Es difícil comprender que Marvel Comics, nuestra Marvel, la editorial que lo peta a todos los niveles, declarase la bancarrota en los años noventa.
Para los que vivimos la época no es tan raro. La Marvel de los noventa tomó muchas decisiones cuestionables. Va #FunsTurrasDeComics.
El año 94, por ejemplo, arrancaba la Saga del Clon de Spider-Man. Considerada (Mephistazo aparte) la peor etapa del personaje.
La premisa era que un clon de Spider-Man que supuestamente había fallecido en un cómic de los 70, en realidad estaba vivo y era el Peter Parker original.
La Saga del Clon fue un despropósito tras otro. Ahora uno es el original. Ahora el otro. Ahora aparecen otros clones.
Es verdad que en su momento fue un éxito, pero muchos fans, entre los que me incluyo, no perdonan esta etapa.
Lo único bueno, el nacimiento de Araña Escarlata.
Otra saga de la época: Onslaught. Aparecía un nuevo villano misterioso, super poderoso, destruyéndolo todo a su paso. Al final se descubría que en realidad era el Profesor Xavier, que al atacar a Magneto, había fusionado su personalidad maligna con la suya.
En el fondo la saga Onslaught no estaba TAN mal. El problema fue su final. Los Vengadores, los 4 Fantásticos y otros héroes sacrificaban su vida para derrotarlo.
En realidad, el final de Onslaught fue la maniobra de Marvel para cancelar las series de cómics que no estaban funcionando bien. Y en aquel entonces solo funcionaban los X-Men y Spider-Man.
Así que todos los demás, ale, al hoyo.
O no exactamente. Porque a Onslaught le continuó "Heroes Reborn". La premisa era que Franklin Richards, el hijo de los 4F, había creado una tierra paralela donde había "resucitado" a todos estos héroes. Quienes no recordaban nada.
Se aprovechó así para "modernizar" a estos personajes. Volver a contar sus orígenes. Pero con ese toque tan noventero. Tan histriónico. Tan pasado de vueltas.
La idea era seguir años con este universo alternativo pero la idea no cuajó. En verdad ninguna serie tuvo nada memorable
Así que solo un año más tarde todos los héroes volvieron al universo Marvel normal en "Heroes Return", que supuso además uno de los primeros grandes proyectos de Salvador Larroca.
Y todo siguió igual como si nada.
En su día fui muy fan de estas historias: el "Maximum Carnage" de Spider-Man y el "Fatal Attractions" de X-Men. Pero creo que han envejecido bastante regular. La idea en ambos casos era buena, pero los leo hoy en día y no me parecen ni la mitad de buenos a como los veía entonces.
En el primero se abusó de personajes muy, muy pasados de vueltas.
Y en el segundo, bueno, la escena de como arrancan el adamantium a Lobezno es memorable. Lo que no era tanto es que de repente lo volvieran más "feral". ¡¡Que le quitaron la nariz!! No tenía sentido.
Más decisiones controvertidas: el Tony Stark adolescente. Sí amigos, esto pasó. Tony Stark se vuelve loco y los Vengadores deciden viajar en el tiempo y traer a un Tony Stark adolescente para combatirlo. Y una vez derrotado, lo dejan ahí como el Iron Man oficial.
Otro momento destacable, por decir algo: Janet Van Dyne, la Avispa, se convertía en una Avispa de verdad... Bueno, más o menos...
La inspiración "manga", creo, es más que evidente.
Otras cosas de la Marvel noventera que han envejecido muy mal.
Los Vengadores con chaqueta de cuero. Si querías ser Vengador, tenías que llevar la chaqueta de cuero oficial.
Hasta la Viuda Negra y el Caballero negro, encima de su armadura, llevaban la chupa de cuero.
Los rediseños, ugh... Algunos estuvieron bien, pero había como una necesidad de adaptar a los superhéroes Marvel a la estética "radical" de los noventa. Y el resultado fue... Bueno, juzgad por vosotros mismos a Ojo de Halcón, Thor, Susan Storm y al Capi
El dibujo. Hubo grandes artistas en los 90, pero en general había mucho imitador de Lee, Liefeld, McFarlane o Larsen, con muy poca gracia. Que básicamente se limitaban a dibujar hombres de músculos imposibles y mujeres con siluetas imposibles.
Liefeld. Así, sin más. Liefeld se prodigó como ninguno en la Marvel de los 90.
Se que a muchos os gusta Rob Liefeld. Algo que nunca podré comprender, lo siento. Ni siquiera me gustó su laureada X-Force.
Otra cosa que me molestaba en los 90, aunque esto ya es personal, era el abuso de X-Men y Spider-Man. Eran las series que funcionaban y Marvel abusó de ellas. Spidey tenía mínimo cuatro series en circulación y los X-Men, buf, infinitas... Imposible seguirlas todas.
Sería injusto, sin embargo, culpar a todas estas decisiones editoriales de la crisis de Marvel en los 90. En realidad fue una gran crisis del cómic causado por muchos factores. Por la especulación, la aparición de nuevas editoriales como Image o por reestructuraciones internas.
Además, los 90 también tuvieron publicaciones Marvel memorables. Como el Siempre Vengadores, la Era de Apocalipsis, el rediseño del Spider-Man de McFarlane o La Guerra del Infinito. Por decir solo cuatro, que hay más...
Pero, en conjunto, hay muchas más decisiones discutibles en la Marvel de los 90 que en cualquier otra época. Y ojo, ¿eh? Que DC Comics no puede tirar la piedra libre de pecado. Que esta es la época de los Supermanes de colores o el Batman Azrael.
Marvel declaró la bancarrota por estas y otras muchas nefastas decisiones. ¿Y que pasó después? Que llegaron los 2000, con Avi Arad y Joe Quesada, y la editorial consiguió salvarse.
Pero esta es otra historia para otro momento.
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