Nacho Montes de Oca Profile picture
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Nov 8, 2021, 20 tweets

Ante el asesinato del quiosquero en La Matanza, el oficialismo salió a decir que todo era culpa de los jueces. Esa excusa se repite y vamos a desmontarla en diez pasos para probar que la responsabilidad es de los políticos, del peronismo y particularmente de la cepa kirchnerista

En primer lugar, si el juez suelta presos o directamente es una porquería es por el sistema de nombramiento, que depende del Senado dominado desde 1983 por el peronismo. Y si el juez es ignorante, es porque se aprueban los pliegos de tipos como Bavia reprobado en el proceso

En segundo lugar, si el juez no sirve debe ser removido. Desde 2006 el peronismo apoyó la toma de control kirchnerista del Consejo de la Magistratura que por la reforma constitucional de 1994 tiene ese poder. O sea que controlan el sistema de nombramiento y remoción de jueces

En tercer lugar, el peronismo domina ambas cámaras hace muchos años y con ello la posibilidad de decidir el contenido tanto del Código Penal como de los procedimientos que usan los jueces para decidir cuándo un preso queda dentro o fuera al cometer un delito.

En cuarto lugar, los protocolos para actuar ante un delito dependen de los ministerios de seguridad nacional y provinciales. Son ellos los que deciden dónde y cuándo hay policías. Y los intendentes planifican ese despliegue. Revisen los mapas del delito y los signos políticos

Quinto, desde el Poder Ejecutivo se estableció en 2020 una política de liberación de presos promovida por Pietragalla, jefe de la Secretaria de DDHH del Ministerio de Justicia de la Nación. Y la abogada patrocinante era funcionaria de Mayra Mendoza, de La Cámpora

Sexto, los despliegues. Desde 2020 se aplica un sistema de postas de control para revisar documentación y hasta hace poco certificados Covid en lugar de destinarlos a patrullar y perseguir chorros. El foco fue puesto en el control de los ciudadanos, no en la seguridad

Séptimo, el equipamiento. El negocio de comprar nuevas patrullas y plotearlas con el nombre de los intendentes forma parte de la campaña permanente por los votos. Pero ayer vimos policías empujando una patrulla que no andaba. No hay equipos, pero sobra el dinero

Octavo, el lugar que le dan a la seguridad desde el partido gobernante se mide por la designación de una socióloga sin experiencia como ministro de seguridad, su reemplazo por un político que viene a controlar votos y en la provincia por un tipo que patrulla estudios de TV

Noveno, la actitud ante el delito: desde el rechazo a las Taser a la toma de posición contra el policía Chocobar que defendió a un turista apuñalado, expresan una postura para limitar la intervención policial con grandes concesiones ante el crimen. Esa postura es política

Décimo, la cuestión filosófica ante el delito. Perseguidos por la evidencia de corrupción, el kirchnerismo impuso una mirada única y ambigua ante al delito que privilegió la llegada de jueces manejables con complicidad del resto del peronismo. Así, el panorama termina de pintarse

Todo esto no hubiera sido posible sin el zaffaronismo, hegemónico en el kirchnerismo por una vieja orden de Néstor, también abrazado por la izquierda y una gran parte del periodismo. Parte de la base que el criminal es la víctima y borronea a los verdaderos perjudicados

El zaffaronismo se basó en las salvajadas cometidas por policías, pero nunca logró frenar los delitos cometidos por uniformados, como pudimos comprobar durante la cuarentena. Solo alimentó de impunidad de los criminales, los cargos y fondos a los foros de los que lo promueven

Cada fuerza policial cuenta con su oficina de Asuntos Internos para frenar la corrupción interna y purgar a policías violentos. Solo en la provincia de Buenos Aires se rajaron a 2.000 efectivos en el anterior mandato. El mecanismo para limpiar existe, pero depende de la política

Ahora, con estas 10 razones en la cabeza, volvamos a leer la excusa de “son los jueces”. No, no son solo los jueces, es la política y un partido que desde 1983 tiene los recursos políticos, presupuestarios y policiales para frenar esta locura. No somos ignorantes. Somos víctimas

Sabemos que el puntero muchas veces convive o forma parte del delito. Que el barrabrava es guardaespaldas del intendente. Que el juez muchas veces larga al chorro por una contribución de la que participa el comisario. Ese sistema es político y tiene a un partido como arquitecto.

PS: parafraseando al indio neoyorquino, si “Todo preso es político”, también lo es cada víctima del delito . Y el peronismo tiene la mayor parte de la responsabilidad porque el circuito que construyeron está provocando que el país sea un mapa del delito. La Matanza, es peronista

Continúo publicando gracias a los que me apoyan para seguir haciendo periodismo libre, sin sugerencias de anunciantes y funcionarios
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¿No te digo? Poncio Pilatos tardó un minuto en validar en nombre de todo su partido que la cuestión es política
Gracias Sergio, avisame a que estudio de TV te mando los bombones

Corrección, Frederic no es socióloga sino antropóloga.

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