#Hilo 🧵📽️Andrés Soler no requirió de un papel estelar en una película o una obra de teatro para dejar en claro su capacidad actoral. Le recordamos al cumplirse 123 años de su nacimiento.
Andrés Díaz Pavia, nombre original del actor, nació el 18 de noviembre de 1898 en Saltillo Coahuila, y fue parte de la dinastía Soler; Soler, era el apellido materno de la madre de Fernando, Domingo, Andrés, Irene y Julián, se dedicaron a la actuación.
Su debut en el cine ocurrió en 1935 en la cinta ‘No matarás’, dirigida por Arcady Boytler, lo que fue el inicio de una carrera en el cine que dejó más de 190 películas.
‘Historia de un gran amor’, de 1942, cinta protagonizada por Gloria Marín y Jorge Negrete, fue el primer papel de Andrés Soler que lo mostró como un actor que dejaría grandes momentos. Un año después, en ‘Lo que solo el hombre puede sufrir’, tuvo uno de sus pocos protagónicos.
A lo largo de su carrera, tuvo la suerte de trabajar con grandes directores, uno de ellos el español Luis Buñuel, la primera película fue ‘El Gran Calavera’, de 1949, que marcó el debut de Buñuel en México.
Y más tarde, en 1953, Andrés Soler fue parte del elenco de ‘El bruto’, en donde compartió créditos con Pedro Armendáriz y Katy Jurado.
En la misma Época de Oro del cine mexicano, Andrés Soler también compartió el set con Germán Valdés 'Tin Tan', en ‘El ceniciento’, de 1952, en donde encarnó a un hado padrino muy especial que se asemeja al diablo.
Los dos actores se reencontraron en 1957 en ‘Las Aventuras de Pito Pérez’, en donde Andrés Soler escucha con mucha atención a esta especie de juglar al que le dio vida 'Tin Tan'.
Fueron muy pocas las películas que Andrés Soler protagonizó y fue reconocido por los directores y productores como el mejor actor de reparto de la historia del cine mexicano.
En ‘Los tres alegres compadres’, de 1952, Andrés Soler compartió el protagónico con Jorge Negrete y Pedro Armendáriz, en una comedia ranchera que fue un trancazo en la taquilla.
Y como lo hizo en ‘El Ceniciento’, el actor tenía un gran vis cómico y el cual quedó claro en ‘Los platillos voladores’ de 1956.
En su filmografía también se cuentan películas como ‘Los Fernández de Peralvillo’, ‘Un rincón cerca del cielo’, ‘Un extraño en la escalera’, ‘Tizoc’, entre otras.
En la década de los sesenta, Andrés Soler fue parte de ‘Tlayucan’, de 1962, dirigida por Luis Alcoriza, y la cual incluso fue nominada a los Premios Óscar a Mejor Película Extranjera.
Su activismo como dirigente de la Asociación Nacional de Actores, le ganó simpatías entre sus compañeros y también impartió sus conocimientos en la Academia de Arte Dramático de la ANDA. Andrés Soler nunca se casó, pero tuvo una hija por adopción que se llamó Gloria Jordán.
La muerte lo sorprendió en julio de 1969, mientras participaba en las filmaciones de ‘El hermano Capulina’, en donde personificaba a un fraile que es el encargado de un orfanato.
A su funeral asistieron figuras como Katy Jurado, Elsa Cárdenas, Carmelita González, Luis Aguilar, entre otras estrellas. Recordamos al actor que dejó cerca de 200 películas y una de ellas fue ‘La Oveja negra', al lado de Pedro Infante. Final del #Hilo.
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