La otra opción es ejecutar a la nobleza, inventar un nuevo calendario, abolir lo religioso por un culto a la razón y ya que estamos recuperar el sombrero de tres picos.
Yo creo que mejor el impuesto, ¿no?
Yo creo que mejor el impuesto, ¿no?
El chiste se hace solo, pero revela algo: nuestra sociedad se ha derechizado tanto que un simple impuesto a los ricos, cuando la mitad de este país cobra mil euros o menos, se recibe con indignación y movimientos agitados de abanico.
Lo mismo es que el chiste no lo es tanto.
Lo mismo es que el chiste no lo es tanto.
Que de buenos nos hemos vuelto (históricamente) gilipollas.
Es que algunos nos hemos tirado los diez últimos putos años haciendo la compra con la calculadora del móvil a mano, contemplando la estabilidad desde un catalejo y viendo como una banda se sinvergüenzas contaban billetes y volquetes de putas.
¿Y qué hicimos?
¿Y qué hicimos?
Escribir, manifestarnos sin molestar mucho, incluso alguna gente se metió a la política, se atuvo a una reglas no precisamente favorables, sabiendo que de poder cambiar algo iba a ser poco.
¿Y se plantea ese poco, esa minucia y todavía tienen los santos cojones de indignarse?
¿Y se plantea ese poco, esa minucia y todavía tienen los santos cojones de indignarse?
Lo de "agárrense" va a ser verdad como se les pase por la cabeza que esto va a ser igual que hace diez años y nos vayamos a tener que comer el marrón los mismos. Ahí el menor de sus problemas van a ser los impuestos, Podemos o Iglesias.
Y paro porque estoy de una mala hostia tan profunda que a partir de aquí todo lo escrito sería muy muy feo.
