Un poco de mitología 🧵🧵. Hoy les traemos la historia de ZEUS y SÉMELE. El rey de los dioses griegos, Zeus, era muy dado a los escarceos amorosos. Un buen día, llamó su atención la joven Sémele, sacerdotisa consagrada al culto de este mismo dios. Con ella mantuvo relaciones.
Como resultado de estas relaciones con Zeus en su forma humana, Sémele quedó embarazada de Zeus. Esto despertó las iras de su esposa Hera, quien, furiosa por la infidelidad, trató de vengarse. Adoptó la forma de una anciana y se hizo amiga de Sémele, y urdió un malvado plan.
Logró sembrar en Sémele dudas sobre la identidad de su amante, y la convenció para que le pidiera, tras atarlo mediante juramento, que le mostrara su aspecto divino. Hera sabía que esto sería fatal para Sémele, dado que el tonante esplendor de Zeus mataría a una mortal como ella.
Sémele hizo ello mismo, y, pese que Zeus trató de disuadirla, no lo consiguió. El rey del Olimpo se rodeó de sus rayos y truenos más débiles para intentar proteger a Sémele, pero fue inútil. En cuanto vio la verdadera forma de Zeus, cayó fulminada por sus rayos. Cuadro de Rubens.
Pero el niño que albergaba en su vientre sobrevivió. Zeus lo sacó del seno de la madre y lo cosió a su rodilla, como se ve en este sarcófago romano del siglo II.
Ese niño era Dioniso, o Baco para los romanos, el dios del vino y de la fiesta, que al cabo de los meses nació de su rodilla, como se ve en esta simpática cerámica de figuras rojas. Dioniso se convirtió en una divinidad, para frustración de la engañada Hera.
Hasta aquí el hilito etimológico. Buenas noches.
Share this Scrolly Tale with your friends.
A Scrolly Tale is a new way to read Twitter threads with a more visually immersive experience.
Discover more beautiful Scrolly Tales like this.