catcher era Horace Donavan y estaba ahí por asesinar a su cuñado y finalmente Darius Rowan y Lazlo Korda que estaban ahí por violación.
Bueno, pues estos angelitos fueron llamados “Las Estrellas del Pabellón de la Muerte” y bajo la vigilancia de varios guardias armados lograron su primera victoria.
Mucha gente sintió simpatía con los presos, incluso muchos en la ciudad ganaron bastante dinero al apostar que el equipo ganaría.
Se les permitió jugar de nuevo, aunque en esa ocasión tristemente nuestros protagonistas, perdieron…
…casi todo el partido, pero ya saben cómo es el béisbol y en la última entrada le dieron la vuelta al marcador y lograron su segunda victoria 🎉
George Sabin el capitán del equipo que ya había obtuvo permiso para salir de la prisión en incluso visitaba una cantina desde donde manejaba apuestas ilegales ante el beneplácito de las autoridades locales.
Lo único que tenían que hacer era no perder, pero llegó el 3er partido..
… y todos fueron conscientes que cada partido ganado les daba más días de vida.
Jugaron mejor que nunca y además, de nuevo muchos en el pueblo obtuvieron grandes ganancias cuando el equipo ganó su tercer partido.
De pronto ya no les caían mal los presos.
Para cuando llegó el cuarto juego ya era una locura la situación, todos estaban esperando el cambio de turno en la prisión para saber el resultado del partido.
Por la tarde un guardia salió y casi a punto de soltar el llanto y le anunció a la multitud que los presos habían…
… ganado.
Empezaron incluso a soñar con la libertad, muchos se habían acostumbrado a la vida, se arrepentían profundamente de sus crímenes y más que nunca deseaban ganar el siguiente partido.
Aseguraban que poco a poco se volvían mejores personas.
Pero el quinto partido nunca llegó…
El gobernador de Wyoming se enteró de las apuestas, de cómo usaban a los prisioneros como diversión y canceló todo.
Los presos que pensaban que tendrían más tiempo de vida fueron ejecutados, empezando por Joseph Seng que fue ahorcado el 22 de mayo de 1912 y de ahí poco a poco cada uno fue cumpliendo su cita con la horca.
Los presos empezaron a cambiar de verdad y se arrepintieron jugando béisbol, no tanto con el castigo.
¿Ustedes están de acuerdo con la pena de muerte para cambiar las cosas?
O
¿Creen que una reforma en el sistema penal sería suficiente para formar una mejor sociedad?
Y así terminó la historia del tristemente célebre equipo de béisbol de la penitenciaría de Wyoming que aprendió al final que un país te podrá perdonar todo, menos que no llegues al quinto partido.
Ojo aquí @miseleccionmx 🙏🏻
Fin.
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