Pocas áreas del sistema de salud venezolano han sufrido tanto como las maternidades. Los médicos emigran. No hay insumos básicos. Para comprender la magnitud de la crisis, pasamos semanas con mujeres embarazadas que intentaban navegar un sistema destrozado.nyti.ms/2Xqmfo2
.@julieturkewitz, @IsayenHG, @surdaneta y la fotógrafa @MeridithKohut acompañaron a mujeres embarazadas a seis hospitales en Venezuela y a otra a uno en Colombia en su intento por dar a luz.
La falta de insumos y equipos básicos en las maternidades es, como escribe @IsayenHG, “una constante”. Ir de hospital en hospital se ha convertido en un elemento aterrador de los partos en Venezuela, una ruleta, como se le dice.
Milagros Vásquez, de 20 años, tomó varios autobuses desde su pueblo hasta Caracas y pasó dos días rogando que algún hospital la ingresara. Uno no tenía instrumental estéril. En otro no había incubadora. Del tercero se marchó llorando. 
En el quinto hospital al que Milagros acudió después de que se le rompió la fuente, su mamá aporreó la puerta pidiendo ayuda.
Milagros se rehusó a marcharse y se quedó aferrada a la cintura de su mamá, llorando y aterrada. Solo hasta después de que se desmayó la admitieron. Dio a luz a su bebé 48 horas después de iniciados los dolores de parto.
Cristal, la bebé de Milagros, nació prematura y pesó menos de un kilo y medio. No había incubadora y no sobrevivió a la mañana siguiente.
La dimensión de la crisis se desconoce. Los datos más recientes son de 2016, cuando la mortalidad materna se disparó 65% y la mortalidad infantil 30%. La ministra que publicó las cifras fue despedida. Desde entonces la información es un secreto de Estado. nyti.ms/2Xqmfo2
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