Thread by @noaylucky

- "Abuelo,cuéntame mi cuento otra vez".- Le dijo la niña.
- "¿Otra vez?", te lo he contado un montón de veces, y además es un poco triste ¿No?.- Contestó el abuelo.
- "Me gusta ese,aunque sea triste,es el mío".
- "Venga pues tráelo y lo leemos".
- "A ver, el cuento se titula...⬇️

"ALICIA EN EL PAIS DE LAS MASCARILLAS"

"Érase una vez una niña, rubia como el trigo, con unos ojos ojos azules enormes, y una sonrisa tan bonita, que hacía palidecer a las flores que teñían de colores los campos de aquel país.
El rojo de las rosas no era nada en comparación con su mirada alegre.

Se llamaba Alicia.

Alicia tenía 7 años.

Una mañana cálida de abril, Alicia le preguntó a su madre: Mamá, ¿Porque no bajamos a la calle a jugar?.

Resignada, su madre le contestó lo mismo que le contestaba siempre: Alicia, no podemos bajar porque hay un bicho en la calle, y puede ponernos malitas.

"Alicia, con su gran sonrisa siempre en la cara, asentía y le decía a su madre siempre las mismas palabras: " Ojalá tuviéramos un perrito para poder salir a pasear un rato".

Su madre la miraba con cierta pena, pero sabía que así es como más seguras estaban.
Eso decían en la TV.

"Pasaron muchos días en casa, de su cuarto al salón, del salón a la cocina, de la cocina al cuarto de su madre...
Alicia se preguntaba por qué no había cole, ¡Eran unas vacaciones larguísimas!.

Tenía ganas de ver a sus amigas.

Tenia ganas de volver a jugar con ellas.

"Después de mucho tiempo, un día muy soleado, escuchó en la TV (que siempre estaba encendida), que a partir de mañana, podrían salir todos a pasear.

Alicia se puso muy contenta.

Podría volver a ver a sus amigas, jugar con ellas, contarles todo lo que había hecho con su madre...

"Alicia se fue a su cuarto, y comenzó a maquillarse. ¡Tenía que estar preparada para el gran día!.
Al rato de estar en silencio, su madre se acercó a comprobar que hacía Alicia.
Y al verla maquillándose, le preguntó:
- ¿Que haces, Alicia?
- Preparándome para mañana, mamá.

-¿Que pasa mañana?. - le preguntó su madre.

- Que mañana ya podremos salir a la calle, mamá. Lo dijeron en la TV.

- No hija no. Mañana no saldremos. El bicho sigue estando, y podemos ponernos malitas si salimos.

- Pero mamá...

- No hay más que hablar, Alicia. Ponte a recoger.

" Alicia comenzó a llorar. Su sonrisa desapareció por un rato. ¿Por qué no le dejaba mamá salir a la calle?.

No lo entendía.

Se acordó de sus abuelos.

Quería estar con ellos, hacía mucho que no jugaban juntos, que no le leían un cuento.

No quería verlos otra vez por el móvil.

"Mamá, ¿Por qué no vienen los abuelos a jugar un rato conmigo?.
- No pueden Alicia. Si vienen podrían ponerse malitos y morirse.

Alicia estaba triste, cada día sonreía un poco menos.

Su mirada azul se tornaba gris.

Cada vez lloraba más a menudo.

"Así pasaron los meses, poco a poco, su mamá se decidió a bajar a pasear con ella.

Era muy poco rato, pero era mejor eso que estar en casa.

Aún no había visto a sus amigas.

Ni a sus abuelos.

Su mamá compró una caja de mascarillas azules.

Le dijo que había que ponérselas.

"De un día para otro, Alicia dejó de ver la cara de la gente.
Ya no sabía si la persona de enfrente le sonreía o estaba enfadada.
Eso le entristecía aún más.
Además, ahora, sus amigas y ella también la tenían que llevar en el cole.
Ya no sonreía.

"Alicia cada vez tenía menos apetito.
En el cole no podía jugar con sus amigas, no estaba permitido pasar la línea del patio de su clase.
Cuando preguntó porqué, le dijeron algo de una burbuja.
No entendía porqué no podían jugar juntas.
Y la mascarilla puesta. Siempre.

"Alicia no entendía porqué su mamá, sus profesores, sus abuelos, todos estaban tan asustados.
Tan asustados que le prohibieron jugar en el parque.
Tampoco podía jugar con sus primos.
No podían celebrar la Navidad con la familia.
No había cabalgata de Reyes.
Ya no había nada.

"Una mañana fría, lluviosa, triste, Alicia escuchó a su madre hablando por teléfono.
Era su abuela, estaba muy malita.
Su mamá lloraba.
Al colgar le preguntó que pasaba.
Su mamá le dijo que la abuela se había puesto muy malita del corazón y que se había marchado.

"Que ahora nos miraría desde la estrella que más brillaba.
Alicia no pudo despedirse de su abuela.
Casi ni recordaba como eran los abrazos de su abuela. No los volvería a sentir...
Los días pasaron, lo normal era estar triste.
No sonreía, no jugaba, solo lloraba.

"Empezó un nuevo curso, y volvieron las mascarillas y las divisiones en los patios.
Todo seguía igual, excepto que los adultos en los bares, en los trabajos, o en la calle, podían ir sin mascarilla. Ver las sonrisas de otros adultos.
Pero los niños no podían en el colegio.

"¿Porqué nos castigaban?
¿Hicimos algo malo?
¿Tan mal nos habíamos portado que ni siquiera nos dejaban jugar juntos en el patio?
¿Porqué ellos no llevaban mascarillas y a mi no me dejaban ver la cara de mis amigos?
No hicimos nada malo...
Sólo somos niños...

El abuelo empezó a llorar.
Al verle llorar, la niña le preguntó:
- ¿Que te pasa abuelo?
- Ya sabes que este cuento me pone triste, Alicia. Me hace recordar lo que le hicieron a los niños.
- Pero abuelo, ¿Esto pasó de verdad?.¿De verdad hicieron eso a los niños?.

- Si, Alicia. A tu abuela y a mi nos trataron así.
Hubo niños que sufrieron mucho.
Soledad, abandono, pena, miedo...
- ¿Por eso somos el pais de las mascarillas?.
- Así es, Alicia. Por eso nos llaman así.
Este no es país para niños.

Buenas noches, mi niña.
Buenas noches, abuelo.